Un a?o despu¨¦s de la victoria de Mauricio Macri, Argentina profundiza su crisis
El presidente conserva una valoraci¨®n del 51% por las expectativas de que en 2017 la econom¨ªa remonte pero necesita resultados
Mauricio Macri gan¨® las elecciones argentinas hace un a?o con una explosi¨®n de entusiasmo. Con una campa?a en positivo, que promet¨ªa ¡°la revoluci¨®n de la alegr¨ªa¡±, y una novedosa estrategia en redes sociales, le gan¨® al todopoderoso peronismo. Lo logr¨® solo por tres puntos, pero era algo que solo unos meses antes parec¨ªa imposible. Sin embargo, un a?o despu¨¦s, buena parte de ese entusiasmo ha desaparecido. Argentina sigue sumida en una recesi¨®n que incluso ha empeorado, con una inflaci¨®n descontrolada del 40% anual y una ca¨ªda del PIB de 3,4%.
¡°Hoy es un d¨ªa hist¨®rico, es un cambio de ¨¦poca, que yo les dije y ustedes creyeron, va a ser maravilloso. Y como tal es un cambio que nos tiene que llevar hacia el futuro, a las oportunidades que necesitamos para crecer, para progresar. Por eso este cambio no puede detenerse en revanchas o ajustes de cuentas. Este cambio tiene que poner toda la energ¨ªa y la vitalidad en construir la Argentina que so?amos. Hemos dicho que tenemos que construir una Argentina con pobreza cero y lo vamos a hacer juntos¡±. Era la noche electoral del 22 de noviembre. Macri ganaba la segunda vuelta frente a Daniel Scioli, el candidato peronista. Por los pelos, pero ganaba. Y promet¨ªa un mundo nuevo.
Por primera vez lograba la victoria en Argentina un exempresario multimillonario que no es peronista ni radical, sino de un partido nuevo, el PRO, inventado por ¨¦l, su mano derecha, Marcos Pe?a, y su gur¨² ecuatoriano, Jaime Dur¨¢n Barba. Solo dos a?os antes no llegaba al 15%. ¡°Fue un milagro¡±, le dec¨ªa poco despu¨¦s a EL PA?S el ecuatoriano. Macri vivi¨® un idilio con los argentinos. Su popularidad super¨® ampliamente el 60%, casi rozando el 70%. Levant¨® el cepo cambiario ¨Cque imped¨ªa comprar d¨®lares- y no pas¨® nada. Pag¨® a los fondos buitre 9.300 millones de d¨®lares y no pas¨® nada. Empez¨® a hacer pactos con los gobernadores, con los sindicatos, todos le aplaud¨ªan y sacaba las votaciones sin problemas en el Congreso.
Pero se le escap¨® el enemigo eterno de los presidentes argentinos: la inflaci¨®n. Los precios se han disparado de tal manera que Argentina ya es el pa¨ªs m¨¢s caro de los importantes de Latinoam¨¦rica y cada mes la diferencia aumenta, porque los precios siguen subiendo mucho m¨¢s que sus vecinos de Chile, Brasil, Per¨², Colombia o M¨¦xico y el peso apenas se deval¨²a. Pero ese desajuste, sumado a una recesi¨®n que ya hab¨ªa empezado en el final del kirchnerismo y ha empeorado ahora, entre otras cosas porque con estos precios la industria no es competitiva y con esta inflaci¨®n los consumidores cada vez est¨¢n m¨¢s ahogados, est¨¢ agotando la paciencia de los argentinos, que ya no la ten¨ªan entre la mayor de sus virtudes.
Los m¨¢s beneficiados del momento son los especialistas financieros que invierten en dinero, que se ha convertido en un negocio extraordinario con unas tasas de inter¨¦s del 27% y un d¨®lar bastante calmado. Tambi¨¦n el campo est¨¢ mejor, con una bajada de impuestos importante que ha devuelto la rentabilidad a la soja, al ma¨ªz y otros productos estrella hist¨®ricos en este pa¨ªs agr¨ªcola. La miner¨ªa, en buena parte en manos de multinacionales, tambi¨¦n tuvo bajadas de impuestos y creci¨®. Pero la industria, el comercio y la masa de habitantes del conurbano de Buenos Aires sufre cada vez m¨¢s.
Todos los expertos coinciden en que Macri gan¨® sobre todo por hartazgo del kirchnerismo, porque la gente quer¨ªa cambiar despu¨¦s de 13 a?os. Y ese cansancio no ha desaparecido. El Gobierno apela a la herencia recibida, a la mala situaci¨®n econ¨®mica que le dej¨® el kirchnerismo, y de momento eso, sumado a la enorme divisi¨®n de la oposici¨®n peronista, que est¨¢ en plena pelea para saber qui¨¦n la lidera, basta para que Macri aguante en las encuestas.
Aunque ha bajado bastante. Est¨¢ ahora en el 51% de valoraci¨®n positiva, seg¨²n el ¨²ltimo sondeo del Grupo de Opini¨®n P¨²blica (GOP). Es una de las m¨¢s altas de todos los dirigentes latinoamericanos, y es muy positivo si se tiene en cuenta la situaci¨®n econ¨®mica y las medidas duras que ha tomado, en especial subidas de la luz y el gas del 500%, pero el problema es la tendencia y el margen.
Los argentinos siguen confiando masivamente, seg¨²n todas las encuestas, en que en 2017 la situaci¨®n econ¨®mica remontar¨¢. Y es ah¨ª donde se juega de verdad todo, porque es un a?o electoral. Macri cumple as¨ª el primer a?o desde su victoria electoral con la necesidad de exhibir resultados. Prometi¨® que llegar¨ªan en el segundo semestre de 2016. Despu¨¦s dijo que ser¨ªan en el ¨²ltimo trimestre. Ahora ya habla de 2017. Despu¨¦s de 13 a?os de kirchnerismo, los argentinos han decidido concederle un margen importante a su presidente. Pero en alg¨²n momento le pedir¨¢n que cumpla lo que dijo la noche electoral: ¡°Yo estoy ac¨¢ jugado por todos los argentinos para ayudarlos a que cada d¨ªa vivan un poco mejor y sean m¨¢s felices¡±.
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