?Puede un robot sustituirte en el trabajo?
Expertos afirman que la automatizaci¨®n es la gran amenaza del mercado laboral en el futuro
¡°La ra¨ªz de nuestros problemas no es que estamos en una gran recesi¨®n, o un gran estancamiento, sino m¨¢s bien en las primeras etapas de una gran reestructuraci¨®n. Nuestras tecnolog¨ªas est¨¢n avanzando, pero muchas de nuestras habilidades y organizaciones est¨¢n rezagadas. Por lo tanto, es urgente que entendamos estos fen¨®menos, discutamos sus implicaciones y presentemos estrategias que permitan a los trabajadores humanos avanzar con las m¨¢quinas en vez de competir contra ellas¡±.
Esta cita de los investigadores del MIT Erik Brynjolfsson y Andrew McAfee en su libro La carrera contra las m¨¢quinas (2011)?puede sonar apocal¨ªptica. Pero es que el temor del hombre a las m¨¢quinas no es nuevo: es una historia de m¨¢s de 200 a?os que la realidad ha confirmado una y otra vez. Y no ser¨¢ diferente en el futuro.
Cuando se habla de robotizaci¨®n inmediatamente vienen a la mente im¨¢genes como el de las pel¨ªculas el Hombre Bicentenario o Terminator. Pero estos no son los robots que han ido desplazando a obreros y trabajadores en muchas industrias.
Son esas m¨¢quinas con gigantescos brazos armados que ensamblan autos o equipos pesados presentes en la construcci¨®n de grandes obras de infraestructura, e incluso los precisos aparatos para producir los tel¨¦fonos celulares. Y por qu¨¦ no, tambi¨¦n son esas lavadoras con diferentes programas de lavar, o la aspiradora inteligente que identifica los tipos de superficies y act¨²a acorde a ellos.
Si bien la tecnolog¨ªa, en general, ha resultado una bendici¨®n para la humanidad, no hay que dudar que sus costos y el impacto en la vida de miles de millones han sido dram¨¢ticos. De hecho, los mismos investigadores en su libro ¡°La segunda era de las m¨¢quinas (2014)¡± pronostican que debido a la tecnolog¨ªa, en el futuro millones quedar¨¢n sin empleo: ¡°Las m¨¢quinas ya no solo realizan tareas repetitivas y rutinarias, sino que cada vez son m¨¢s capaces de realizar cosas que antes se nos antojaban imposibles como conducir veh¨ªculos, diagnosticar enfermedades u ofrecer asesor¨ªa financiera¡±, se?ala McAfee.
M¨¢quinas vs. hombre
Seg¨²n cifras del informe 2016 de la Federaci¨®n Internacional de Rob¨®tica (IFR en ingl¨¦s), para el a?o 2019 el n¨²mero de robots industriales instalados en el mundo se incrementar¨¢ a unos 2.6 millones de unidades, es decir, cerca de un mill¨®n de unidades m¨¢s de las que hab¨ªa en 2015, un a?o r¨¦cord para esa industria. Al ver el desagregado, cerca del 70 por ciento de los robots est¨¢n ahora desplegados en los sectores automotriz, electr¨®nica/el¨¦ctrico, metales y maquinaria industrial.
La Uni¨®n Europea encabeza la lista de regiones donde existe el mayor uso de robots en las industrias: el 65 por ciento de los pa¨ªses con una cantidad por encima del promedio de robots industriales por 10.000 trabajadores est¨¢n en la zona euro. Le sigue China de cerca, y se pronostica que para 2019, el 40% del volumen del mercado mundial de la industria rob¨®tica se vender¨¢ en este pa¨ªs.
Pero como se mencion¨® antes, los robots no solo est¨¢n en las industrias. Tambi¨¦n est¨¢n cada vez m¨¢s presentes en los hogares. Siempre seg¨²n la IFR, la cantidad de robots en hogares dom¨¦sticos ¨Ccomo por ejemplo los que limpian pisos, cortadoras de c¨¦sped, limpiadores de piscinas, entre otros- se incrementar¨¢ a 31 millones entre 2016 y 2019, lo que representa ventas de unos 13.000 millones de d¨®lares en ese periodo.
