La innovaci¨®n tambi¨¦n est¨¢ en las aulas
La Fundaci¨®n Santillana re¨²ne en Buenos Aires casos exitosos de nuevas experiencias educativas
Un grupo de alumnos hace su tarea en el patio arbolado del Colegio Font¨¢n de Medell¨ªn, Colombia. Asisten cuando lo necesitan y pueden tomar sus vacaciones cuando les plazca. En las escuelas que trabajan bajo el proyecto Horitz¨® 2020 de Barcelona los ni?os se re¨²nen en el aula en grupos de 60 y trabajan sobre proyectos puntuales guiados por tres maestros. Las Innova School, en Per¨², reciben a ni?os dispuestos a estudiar en plataformas de autoaprendizaje. Las tres experiencias fueron los ejemplos concretos que la Fundaci¨®n Santillana eligi¨® para cargar de contenidos el tema del XII Foro Latinoamericano de Educaci¨®n, realizado en Buenos Aires entre el lunes y martes pasados: Cambio e Innovaci¨®n educativa: las cuestiones cruciales.
M¨¢s de 1.000 personas pasaron por el Centro Cultural de la Ciencia en Palermo, ubicado junto al Conicet, el consejo nacional donde se preparan los cient¨ªficos argentinos. All¨ª se discuti¨® el documento b¨¢sico del encuentro, esta vez a cargo de Axel Rivas, codirector del Programa de Educaci¨®n Cippec. El texto sirvi¨® para poner entre comillas el valor sin matices que se le atribuye a la innovaci¨®n, una palabra ¡°fetiche¡± que se quiere enarbolar como la soluci¨®n natural a una escuela que se considera ¡°anacr¨®nica, caduca o ineficaz¡±. ¡°La palabra innovaci¨®n est¨¢ sobrevalorada y, como todo aquello que se pone de moda, sufre una inflaci¨®n conceptual que le quita valor productivo. Pero hay experiencias pr¨¢cticas que muestran que si la innovaci¨®n tiene un para qu¨¦, se obtienen buenos resultados¡±, dijo Rivas. Ese es el principal desaf¨ªo. Sobre todo porque no est¨¢ claro qui¨¦n es el responsable de liderar la innovaci¨®n en el aula: el maestro, los directivos, la escuela privada, la p¨²blica o el Estado.
El ministro de Cultura, Pablo Avelluto, disertante en el foro, consider¨® que el Estado no est¨¢ en condiciones de ser la punta de lanza de la innovaci¨®n porque ¡°no da la escala¡±. Pero s¨ª puede construir el marco necesario para que las nuevas experiencias florezcan y sean sostenibles en el largo plazo. ¡°El Estado debe dotar de m¨¢s autonom¨ªa a los actores del sistema, porque el cambio proviene de abajo hacia arriba. El estado debe promoverlo, premiarlo, lo que no le sale bien es hacerlo¡±, dijo Avelluto. Para Jason Beech, investigador de la Universidad de San Andr¨¦s, es un error ¡°tirarle al docente la responsabilidad del cambio¡±. ¡°Los cambios deben ser de sistema educativo. La innovaci¨®n es algo sist¨¦mico que depende de redes de personas y de cosas tambi¨¦n materiales, como el dinero. ?Para qu¨¦ le pagamos al docente? ?Por sus horas en el aula, por su trabajo en equipo? Si no es un h¨¦roe que innova pese a las condiciones¡±, opin¨®.
Las tres experiencias presentadas en el foro fueron mucho m¨¢s all¨¢ del entusiasmo de un maestro en particular. Y son exitosas, seg¨²n los resultados de las pruebas que realizaron sobre sus alumnos. Atanasio Rold¨¢n trajo a Buenos Aires el trabajo en el Colegio Font¨¢n, creado en 1985 en Medell¨ªn por el catal¨¢n Ventura Font¨¢n. Que tenga 32 a?os de vida no lo elimina de la lista de innovadores. ¡°El colegio est¨¢ construido alrededor del lenguaje escrito¡±, explic¨® Rold¨¢n. ¡°Fue necesario un nuevo texto capaz de llegar al alumno y Font¨¢n cre¨® los textos autodid¨¢cticos. El sistema es adem¨¢s muy flexible, porque la variedad de ritmos de los estudiantes es inmensa. Un alumno puede terminar el grado en cualquier momento, las vacaciones se toman en cualquier momento y no hay repitencia¡±, agreg¨®.
En Barcelona, la experiencia en ocho escuelas de Horitz¨® 2020 busc¨® reformular desde la base el papel del maestro. ¡°El educador no dicta clases, sino que prepara en equipo proyectos en lo que se invita a los alumnos a resolver retos¡±, dijo Xavier Aragay, l¨ªder de Horitz¨® 2020 y director de la Fundaci¨® Jesu?tes Educaci¨®. ¡°Tiramos las paredes de las aulas para poder trabajar en grupos de 60 alumnos. Se rompe as¨ª la individualidad del docente, porque el trabajo se hace bajo la supervisi¨®n de un grupo de profesores¡±.
El impulso innovador de Innova Schools en Lima, Per¨², fue fruto de la necesidad de contar con escuelas privadas que brindasen calidad a un precio asequible. ¡°Desde hace unos a?os, hay en Per¨² una clase media que est¨¢ dispuesta a gastar hasta el 40% de sus ingresos en la educaci¨®n de sus hijos. Pero el 99% de las escuelas privadas no funciona en red ni tiene infraestructura. As¨ª naci¨® Innova¡±, cont¨® Jessyca Sampe, gerente de planificaci¨®n del grupo. El proyecto cuenta hoy con 40 escuelas, 10 de ellas en Lima, y aspiran a alcanzar las 70 en 2020. ¡°El modelo educativo se basa en el juego y la exploraci¨®n. El profesor es un facilitador y los estudiantes trabajan en plataformas de autoaprendizaje¡±, detall¨® Samp¨¦. La gran prueba es como convertir la innovaci¨®n en un valor y despojarle la carga negativa que pueda tener ser la palabra de moda.
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