El Movimiento 5 Estrellas, ante el riesgo de la desilusi¨®n
La formaci¨®n de Beppe Grillo, s¨ªntesis de exitosas corrientes pol¨ªticas, tiene el apoyo de un tercio de los votantes, pero encara sus primeros problemas internos y judiciales
Un senador conservador esboza su teor¨ªa mientras deja enfriar un plato de rigattoni con legumbres en una trattoria cercana al Palacio Madama. ¡°No olvide que Italia le lleva 20 a?os de ventaja al resto de Europa. La antipol¨ªtica, el populismo si quiere llamarlo as¨ª, no la ha inventado el Movimiento 5 Estrellas ni Beppe Grillo¡±. Hace dos d¨¦cadas el pa¨ªs descubri¨® con el caso de corrupci¨®n Tangentopoli c¨®mo el llamado establishment hab¨ªa devorado la rep¨²blica. De aquel malestar emergieron Silvio Berlusconi (Forza Italia) o Umberto Bossi (Liga Norte), incapaces finalmente de dar respuestas y multiplicando la frustraci¨®n colectiva. Con la crisis econ¨®mica, concluye el senador, naci¨® en 2009 el M5S. Una arrolladora f¨®rmula que encierra algo de Podemos, de Trump, del Ukip o de las revueltas en las plazas. Hoy, casi un tercio de los votantes italianos se inclinar¨ªa por la formaci¨®n que lidera Grillo, aunque ¨¦l mismo no se haya presentado a ning¨²n cargo. Pero el M5S acelera para materializar su ¨¦xito antes de que algunos tics de la vieja pol¨ªtica -guerra de dossieres incluida- e incipientes entuertos judiciales puedan convertir la ilusi¨®n en rechazo.
Italia le lleva 20 a?os de ventaja al resto de Europa. La antipol¨ªtica aqu¨ª no la han inventado el Movimiento Cinco Estrellas ni Beppe Grillo¡±, se?ala un senador
El movimiento, que ha declinado oficialmente participar y dar explicaciones para este reportaje, tiene hoy 38 alcald¨ªas, 15 parlamentarios europeos, 92 diputados y 36 senadores y 1.000 concejales. Sus mayores ¨¦xitos escapan a la l¨®gica norte-sur, tan presente en Italia, o al tradicional eje izquierda-derecha. No aceptan concurrir a las elecciones formando coaliciones -algo que les perjudicar¨¢ si quieren gobernar-, aunque su posici¨®n sobre la UE y la inmigraci¨®n a veces les ha acercado peligrosamente a la Liga Norte. Un tercio de sus votantes tiene menos de 35 a?os y su espectro ideol¨®gico se reparte casi sim¨¦tricamente.
Sus defectos m¨¢s se?alados se hallan en los bandazos en pol¨ªtica internacional y una cierta improvisaci¨®n en el programa. Ellos lo llaman democracia directa, sus detractores, ¡°populismo¡±. El polit¨®logo Piero Ignazi, conocedor del movimiento, lo explica as¨ª. ¡°Tienen una visi¨®n del nosotros y el vosotros muy marcada; de los buenos y los malos. Ah¨ª s¨ª hay un fuerte elemento populista. Pero ellos nunca hablan del pueblo, como si lo hace Trump, con esa idea de devolverle el poder. El M5S se refiere a los ciudadanos y tiene un sustrato cultural que no es el del pueblo, es una referencia mucho m¨¢s liberal¡±, se?ala.
Una idea basada en la transparencia, la lucha contra la corrupci¨®n y en incuestionables gestos como renunciar a los 42,7 millones de financiaci¨®n p¨²blica que le corresponder¨ªan o que los cargos electos devuelvan parte de su sueldo. ¡°La verdadera revoluci¨®n es la honestidad¡±, declaraba Grillo a este peri¨®dico hace un a?o. Por eso asuntos como la investigaci¨®n ahora de la fiscal¨ªa a la alcaldesa de Roma, Virgina Raggi, por falso testimonio, abuso de poder y por una rocambolesca historia de seguros de vida, son tan comprometedoras. En un intento por acallar las voces cr¨ªticas que llegan desde dentro del partido Grillo escribi¨® ayer en su blog que qui¨¦n est¨¦ contra la regidora de Roma, estar¨¢ contra el movimiento. Pero el caso, en las ant¨ªpodas del ¨¦xito de su compa?era y alcaldesa de Torino, Chiara Appendino, abre el inevitable debate sobre si conviene perder votos apoy¨¢ndola, o perderlos aceptando que Roma sea el primer gran escenario fallido.
El M5S entr¨® en casa de los italianos antes de nacer en 2009. El germen que levant¨® a la gente del sof¨¢, como se suele decir, se gest¨® en los escenarios de los shows de Grillo y en algunos programas de s¨¢tira pol¨ªtica. Giovanni Orsina, docente de sistemas pol¨ªticos italianos en la universidad Luiss Guido Carli, le pone fecha. ¡°Fue a principios de los 90. Ah¨ª Berlusconi ya era un elemento de crisis de la pol¨ªtica convencional¡±, se?ala. Il Cavaliere cambi¨® la manera de votar a trav¨¦s del mando de la televisi¨®n. Grillo, que fund¨® el movimiento con el fallecido Gianroberto Casleggio, empresario experto comunicaci¨®n e Internet, logr¨® algo parecido a trav¨¦s de la Red.
Los activistas no tienen un an¨¢lisis critico de lo que sucede y tienden a justificar todo lo que pasa", critica el alcalde Parma y ex M5S, Federico Pizzarotti
Mediante un software llamado Rousseau, los ciudadanos inscritos proponen leyes, modificaciones, votan a candidatos (a Raggi la nombraron candidata solo 1.724 activistas), deciden sobre aspectos de los programas¡ ?Un ejercicio de democracia directa o ¡°un partido convertido en algoritmo¡±, como lo defini¨® Matteo Renzi¡±. ¡°?Est¨¢n en contra o a favor del euro? Un refer¨¦ndum y fuera. Lo mismo hicieron con las Juegos Ol¨ªmpicos en Roma. Y eso les permite ser coherentes sin decir nada, es una idea genial¡±, critica el profesor Orsina. Pero no todas las decisiones, se quejan otros, son ya tan consensuadas.
El actual alcalde de Parma, Federico Pizzarotti, fue suspendido del partido al ser investigado por abuso de poder en mayo de 2016. Al archivarse el caso, no se restituy¨® su militancia y decidi¨® dar un portazo con el resto de cargos de su Ayuntamiento. Por tel¨¦fono explica a EL PA?S sus impresiones. ¡°Nosotros siempre fuimos aut¨®nomos y antepusimos los intereses de la ciudad a los del movimiento. Con Raggi hay una defensa distinta, cuanto menos, discutible. Mucha gente me escribe ahora diciendo que est¨¢n desilusionados¡±. Pizzarotti cree que del M5S se ha ido mucha gente y que han quedado demasiados ¡°yesman¡±. ¡°Antes se quer¨ªa siempre decidir juntos. Se ha pasado de eso, a las decisiones unidireccionales de Grillo, Casaleggio Jr. o de los dirigentes romanos. Ahora los activistas no tienen un an¨¢lisis critico de lo que sucede y tienden a justificar todo lo que pasa. Es el gran cambio del movimiento: buscar siempre una f¨®rmula con la que no se equivoca nunca¡±.
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