Mubarak sale en libertad seis a?os despu¨¦s de la revoluci¨®n
La libertad del exdictador, seis a?os despu¨¦s de su arresto, certifica el fin de la 'primavera' egipcia
Exactamente 2.171 d¨ªas despu¨¦s de su medi¨¢tico arresto, el exdictador egipcio Hosni Mubarak ha recobrado la libertad. Mubarak ha abandonado este viernes por la ma?ana el hospital militar donde ha pasado gran parte de sus d¨ªas en prisi¨®n, seg¨²n ha confirmado su abogado a France Presse. Con esta decisi¨®n, la justicia egipcia emiti¨® la ¨²ltima se?al que faltaba para poder escribir el obituario de la revoluci¨®n egipcia de 2011, que otorg¨® una dimensi¨®n regional al movimiento de rebeli¨®n iniciado en T¨²nez, propiciando su contagio a Siria y Libia. La excarcelaci¨®n de Mubarak posee un valor simb¨®lico, pues Egipto ya hace tiempo que padece otra dictadura militar a¨²n m¨¢s feroz liderada por el mariscal Abdelfat¨¢ al Sisi. Seis a?os despu¨¦s, las llamadas primaveras ¨¢rabes se han convertido en el m¨¢s duro de los inviernos
La puesta en libertad es consecuencia de la absoluci¨®n definitiva de Mubarak a principios de este mes por parte del tribunal superior de casaci¨®n de los cargos relativos al asesinato de centenares de manifestantes durante la revoluci¨®n. Aunque el exdictador fue procesado posteriormente por otras causas de corrupci¨®n, aquella fue la que provoc¨® su arresto inicial el 13 abril del 2011, y la que habr¨ªa podido conllevar una condena de mayor gravedad.
"?l ya est¨¢ en su casa de Heli¨®polis", declar¨® a la agencia Reuters su abogado, Farid al Deeb, en referencia a una mansi¨®n adquirida al Estado de forma irregular y situada en un acaudalado barrio de la capital egipcia. De momento, no podr¨¢ viajar al extranjero al tener pendiente a¨²n una causa por apropiaci¨®n indebida de fondos p¨²blicos. ¡°Su puesta en libertad es otra muestra de una revoluci¨®n que fue lanzada, pero no completada¡±, comenta Timothy Kaldas, investigador del think tank TIMEP. ¡°Juzgar a Mubarak de acuerdo con las leyes que ¨¦l aprob¨®, en base a la investigaci¨®n hecha por la polic¨ªa que ¨¦l dise?¨® y bajo la autoridad de jueces que ¨¦l nombr¨® siempre represent¨® un desaf¨ªo¡±, apostilla.
Desde su comienzo, el proceso al veterano general, presentado como un h¨¦roe de la guerra de 1973 contra Israel, fue m¨¢s pol¨ªtico que legal. El expresidente pas¨® la mayor parte de su reclusi¨®n en un hospital militar, en teor¨ªa, debido a su delicado estado de salud. Sin embargo, seg¨²n muchos observadores, su situaci¨®n respond¨ªa m¨¢s bien a la b¨²squeda por parte del Gobierno militar de un equilibrio entre la voluntad de otorgar un trato deferente a uno de sus miembros pero, a la vez, aplacar la sed de justicia de buena parte de la poblaci¨®n.
Tras su exoneraci¨®n, los familiares de las v¨ªctimas de la Revoluci¨®n ya expresaron a la prensa sus sentimientos de dolor y rabia. Sin embargo, la mayor parte de los egipcios parece haber pasado p¨¢gina respecto al periodo en el que el destino de Mubarak suscitaba aut¨¦nticas pasiones. Despu¨¦s de la aplicaci¨®n de un duro plan de ajuste en oto?o, la preocupaci¨®n principal de millones de familias egipcias es c¨®mo llegar a final de mes. Mubarak, de 88 a?os, accedi¨® al poder despu¨¦s del asesinato del presidente Anuar Sadat, y gobern¨® el valle del Nilo con mano de hierro durante tres d¨¦cadas.
¡°Creo que nos equivocamos al dar un valor ic¨®nico a la figura de Mubarak, cuando lo realmente importante era su sistema, que ha sido renovado por [el presidente] al Sisi¡±, comenta a trav¨¦s de un mensaje electr¨®nico Bassem Janoubie, uno de los activistas que contribuy¨® a estimular la rebeli¨®n de la plaza Tahrir. ¡°Cuando la mayor¨ªa sue?a en encontrar un trabajo que le permita subsistir, la gente acaba sintiendo que viv¨ªan mejor en la era Mubarak... y est¨¢n dispuestos a perdonarlo del todo. Ahora ya no les importa la democracia, que es percibida como un lujo¡±, a?ade.
La exoneraci¨®n de un r¨¦gimen entero
Tras un condena inicial a cadena perpetua en 2012 por la represi¨®n de la revuelta, un tribunal de apelaci¨®n orden¨® la repetici¨®n del juicio. En el segundo proceso, Mubarak fue absuelto, decisi¨®n ratificada por la justicia hace un par de semanas. El exdictador s¨ª que fue condenado junto a sus dos hijos a tres a?os de c¨¢rcel en un causa por corrupci¨®n, un castigo que ya hab¨ªan cumplido en r¨¦gimen de prisi¨®n preventiva. Por esa raz¨®n, Alaa y Gamal Mubarak ya pisaron de nuevo la calle en 2015. El patriarca ha tenido que esperar un poco m¨¢s.
Durante estos tumultuosos a?os postrevolucionarios, la mayor¨ªa de personalidades vinculadas al antiguo r¨¦gimen fueron absueltas o recibieron leves condenas, como el ¨²ltimo ministro del Interior, Habib al Adly. En cambio, muchos j¨®venes revolucionarios languidecen en la c¨¢rcel, o se hallan sumidos en la depresi¨®n. Y es que el golpe de Estado ejecutado por al Sisi en 2013 desat¨® una represi¨®n in¨¦dita, dirigida no solo contra los l¨ªderes del movimiento islamista que ostentaba el poder y a miles de sus simpatizantes, sino contra cualquier voz disidente. Mubarak no ha resultado ser "el ¨²ltimo fara¨®n".
La nostalgia no es un sentimiento exclusivo de Egipto, sino que invade tambi¨¦n a los ciudadanos de los otros pa¨ªses donde soplaron con fuerza los vientos revolucionarios, como Siria, Yemen o Libia, todos ellos martirizados por guerras civiles. Por eso, la estabilidad es hoy un valor que cotiza al alza en la regi¨®n. Al final, Mubarak habr¨¢ sido el dictador ¨¢rabe que mejor parado ha salido de su ca¨ªda. Pocos lo pod¨ªan aventurar hace seis a?os y un mes, cuando la gesta de Tahrir asombr¨® al mundo entero.
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