La ONU pide la libertad de una ultrakirchnerista que lleva 10 meses presa

La detenci¨®n de Milagro Sala ha dejado de ser un problema dom¨¦stico en Argentina. El grupo de trabajo sobre Detenci¨®n Arbitraria de Naciones Unidas (ONU) pidi¨® al gobierno de Mauricio Macri que la activista social y actual diputada del Parlasur sea liberada ¡°de inmediato¡± por considerar ¡°arbitraria¡± su detenci¨®n en enero pasado. Seg¨²n un comunicado firmado en conjunto por el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y Amnist¨ªa Internacional (AI), organizaciones impulsoras de la demanda ante la ONU, el grupo de trabajo determin¨® que hubo una trama de ¡°acusaciones consecutivas" destinadas a dejar en prisi¨®n a la militante ultrakirchnerista que vulneraron ¡°la independencia judicial". La Canciller¨ªa argentina remiti¨® los detalles del estudio a la justicia de la provincia de Jujuy (norte), responsable de la detenci¨®n, con la advertencia de que se trata de una opini¨®n no vinculante.

¡°El Grupo entendi¨® que la detenci¨®n de Sala ¡®se dio como resultado del ejercicio de sus derechos humanos¡¯, solicit¨® que sea inmediatamente liberada, que se investigue la violaci¨®n de sus derechos y que el Estado informe como va a asegurar que estos hechos no vuelvan a repetirse. El Estado argentino tiene la responsabilidad de cumplir con las medidas determinadas por el Grupo de trabajo¡±, dice el comunicado del CELS y AI. El encarcelamiento de Milagro Sala, l¨ªder de la agrupaci¨®n Tupac Amaru, ha sido uno de los principales focos de conflicto de Macri con los movimientos sociales m¨¢s vinculados al kirchnerismo, quienes consideran a la mujer una detenida pol¨ªtica. La Tupac Amaru que lidera Sala pas¨® de ser una organizaci¨®n de parados en la crisis argentina de 2001 a una que con fondos estatales construy¨® en los 12 a?os de gobierno de N¨¦stor y Cristina Kirchner miles de viviendas, peque?as f¨¢bricas, centros educativos y sanitarios y en el que trabajaban m¨¢s de 6.000 personas. Sin embargo, su actividad siempre fue pol¨¦mica por formar una especie de estado paralelo. El nuevo gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, aliado de Macri, acusa desde hace a?os a Sala de haber montado ¡°un sistema de desv¨ªo de dinero p¨²blico¡±.

Por eso, apenas asumi¨® el poder en diciembre, se neg¨® a seguir dando fondos a la Tupac Amaru y dijo que solo se los enviar¨ªa directamente a las 300 cooperativas que la integraban. Ante esa decisi¨®n, Sala organiz¨® una acampada frente a la Casa de Gobierno juje?a y prometi¨® multiplicar las protestas en otras plazas de la provincia y del resto de Argentina. Un juez juje?o la detuvo el 16 de enero pasado, Amnist¨ªa Internacional pidi¨® su liberaci¨®n y, dos semanas m¨¢s tarde, otro juez a?adi¨® otro motivo para su detenci¨®n: la imput¨® por fraude a la administraci¨®n p¨²blica, asociaci¨®n il¨ªcita y extorsi¨®n por la gesti¨®n de los fondos para viviendas sociales. Desde el kirchnerismo acusaron enseguida a Macri de criminalizar la protesta social, mientras los medios difund¨ªan a cuentagotas nuevas denuncias que impidieron hasta ahora la libertad de la dirigente.

La detenci¨®n dirigente social foto tambi¨¦n tension¨® la relaci¨®n entre el papa Francisco y Macri. El 16 de febrero, d¨ªas antes de recibir por primera vez a Macri en el Vaticano, en aquella recordada fr¨ªa? visita de 22 minutos que puso en evidencia la distancia entre ambos l¨ªderes, Francisco envi¨® a Sala un rosario con su bendici¨®n. El macrismo qued¨® desconcertado ante el gesto, sobre todo porque Sala ya era para el gobierno la encarnaci¨®n de las denuncias de corrupci¨®n que se sumaban una a una contra el kirchnerismo y su entorno. Salas sigue presa casi 10 meses despu¨¦s de recibir aquel rosario papal. La ONU ahora ha sumado un nuevo elemento de presi¨®n a Macri.