Donald Trump recrudece su ataque a los servicios de inteligencia

Era su primera rueda de prensa en seis meses, poco m¨¢s de una semana antes de que se convierta en el presidente n¨²mero 45 de Estados Unidos. En la Torre Trump de Nueva York la expectaci¨®n era m¨¢xima. El presidente electo compareci¨® acompa?ado del vicepresidente electo Mike Pence y sus hijos Don J¨²nior y Eric, adem¨¢s del equipo de abogados encargado de avalar sus decisiones para deshacer las sospechas sobre sus conflictos de inter¨¦s.

Trump, que adem¨¢s de constructor de rascacielos y fallido empresario de casinos fue estrella de la telerrealidad, escenific¨® la comparecencia como un reality show, con el drama, las digresiones, la confusi¨®n, los exabruptos propios de un espect¨¢culo de este tipo. Hablaba a ratos en tercera persona de s¨ª mismo. Bromeaba sobre su alergia a los g¨¦rmenes para negar que hubiese participado en org¨ªas en Mosc¨². Descalific¨® a periodistas y medios de comunicaci¨®n y neg¨® la palabra a uno de los periodistas de uno de estos medios, CNN. Aclar¨® pocas dudas y termin¨® citando con el estribillo de su reality show El aprendiz: You're fired, "est¨¢s despedido".

¡°Sobre el pirateo, creo que fue Rusia¡±, dijo Trump, en la primera admisi¨®n clara, por su parte, de la responsabilidad de este pa¨ªs en el intento de sabotaje de las elecciones del 8 de noviembre. Los servicios de inteligencia estadounidenses creen que ayudar a Trump era el objetivo del robo y difusi¨®n de correos electr¨®nicos del equipo de la candidata dem¨®crata Hillary Clinton. El presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, control¨® la operaci¨®n, seg¨²n estas fuentes.

Las conclusiones, divulgadas en diciembre, abrieron un enfrentamiento entre el presidente electo, que se negaba a aceptarla, y la llamada comunidad de inteligencia, irritada por las burlas y ataques del pr¨®ximo comandante en jefe.

El caso se complic¨® unas horas antes de la rueda de prensa, cuando se conoci¨® que los jefes del espionaje de EE UU han transmitido a Trump una informaci¨®n no verificada pero potencialmente muy da?ina para el futuro presidente. En un documento, entregado a Trump el viernes, constan detalles escabrosos que podr¨ªan comprometer a Trump y que Rusia podr¨ªa usar para chantajearle. El informe tambi¨¦n se?ala contactos entre el equipo del presidente electo y agentes rusos durante la campa?a electoral.

Ninguna de estas alegaciones, que llevaban meses circulando por Washington pero nadie hab¨ªa publicado al ser imposible de demostrar, est¨¢ refrendada por fuentes p¨²blicas ni pruebas concluyentes, y de hecho contienen algunos errores de bulto. Medios estadounidenses apuntan que el documento es obra de un exagente brit¨¢nico que lo elabor¨® para grupos pol¨ªticos contrarios a Trump durante la campa?a.

La CNN abri¨® el fuego el martes al revelar que los servicios secretos hab¨ªan informado a Trump de la existencia del informe. Fue la filtraci¨®n de esta noticia en la CNN, y la publicaci¨®n de supuesto informe en Buzzfeed, lo que desat¨® la ira de Trump contra los periodistas de estos medios, y contra los servicios de inteligencia que supuestamente quieren perjudicarle.

¡°Creo que fue escandaloso, escandaloso que las agencias de inteligencia permitieran que saliese informaci¨®n que result¨® ser falta, un bulo¡±, dijo Trump. Antes, en la red social Twitter, escribi¨®: ¡°Nunca se habr¨ªa debido permitir a las agencias de inteligencia que filtrasen estas noticias falsas al p¨²blico. Un ¨²ltimo disparo contra m¨ª. ?Vivimos en la Alemania nazi?¡±

Toda comparaci¨®n con la Alemania nazi siempre es delicada en el debate pol¨ªtico, pero que la utilice el pr¨®ximo presidente para describir su propio pa¨ªs y golpear a sus esp¨ªas muestra lo ins¨®lito de los Estados Unidos de Trump, que en la campa?a tuvo el apoyo del Partido Nazi de EE UU.

El mi¨¦rcoles por la noche el director de inteligencia nacional, James Clapper, dijo en un comunicado que habl¨® con Trump para comunicarle su pesar por las filtraciones. Ambos coincidieron en que eran "extremadamente corrosivas y da?inas para la seguridad nacional".

Clapper, responsable de coordinar las agencias de espionaje estadounidenses, insisti¨® en que el documento filtrado no fue elaborado por las agencias y dijo que no cre¨ªan que fuese fiable. Pero confirm¨® que, como adelant¨® CNN, estas informaron al presidente electo de su existencia.

El caso ha introducido en EE UU el t¨¦rmino ruso kompromat, el material comprometedor ¡ªde car¨¢cter sexual, por ejemplo¡ª destinado a da?ar a un adversario. Si el kompromat, en este caso, existe, o es ficticio, sus efectos pueden ser los mismos. El presidente electo, que jale¨® las filtraciones sobre Clinton, que propag¨® mentiras y desafi¨® a la CIA, ve ahora como todo esto se le gira en contra. Y se prepara para asumir el cargo con parte del establishment de la inteligencia ¡ªparte fundamental del aparato de seguridad nacional¡ª enfangado en luchas internas.

Conflictos sin resolver

El otro problema que afronta en este convulso traspaso de poderes es la sospecha de que sus empresas puedan beneficiarse de su poder pol¨ªtico. Publicar sus declaraciones fiscales, como llevaban d¨¦cadas haciendo los candidatos presidenciales, arrojar¨ªa luz sobre estos asuntos, pero el presidente electo volvi¨® a negarse a hacerlo.

La rueda de prensa deb¨ªa servir para resolver el problema del conflicto de inter¨¦s. La soluci¨®n es ceder la gesti¨®n de las empresas a Don Jr. y Eric y congelar acuerdos internacionales. La abogada Sheri Dillon explic¨® en la rueda de prensa que Trump donar¨¢ al Departamento de Tesoro los pagos de extranjeros en hoteles de Trump. Se trata de evitar violar la cl¨¢usula constitucional que impide al presidente recibir pagos que puedan parecer sobornos.

"Lo que el presidente electo ha anunciado hoy no cumple con los est¨¢ndares que sus mejores nominados [a cargos en la administraci¨®n] est¨¢n cumpliendo y que todos los presidentes en las ¨²ltimas cuatro d¨¦cadas han cumplido", dijo Walter Schaub, director de la Oficina de ?tica del Gobierno.

El arreglo no resuelve el principal problema con el conflicto de inter¨¦s: Trump seguir¨¢ siendo el propietario del grupo y cualquier beneficio acabar¨¢ siendo un beneficio para Trump o su familia.