Chile debate reemplazar la Constituci¨®n de Pinochet
Desde el retorno a la democracia la Carta Magna chilena ha tenido una treintena de cambios, sobre todo en 2005
Chile ha emprendido un proceso de largo aliento para cambiar su Constituci¨®n, que data de 1980, ¨¦poca de la dictadura de Augusto Pinochet. La presidenta, Michelle Bachelet, convoc¨® el proceso hace 18 meses, pero el mecanismo est¨¢ a¨²n por definirse. Pese a que desde el retorno a la democracia ha tenido una treintena de cambios, sobre todo en 2005, en el Gobierno del socialista Ricardo Lagos, para los chilenos la Carta Magna carece de legitimidad y la mayor¨ªa ¡ªcerca de un 70%, de acuerdo con diversas encuestas¡ª apoya su reemplazo.
"No atender a ese reclamo ¡ªcomo lo plantean los conservadores¡ª nos parece una imprudencia", se?ala el polit¨®logo Genaro Arriagada, que junto a los exministros de centroizquierda chilenos Ignacio Walker y Jorge Burgos escribi¨® el libro de reciente publicaci¨®n Sobre derechos, deberes y poder. Una nueva Constituci¨®n para Chile (Uqbar editores). Dirigido a un p¨²blico no especializado, explica todo lo que est¨¢ en juego cuando un pa¨ªs cambia su Carta Fundamental.
Para Arriagada, cuanto m¨¢s tarden las autoridades chilenas en atender esa demanda ciudadana, mayor ser¨¢ la posibilidad de que esta se transforme en la bandera de lucha del populismo, de izquierda o de derecha, que quiera dar un salto al vac¨ªo en materia constitucional apoy¨¢ndose en alguna forma de democracia plebiscitaria y asociando una nueva Constituci¨®n a satisfacci¨®n de demandas que ninguna Carta puede satisfacer. "Hay que tener presente que reg¨ªmenes populistas como los del socialismo del siglo XXI pusieron en su centro una nueva Constituci¨®n y una Asamblea Constituyente", indica Arriagada, tambi¨¦n exministro del democristiano Eduardo Frei Ruiz-Tagle (1994-2000).
La presidenta Bachelet convoc¨® hace 18 meses a los ciudadanos a un proceso, cuyo objetivo es la elaboraci¨®n y aprobaci¨®n de una nueva Constituci¨®n. "En este tiempo ha habido un intenso debate sobre cuestiones constitucionales, como el pa¨ªs no hab¨ªa conocido antes. Estamos en presencia de un proceso inconmensurablemente m¨¢s democr¨¢tico que cualquiera de los momentos constitucionales anteriores", describe Burgos, exministro del Interior del actual Gobierno.
El proceso de discusi¨®n, sin embargo, tomar¨¢ el pr¨®ximo periodo presidencial (2018-2022) y estar¨¢ marcado por las diferentes visiones que existen sobre una nueva Constituci¨®n. Seg¨²n Burgos, "persistir¨¢ una tensi¨®n entre aquellos que no quieren cambiar nada ¡ªel expresidente Sebasti¨¢n Pi?era, entre ellos¡ª y aquellos que lo quieren cambiar todo, como Frente Amplio [izquierda] y sectores de la Nueva Mayor¨ªa [de centroizquierda]".
Las asambleas constituyentes
"No se trata de demonizar las Asambleas Constituyentes per se, sino de entender que, de acuerdo con la historia constitucional universal, las hay de distintos tipos", indica Genaro Arriagada. Recuerda que ha habido algunas de las que han surgido Cartas Magnas que gozaron o gozan de gran legitimidad, como las de Francia e Italia despu¨¦s de la Segunda Guerra Mundial. Pero junto a esas hay Asambleas que son un instrumento de los partidarios de dictaduras, que en su gestaci¨®n impiden la representaci¨®n leal del pueblo y que bajo un barniz electoral y una falsa democracia procuran legitimar un poder autoritario.
Para Walker, senador democristiano, "no se trata de partir de cero, ni de borr¨®n y cuenta nueva". "Chile tiene una rica historia constitucional tras la construcci¨®n, siempre tentativa, siempre imperfecta, de una Rep¨²blica democr¨¢tica, que fue el objetivo de la Constituci¨®n de 1833".
En el libro de Arriagada, Burgos y Walker se examina el contenido que deber¨ªa tener una nueva Constituci¨®n chilena: los cap¨ªtulos que identifican los derechos fundamentales, que los reconoce, que se compromete a respetarlos y promoverlos, la forma en que la Constituci¨®n estructura el poder, determina sus atribuciones, limita y garantiza a las personas sus derechos frente al poder, entre otros asuntos. "Como se?ala el profesor Jorge Correa Sutil", recuerda Burgos, "una Constituci¨®n es, ante todo, un modo de organizar, dividir, limitar y controlar el poder pol¨ªtico".
Mecanismo de cambio
Pero Chile todav¨ªa no decide el mecanismo por el que se elaborar¨¢ la nueva Constituci¨®n. Los autores del libro, sin embargo, tienen aprensiones con las Asambleas Constituyentes. En el libro elaboran una propuesta para que se debata por las autoridades y los ciudadanos. "Una Convenci¨®n Constituyente nombrada por el pr¨®ximo Congreso Nacional que se elige en noviembre pr¨®ximo con 60 miembros, 30 parlamentarios ¡ª15 senadores y 15 diputados¡ª y 30 ciudadanos, todos ellos elegidos por el Congreso Pleno, cuya propuesta sea plebiscitada", explica Walker.
Mediante este mecanismo, indican los autores, buscan fortalecer la democracia representativa, evitar todo riesgo de un cesarismo plebiscitario, fortalecer los partidos haci¨¦ndolos menores en n¨²mero, pero m¨¢s transparentes y democr¨¢ticos.
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