La financiaci¨®n electoral, un agujero negro en Argentina

En Argentina no se sabe cu¨¢nto cuestan las campa?as electorales, cu¨¢nto gastan en ellas los partidos pol¨ªticos ni qui¨¦n las financia. Este es el crudo diagn¨®stico de organizaciones que estudian la financiaci¨®n electoral a cuatro meses de los comicios legislativos del pr¨®ximo 22 de octubre, en los que se renovar¨¢ la mitad de los miembros de la C¨¢mara de Diputados y un tercio de los del Senado. La larga lista de malas pr¨¢cticas hace que Argentina sea uno de los pa¨ªses con una mayor brecha entre lo que marca la ley y su cumplimiento efectivo y todo hace prever que los abusos se repetir¨¢n en la pr¨®xima contienda electoral.

Faltan a¨²n 17 d¨ªas para el inicio formal de la campa?a, pero desde hace semanas pueden verse las calles de Buenos Aires y su ¨¢rea metropolitana empapeladas con la imagen de candidatos, mientras las publicidades partidarias inundan Internet. La ley argentina proh¨ªbe cualquier tipo de propaganda antes de los 30 d¨ªas previos la cita electoral, pero nadie lo cumple. Como las empresas no pueden donar fondos para las campa?as electorales lo hacen sus altos directivos a t¨ªtulo individual. Aunque la legislaci¨®n permite las donaciones por v¨ªa bancaria, m¨¢s del 90% de las contribuciones declaradas se hacen en efectivo, lo que impide saber si tienen o no un origen ilegal.

"El peor problema que tenemos es que no sabemos c¨®mo se pagan la pol¨ªtica partidaria y las campa?as electorales. La mayor parte de los recursos que solventan la actividad de los partidos y las campa?as provienen de fuentes no declaradas y del abuso de recursos p¨²blicos con fines partidistas", dice Julia Pomares, directora ejecutiva del Centro de implementaci¨®n de pol¨ªticas p¨²blicas para la equidad y el crecimiento (Cippec), una de las organizaciones que m¨¢s ha seguido de cerca la financiaci¨®n electoral en Argentina.

El mayor obst¨¢culo para conocer la procedencia de los fondos es la forma de recaudaci¨®n. Como las donaciones en efectivo no se pueden rastrear, en la pr¨¢ctica equivale a admitir donaciones an¨®nimas, prohibidas por ley. "Mientras la pol¨ªtica proselitista se siga financiando en las sombras, hay incentivos para financiarla a trav¨¦s de la corrupci¨®n y del desv¨ªo de recursos p¨²blicos", se?ala Pomares. Seg¨²n Leandro Querido, titular de Transparencia Electoral, la ¨²ltima campa?a presidencial, en 2015, cost¨® casi diez veces m¨¢s que el m¨¢ximo estipulado, 172 millones de pesos (unos 18 millones de d¨®lares en ese momento). Otras fuentes se?alan que el costo real de los grandes partidos oscil¨® entre los 1.000 y los 1.500 millones de pesos (entre 102 y 154 millones de d¨®lares).

La C¨¢mara Nacional Electoral (CNE), el organismo de control de los comicios en Argentina, tambi¨¦n se muestra a favor de prohibir las contribuciones en efectivo por considerarlas uno de los grandes enemigos de la transparencia. Fuentes del ente electoral confirman que los partidos gastan m¨¢s de lo que declaran, pero exigen mayores recursos para poder detectarlo a tiempo. Argumentan que la CNE cuenta con solo ocho auditores para supervisar las cuentas, lo que hace inviables los relevamientos de campo, a diferencia de lo que s¨ª ocurre en M¨¦xico. A¨²n as¨ª, en cada elecci¨®n se detectan maniobras sospechosas que pasan a manos de la Justicia electoral. A principios de este mes, el fiscal Jorge Di Lello pidi¨® a la Justicia que no apruebe los balances con los gastos oficiales de las campa?as presidenciales de Mauricio Macri y Daniel Scioli hasta que los partidos "subsanen" las irregularides marcadas por distintas auditor¨ªas.

Nueva ley para 2019

El Gobierno de Mauricio Macri prev¨¦ la prohibici¨®n de las donaciones en efectivo en el proyecto de ley que presentar¨¢ en el Congreso en los pr¨®ximos meses y con el que aspira a cambiar las reglas del juego en las presidenciales de 2019. El borrador, al que ha tenido acceso EL PA?S, contempla tambi¨¦n el control online en tiempo real de las donaciones y acepta que las compa?¨ªas privadas puedan contribuir a las campa?as con un monto m¨¢ximo.

La ley vigente, aprobada en 2009, prohibi¨® las donaciones empresariales a ra¨ªz del esc¨¢ndalo de la campa?a presidencial kirchnerista de 2007, financiada parcialmente por laboratorios farmac¨¦uticos investigados por sus v¨ªnculos con el tr¨¢fico de efedrina. "El resquicio que encontraron los partidos pol¨ªticos para burlar la ley fue que ahora no aportan las empresas sino toda la l¨ªnea de gerencia, lo que es lo mismo", dice Querido. La decisi¨®n fue contraproducente y aument¨® la opacidad, seg¨²n Pablo Secchi, director de Poder Ciudadano: "En 2007 sabemos que las empresas farmac¨¦uticas son las que m¨¢s pusieron. Ahora no sabemos qui¨¦nes financian, mucho dinero pas¨® a ser en negro, a¨²n m¨¢s que antes". Secchi respalda que las empresas puedan volver a donar para saber cu¨¢les son y que el ciudadano conozca los posibles intereses escondidos antes de votar.

El abuso de los recursos p¨²blicos, como publicidad oficial, difusi¨®n de actos de gobierno y anuncios durante la campa?a electoral, da una gran ventaja al partido gobernante. La pr¨¢ctica est¨¢ prohibida, pero es tan recurrente que los argentinos la han bautizado como el efecto cancha inclinada (campo inclinado). Como pasa con otras violaciones normativas, la Justicia casi nunca llega o llega tarde. El director de Transparencia Electoral cree que dado el inter¨¦s de los candidatos en la publicidad en medios de comunicaci¨®n, una posible sanci¨®n a los infractores ser¨ªa excluirlos de la aparici¨®n en la franja gratuita que les brinda el Estado. "Las multas econ¨®micas no tienen efecto porque tienen un valor muy por debajo de lo que obtienen", asegura Querido. Pomares cree que los controles deben ser "permanentes" a fin de detectar las irregularidades durante la campa?a y no despu¨¦s. La nueva cita en las urnas volver¨¢ a poner a prueba todo el sistema.