Roanoke, punto caliente en el mapa de la violencia en Estados Unidos
Esta ciudad de tama?o medio ha sido ya escenario de varias masacres
Cuando supo que Ahmad Rahami hab¨ªa comprado su pistola a 20 metros de su despacho, en el Roanoke College, Harry Wilson se dijo: "Puede que seamos la capital estadounidense de las armas".?
Ahmad Rahmani presuntamente habr¨ªa colocado la bomba que dej¨® 29 heridos en Nueva York el pasado 29 de septiembre. Roanoke, ciudad de tama?o medio al Oeste de Virginia, ya fue noticia en agosto de 2015 cuando un extrabajador de la televisi¨®n local mat¨® a tiros a una periodista y a su c¨¢mara en directo, para luego publicar la escena en Facebook. Nueve a?os antes, la masacre del Virginia Tech (37 muertos) a pocos kil¨®metros de Roanoke, tambi¨¦n tuvo eco a escala mundial.
Desgraciadamente, los motivos para ir a visitar a Harry Wilson se multiplican. Este profesor del Roanoke College ha escrito varias obras dedicadas al control de armas. "Estos hechos tr¨¢gicos est¨¢n fuera de lo com¨²n. Roanoke (97.000 habitantes en 2010) no es Chicago", asegura. "Aqu¨ª la media anual de muertes por armas de fuego es de 10 personas.
"No somos muy buenos en identificar a los malos, los terroristas o autores de sucesos", analiza el profesor. "La mayor¨ªa de estas personas deber¨ªan poder tener acceso a tratamientos. Hemos tomado muy malas decisiones en el seguimiento de las enfermedades mentales, ya en los a?os 70".
Si le preguntamos si considera que la creaci¨®n de controles m¨¢s estrictos en el momento de la compra de armas podr¨ªa evitar estas masacres nos responde: "No creo que sirviera de nada. El autor de la masacre del Virginia Tech hab¨ªa pasado todas las pruebas. En aquella ¨¦poca solo se pod¨ªa comprar una pistola al mes y ¨¦l esper¨® un mes m¨¢s". En efecto, la masacre se cometi¨® con dos pistolas. Rahami, por su parte, ense?¨® un permiso de pesca emitido por el Estado de Virginia, donde se supone que reside su padre, y se march¨® con la pistola a Nueva Jersey, donde las leyes son mucho m¨¢s severas.
"Si parti¨¦ramos de una situaci¨®n en la que no hubiera ning¨²n arma en circulaci¨®n estos controles podr¨ªan resultar ¨²tiles. Pero hay 350 millones de armas en Estados Unidos".
El profesor ve con buenos ojos el endurecimiento de los criterios en los controles, aunque ¨¦l mismo sea coleccionista: "Esto me traer¨¢ problemas con mis amigos". Sin embargo, se muestra fatalista. "Si parti¨¦ramos de una situaci¨®n en la que no hubiera ning¨²n arma en circulaci¨®n estos controles podr¨ªan resultar ¨²tiles. Pero hay 350 millones de armas en Estados Unidos. En Canad¨¢ la gente tiene tambi¨¦n muchas armas y no por ello se matan los unos a los otro. En Estados Unidos tenemos una cultura muy violenta".
?Cree que la multiplicaci¨®n de estas masacres ha hecho evolucionar a la opini¨®n p¨²blica? "Llevo mucho tiempo pensando que no. Como en muchos otros temas, las opiniones est¨¢n muy polarizadas. Para algunos, redactar listas de propietarios de armas, como propone Clinton, es el primer paso hacia la confiscaci¨®n. Y nuestra Constituci¨®n nos garantiza el derecho a poseerlas". El profesor tambi¨¦n ve una evoluci¨®n en cuanto a la demograf¨ªa de Virginia. "Terry McAuliffe ha sido elegido gobernador del Estado, a¨²n mostr¨¢ndose enemigo ac¨¦rrimo de la NRA, el lobby de las armas. El Sur del Estado es rural y all¨ª todo el mundo tiene un arma. Pero la regi¨®n est¨¢ perdiendo habitantes en beneficio del Norte, zona m¨¢s progresista".
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