Los comicios locales profundizan la divisi¨®n pol¨ªtica en Palestina
Los colegios electorales solo abren sus puertas en Cisjordania ante el boicot de Ham¨¢s en Gaza
Los palestinos llevan m¨¢s de diez a?os sin votar unidos. Lo intentaron el a?o pasado, pero las disputas entre los nacionalistas de Fatah y los islamistas de Ham¨¢s obligaron a aplazar los comicios municipales convocados en octubre. Este s¨¢bado han abierto los colegios electorales, pero solo en Cisjordania, feudo del partido del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, ante el boicoteo del Movimiento de Resistencia Isl¨¢mico (Ham¨¢s), hegem¨®nico en la franja de Gaza. Las declaraciones en favor de un Gobierno de unidad nacional para afrontar el proceso de paz en Oriente Pr¨®ximo han ca¨ªdo en saco roto por la profunda divisi¨®n con la que ambos bandos abordan la relaci¨®n con Israel.
La victoria de Ham¨¢s en las legislativas de 2006 desencaden¨® una fractura pol¨ªtica ¡ªcon la toma del poder de los islamistas en Gaza tras expulsar por la fuerza de las armas a Fatah de las instituciones del enclave un a?o despu¨¦s¨C que no ha dejado de agrandarse. La Autoridad Palestina, en manos del partido de Abbas y que controla los principales recursos econ¨®micos, ha recortado los salarios de los funcionarios en la Franja y ha dejado de pagar las facturas para el suministro de electricidad a sus dos millones de habitantes, que sufren permanentes apagones programados.
Se repite el mismo escenario de 2012, cuando el rechazo de Ham¨¢s ¡ªal que se suman la Yihad Isl¨¢mica y la izquierda del Frente Popular para la Liberaci¨®n de Palestina¡ªya impidi¨® la celebraci¨®n de elecciones locales conjuntas en ambos territorios. Los palestinos no han podido renovar tampoco a sus representantes en el Consejo Legislativo ni al presidente de la Autoridad Palestina, despu¨¦s de que el mandato de Abbas expirara en 2009. La votaci¨®n local ¡ªconvertida en un tr¨¢mite administrativo y con los puestos adjudicados de antemano en m¨¢s de la mitad de las circunscripciones (peque?o municipios de base tribal)¡ª no ha generado gran inter¨¦s entre la poblaci¨®n. La Comisi¨®n Central Electoral palestina asegur¨® que los comicios se hab¨ªan desarrollado sin incidentes, con una participaci¨®n del 49,98%.
En las ciudades de Cisjordania, donde en octubre del a?o pasado se esperaba un avance de Ham¨¢s ante la p¨¦rdida de popularidad de Fatah, la atenci¨®n pol¨ªtica est¨¢ centrada en la huelga de hambre que secundan centenares de presos palestinos en las c¨¢rceles de Israel desde el pasado 17 de abril. Lo carteles de los candidatos electorales se han visto desplazados por las im¨¢genes de l¨ªderes de la masiva protesta de los reclusos, como el dirigente de la Segunda Intifada Marwan Barguti, condenado a cinco cadenas perpetuas. La consigna de boicot dada Ham¨¢s y otros grupos, pudo tornarse sin embargo en un voto concentrado en favor de candidatos independientes afines en grandes consejos locales como Hebr¨®n, Nabl¨²s o Ramala.
Las elecciones estudiantiles en la Universidad de Birzeit, la m¨¢s prestigiosa de Palestina, han adelantado esta semana un primer term¨®metro de la tendencia de voto. La lista apoyada por Ham¨¢s se ha hecho con 25 de los 51 puestos en el Consejo Universitario frente a los 22 de la candidatura impulsada por Fatah. Se trata de la tercera victoria consecutiva de los islamistas en este campus pr¨®ximo a Ramala, sede administrativa de la Autoridad Palestina. Los primeros resultados de los comicios locales ser¨¢n anunciados en la tarde del domingo.
A los 82 a?os y despu¨¦s de m¨¢s de una d¨¦cada de controvertido mandato, el presidente Abbas parece haber relegado su presencia en la pol¨ªtica dom¨¦stica, donde su popularidad est¨¢ en entredicho, para intentar jugar la baza de la diplomacia. El veterano rais conf¨ªa en que la visita del presidente estadounidense Donald Trump a Israel y Palestina de los pr¨®ximos d¨ªas 22 y 23 contribuya a reactivar las negociaciones de paz que quedaron paralizadas hace tres a?os. Fuentes palestinas citadas por The Jerusalem Post apuntan a que Abbas no va a exigir ahora la congelaci¨®n de la expansi¨®n de los asentamientos jud¨ªos en Cisjordania ¡ªuna condici¨®n que bloque¨® el di¨¢logo en 2014¡ª y que se muestra dispuesto a aceptar un intercambio de territorios con Israel el marco de un acuerdo para crear un Estado propio.
Para ello el presidente palestino se ha desmarcado del movimiento islamista que gobierna en Gaza ¡ªcalificado como organizaci¨®n terroristas por EE UU y la UE¡ª aun a riesgo de que el recorte financiero que ha impuesto agrave el malestar social en la Franja, donde se registra la tasa de desempleo m¨¢s alta del planeta, seg¨²n el Banco Mundial. El reciente giro de Ham¨¢s, que por primera vez ha admitido en sus estatutos un Estado palestino en las fronteras anteriores a la guerra de 1967, no parece haber propiciado por ahora un acercamiento entre los dos bandos rivales palestinos. Las miliciaas de Ham¨¢s han librado tres guerras con Israel desde 2008.
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