Argentina y China retoman parte de los proyectos pactados por Kirchner

Se trata de dos reactores nucleares que se construir¨¢n en las provincias de Buenos Aires y R¨ªo Negro (sur) entre la compa?¨ªa estatal China National Nuclear Corporation y la argentina Nucleoel¨¦ctrica. Tambi¨¦n se rubric¨® la renovaci¨®n de las l¨ªneas de los ferrocarriles San Mart¨ªn y Belgrano Cargas, un protocolo para la exportaci¨®n de uvas de mesa o la construcci¨®n de una planta fotovoltaica en la provincia de Jujuy (norte). Acuerdos, seg¨²n medios argentinos, cuyo valor asciende a los 15.000 millones de d¨®lares, una cifra que no fue confirmada por la parte china.

No hubo acuerdo, sin embargo, sobre las pol¨¦micas presas hidroel¨¦ctricas N¨¦stor Kirchner y Jorge Cepernic sobre el r¨ªo Santa Cruz. Macri se reuni¨® con el director general del grupo chino Gezhouba, el gigante de la construcci¨®n encargado de la megaobra, para trazar las modificaciones del proyecto original. "Respetamos la decisi¨®n de Argentina de revisar estos proyectos, pero hay que decir que est¨¢n planteados conforme con las leyes pertinentes. Ha habido algunos ajustes, pero no de gran escala (...) La parte argentina ha prometido impulsar y llevar a cabo este proyecto... creemos", asegur¨® Zhu Qingqiao, director general del Departamento de Am¨¦rica Latina y el Caribe del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, tras el encuentro entre ambos presidentes.

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Tanto las centrales nucleares como las represas son proyectos de vital importancia para la parte china y una suerte de condici¨®n sine qua non para la firma de otros. Cuando lleg¨® al poder, el presidente Macri dej¨® claro que quer¨ªa revisar estos pactos por su falta de transparencia y las dudas surgidas en torno a su impacto medioambiental o las condiciones de financiaci¨®n firmadas por su predecesora, Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner, algo que levant¨® ciertas suspicacias en Pek¨ªn.

Durante el kirchnerismo, China no solamente se convirti¨® en un socio comercial decisivo, sino tambi¨¦n en el salvavidas financiero cuando Argentina ten¨ªa cerrado el acceso a los mercados internacionales. Con Macri al mando, la nueva administraci¨®n apost¨® por una mayor apertura y normalizaci¨®n de las relaciones con Europa y Estados Unidos. De hecho, la primera visita de Estado de Macri a China ocurre pocas semanas despu¨¦s de que el presidente argentino se reuniera con Donald Trump.

La posibilidad de que algunos de estos proyectos de infraestructura acaben cancel¨¢ndose horroriza a las autoridades chinas y amenaza con afectar a las relaciones bilaterales. No es la primera vez que un pa¨ªs se encuentra en esta tesitura: las relaciones entre China y Reino Unido se enrarecieron durante varios meses por las dudas sobre la construcci¨®n de una central nuclear con capital y tecnolog¨ªa del gigante asi¨¢tico (una instalaci¨®n que finalmente obtuvo el visto bueno), mientras que M¨¦xico sigue arrastrando la losa de haber cancelado dos grandes proyectos en los que el dinero chino era parte implicada.

La administraci¨®n Macri quiso con esta visita, en la que participan hasta seis ministros y una nutrida delegaci¨®n empresarial, despejar la incertidumbre derivada del relevo en Buenos Aires. "China es un socio absolutamente estrat¨¦gico", dijo el presidente en un foro empresarial organizado en Pek¨ªn, en el que present¨® a Argentina como un pa¨ªs "predecible y confiable para los amigos chinos". La canciller Susana Malcorra, por su parte, sostuvo ante la prensa que "nunca se tuvo la sensaci¨®n de tener que tranquilizar a la contraparte china en cuanto a la falta de compromiso y de participaci¨®n del Gobierno argentino".

Argentina pidi¨® en este viaje formalmente su ingreso en el BAII, el banco de desarrollo impulsado por China que financia proyectos de infraestructuras en Asia. Macri cerrar¨¢ el jueves su visita de Estado en Shangh¨¢i, donde participar¨¢ en la feria de alimentaci¨®n SIAL, una de las m¨¢s grandes del mundo, un sector donde precisamente el pa¨ªs ve potencial para equilibrar el enorme d¨¦ficit comercial cr¨®nico que sufre con China. "Argentina produce alimentos para 400 millones de personas y esperamos duplicar eso en 5 a 8 a?os; estoy seguro de que con la ayuda del empresariado chino lo podremos hacer", dijo Macri al respecto.