Es cada vez m¨¢s habitual que las m¨¢quinas puedan realizar tareas rutinarias con mayor rapidez y a un costo menor que los seres humanos, y muchas de las actividades que hoy en d¨ªa se consideran no rutinarias (como la traducci¨®n, la suscripci¨®n de seguros o incluso los diagn¨®sticos m¨¦dicos) en el futuro podr¨ªan ser ejecutadas igualmente bien por las computadoras.
En un informe realizado por el jefe de economistas departamento de investigaci¨®n de Unicredit, Harm Bandholz, y titulado ¡°Las consecuencias econ¨®micas y sociales de la robotizaci¨®n¡± se destaca que aunque la evidencia sobre el impacto del uso de robots en el mercado laboral es a¨²n incipiente ¡°ya existen cada vez m¨¢s estudios que comienzan a respaldar la idea de que estos aparatos aumentan la productividad, los salarios, e incluso la demanda total de mano de obra, pero, sobre todo, benefician a los trabajadores m¨¢s calificados¡±, a costa de aquellos que tienen calificaciones y salarios medianos y bajos.
Seg¨²n datos del Banco Mundial, la proporci¨®n de empleos amenazados por la automatizaci¨®n alcanza el 69 % en India, el 77 % en China y nada menos que el 85 % en Etiop¨ªa. Si bien no se menciona a Am¨¦rica Latina, no hay que negar que esta ola tambi¨¦n est¨¢ impactando a la regi¨®n.
?C¨®mo hacer frente a esta realidad?
Si bien el desplazamiento del empleo y la p¨¦rdida de puestos de trabajo provocados por el cambio tecnol¨®gico son parte indisoluble del progreso econ¨®mico, los expertos reconocen que los robots han reducido la necesidad de que las personas realicen tareas arduas, repetitivas o peligrosas. Asimismo, han permitido liberar recursos humanos y financieros que pueden reasignarse a sectores de mayor rentabilidad. Esto es especialmente apreciado en pa¨ªses que envejecen con rapidez o en aquellos donde la poblaci¨®n disminuye, o en profesiones donde el personal capacitado escasea. La medicina a distancia y los diagn¨®sticos automatizados, por ejemplo, permiten que los expertos m¨¦dicos atiendan a muchas m¨¢s personas, a¨²n a la distancia, en zonas donde faltan doctores.
Pero el problema, como se ve ahora, es que los trabajadores en los diferentes niveles de ingreso y calificaci¨®n no se benefician en la misma medida, por lo que el resultado inmediato es que la robotizaci¨®n est¨¢ aumentando a¨²n m¨¢s la desigualdad en los ingresos.
Los expertos consideran que el acceso a la educaci¨®n de calidad y el desarrollo de habilidades desde edades tempranas pueden contrarrestar el efecto de los robots en el mercado laboral.
¡°Tenemos que repensar nuestro sistema educativo. Dado que los robots y las m¨¢quinas son capaces de hacerse cargo de un n¨²mero cada vez mayor de tareas, los seres humanos tienen que centrarse en sus ventajas comparativas, que incluyen las habilidades no cognitivas¡±, afirma Bandholz.
Harry A. Patrinos, gerente del sector educaci¨®n del Banco Mundial, comenta que para muchos pa¨ªses en desarrollo, como los de Am¨¦rica Latina, los conocimientos b¨¢sicos son fundamentales. ¡°La fluidez de la lectura en la primera infancia es de suma importancia. Despu¨¦s de todo, ¡°el aprendizaje engendra aprendizaje¡± como dice James Heckman y el ¨¢rea para comenzar es el desarrollo en la primera infancia. Hay tambi¨¦n pruebas claras de que las aptitudes de comportamiento ¨Ccomo el trabajo en equipo, la diligencia, la creatividad, el esp¨ªritu empresarial¨C son esenciales para prosperar en las actuales econom¨ªas globalizadas en r¨¢pida evoluci¨®n e impulsadas por la tecnolog¨ªa¡±.
Otro punto importante para Bandholz es que una de las soluciones m¨¢s prometedoras para el desaf¨ªo a largo plazo planteado por las m¨¢quinas que sustituyen la mano de obra es que todos los trabajadores tengan una participaci¨®n sustancial en la propiedad de las m¨¢quinas robot. ¡°Esto permite a los trabajadores obtener ingresos procedentes tanto del trabajo como del capital¡±.
Mar¨ªa Jos¨¦ Gonz¨¢lez Rivas es editora online del Banco Mundial.
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