Dub¨¢i ve la Expo 2020 como palanca para ser capital empresarial de la zona
La ministra emirat¨ª de Cooperaci¨®n Internacional invita a las empresas espa?olas y latinoamericanas a sumarse al proyecto
Dub¨¢i quiere repetir el milagro. La ciudad surgida en medio del desierto hace apenas tres d¨¦cadas no se resigna a que las crisis globales y regionales apaguen su chispa. Desde la ventana del despacho de Reem al Hashimy en la sede de la Expo 2020 hoy s¨®lo se ve arena y rodadas de camiones. Ella, que adem¨¢s de ser directora general de ese proyecto es ministra de Cooperaci¨®n Internacional de Emiratos ?rabes Unidos (EAU, la federaci¨®n de la que Dub¨¢i es miembro), ve una oportunidad para convertir su ciudad en la capital empresarial de una zona del mundo tan pujante como compleja.
Dado su renombre internacional, cabe preguntarse para qu¨¦ necesita Dub¨¢i complicarse la vida (y el tr¨¢fico) con un evento de esta envergadura. ¡°La Expo va a coincidir con el 50? aniversario de EAU como naci¨®n. No se trata de tanto de establecer una marca como de una plataforma que traiga a pa¨ªses y empresas de ciertos sectores para producir impacto social en los asuntos que consideramos importantes¡±, explica la ministra Reem en una entrevista cuyo texto completo puede leerse aqu¨ª. (Llamarla por su nombre propio no es una descortes¨ªa, ni machista, sino lo habitual entre los ¨¢rabes, precedido del tratamiento pertinente).
Entre esos asuntos, destaca el cambio clim¨¢tico, las energ¨ªas renovables o la sostenibilidad, que constituye uno de los tres subtemas del proyecto. Muchos arquear¨¢n las cejas ante la osad¨ªa de una ciudad asociada al lujo, el despilfarro y la exageraci¨®n. ¡°Dub¨¢i no siempre ha sido lo que ven ahora¡±, apunta la responsable, ¡°mis ancestros tuvieron que sobrevivir con muy poco y aprovechar los escasos recursos de forma que les duraran y fuera sostenible. Hoy, la tecnolog¨ªa moderna nos puede ayudar a hacerlo mejor¡±.
La Expo se ha comprometido a utilizar energ¨ªa renovable y crear un entorno que respete la naturaleza. Adem¨¢s, el 85 % de la sede va a mantenerse como legado, transformado en un campus universitario y de investigaci¨®n. Y ah¨ª es donde se centran las ambiciones del emirato. Los dos kil¨®metros cuadrados del recinto son s¨®lo uno de los pilares de un nuevo barrio, Dub¨¢i Sur, que aspira convertirse en motor del crecimiento econ¨®mico e industrial de la zona.
¡°Nos gustar¨ªa que las empresas [de Espa?a, Portugal y los pa¨ªses de Am¨¦rica Latina] consideraran este lugar como una base para el resto de la regi¨®n. No es s¨®lo el mercado de Dub¨¢i o Emiratos. Pueden encontrar una oportunidad en Arabia Saud¨ª, en Kenia o en India", subraya convencida de que ¡°la distancia no es un obst¨¢culo¡±.
La de Dub¨¢i va a ser la primera Exposici¨®n Universal que se celebra en un pa¨ªs ¨¢rabe y en la regi¨®n de Oriente Pr¨®ximo, ?frica y el Asia Meridional, lo que los anglosajones han resumido en las siglas MEASA. Un total de 72 pa¨ªses con una poblaci¨®n de 2.800 millones de personas a cuatro horas de vuelo de la ciudad que aspira a ser su centro neur¨¢lgico.
¡°No estamos construyendo para seis meses, sino para los pr¨®ximos 15 o 20 a?os. Tambi¨¦n sabemos que no podemos hacerlo solos¡±, admite Reem antes de recordar el papel clave que han desempe?ado los inmigrantes en el desarrollo de la ciudad-Estado. ¡°Aqu¨ª vive gente de doscientas nacionalidades, con diferentes credos, diferentes culturas y trayectorias, diferentes idiomas. Creemos de verdad que eso a?ade fuerza al lugar¡±, se?ala.
Las cifras hablan por s¨ª solas. De los 9,5 millones de habitantes de EAU, el 88 % son extranjeros, un fen¨®meno que define la idiosincrasia del pa¨ªs. Los 50.000 obreros que la ministra adelanta que van a construir la Expo ser¨¢n esencialmente inmigrantes como los que han levantado los rascacielos del resto de la ciudad. ?Con qu¨¦ protecci¨®n van a contar dado que no est¨¢n autorizados los sindicatos? ¡°En Expo estamos comprometidos con una Carta de Bienestar de los Trabajadores que todos los contratistas y subcontratistas tienen que firmar. Si alguien no lo cumple, se le restringir¨¢ el contrato y se le incluir¨¢ en una lista negra¡±, asegura.
La empresa es enorme. Quedan tres a?os y medio para el gran d¨ªa. Desde la ventana s¨®lo se ve arena. La ministra sonr¨ªe. ¡°Estamos desplegando la infraestructura. Esperamos poner la primera piedra en enero. De hecho, acabamos de lanzar la licitaci¨®n para las constructoras. Creemos que el calendario es alcanzable, pero no vamos a dormirnos en los laureles", concluye.
J¨®venes y mujeres
En ninguna de las biograf¨ªas de Reem al Hashimy figura su edad. Aunque parece m¨¢s joven, le calculo entre 35 y 40 a?os, porque acab¨® un M¨¢ster en la Universidad de Harvard en 2002 y ella misma dice que es mayor de lo que aparenta.
La ministra subraya la importancia de implicar a los j¨®venes, en la Expo y en la sociedad. Pero no da especial relevancia a su condici¨®n de mujer. "En Emiratos siempre hemos cre¨ªdo no en la cuesti¨®n de g¨¦nero sino en la colaboraci¨®n de hombres y mujeres. (¡) Tenemos una piloto de combate, juezas, artistas, parlamentarias,¡ la presidenta de nuestra C¨¢mara es una mujer", enumera. Por eso sorprende a¨²n m¨¢s que la ley siga trat¨¢ndolas como menores y necesiten la tutela legal de un var¨®n sea el padre o el marido. "La ley tiene que ponerse al d¨ªa", admite antes de mencionar la reciente creaci¨®n de un consejo para la paridad de g¨¦nero.
En ambos casos, la promoci¨®n de j¨®venes y mujeres, se trata de objetivos que van de arriba abajo, parte del autoritarismo ilustrado con el que las familias gobernantes promueven la participaci¨®n de los emirat¨ªes sin ceder poder pol¨ªtico.
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