El primer ministro iraqu¨ª declara la victoria sobre el ISIS en Mosul

El primer ministro de Irak, Haider al Abadi, ha felicitado este domingo a las fuerzas gubernamentales por su ¡°victoria¡± sobre el Estado Isl¨¢mico (ISIS, por sus siglas en ingl¨¦s) en Mosul. Despu¨¦s de nueve meses de duro combate urbano, las tropas han logrado pr¨¢cticamente echar a los yihadistas de esa ciudad, aunque a¨²n quedan algunos combatientes en la zona Al Qaliyat. No obstante, la euforia oficial queda eclipsada por el elevado coste humano y material de la contienda, as¨ª como por la convicci¨®n de que a¨²n queda mucho trabajo para acabar con el poder de atracci¨®n del ISIS.

¡°El comandante jefe de las Fuerzas Armadas, Haider al Abadi, lleg¨® a la ciudad liberada de Mosul y felicit¨® a los heroicos combatientes y al pueblo de Irak por la gran victoria¡±, aseguraba un comunicado difundido por la oficina del primer ministro. El presidente franc¨¦s, Emmanuel?Macron, ha celebrado el triunfo del Ej¨¦rcito en Mosul y ha mostrado el agradecimiento del pa¨ªs a sus tropas. "Desde Francia rendimos homenaje a todos aquellos que, con nuestras tropas, han contribuido a la victoria".

El Ej¨¦rcito iraqu¨ª hab¨ªa anunciado poco antes la liberaci¨®n de la zona de Al Midan, en el casco antiguo, a la vez que indicaba que segu¨ªan los combates en la vecina Al Qaliyat, donde al parecer se han atrincherado los ¨²ltimos resistentes yihadistas. El comandante del Mando de Operaciones Conjuntas, el general Abdel Amir Jarallah, tambi¨¦n a?adi¨® que las fuerzas antiterroristas, punta de lanza de la ofensiva para recuperar Mosul, avanzan hacia ese objetivo, ¡°el ¨²ltimo¡± en manos del ISIS, dentro del n¨²cleo urbano.

Nadie cuestiona el enorme paso que supone la expulsi¨®n de los milicianos del ISIS de su gran basti¨®n iraqu¨ª, la ciudad desde la que justo hace tres a?os el l¨ªder de ese grupo, Abu Bakr al Bagdadi, proclam¨® el califato, y la mayor bajo su f¨¦rula. Pero a nadie se le esconde que hay mucho de pol¨ªtico en el gesto de Al Abadi. El fin del control de Mosul por ese grupo radical sun¨ª no significa ni su derrota ni el final de los problemas ¨¦tnicos y sectarios de Irak que facilitaron su ascenso en primer lugar. Y eso a pesar de que tambi¨¦n est¨¢ perdiendo terreno al otro lado de la frontera con Siria, en Raqa.

Para empezar est¨¢n el trauma y las cicatrices de la guerra. La batalla para recuperar Mosul ha dejado miles de civiles muertos (nadie parece llevar la cuenta) y cerca de un mill¨®n de desplazados. ?A d¨®nde van a volver? Los primeros reporteros en acceder con los soldados al centro de la ciudad describen un paisaje desolador. Lo que fuera el casco antiguo ha quedado reducido a ruinas. Entre las mismas, los cuerpos de los yihadistas que han hecho frente a las tropas hasta el final se descomponen a temperaturas que esta semana han superado los 45?C. Todav¨ªa hay trampas explosivas en los pocos edificios y callejuelas que se mantienen en pie.

La misi¨®n de Naciones Unidas en Irak (UNAMI) ha estimado en mil millones de d¨®lares (unos 877 millones de euros) la reconstrucci¨®n de las infraestructuras b¨¢sicas de la que lleg¨® a ser la segunda ciudad iraqu¨ª. Si las reconquistas precedentes sirven de gu¨ªa, no hay mucha esperanza de que una poblaci¨®n traumatizada por nueve meses de guerra, dos a?os de dominaci¨®n del ISIS y los diez precedentes de sucesivas batallas e inestabilidad vaya a regresar pronto.

Adem¨¢s, el ISIS a¨²n controla algunas bolsas de territorio en Irak y seg¨²n todos los expertos se est¨¢ metamorfoseando en un grupo terrorista. En los ¨²ltimos d¨ªas, a medida que su situaci¨®n se hac¨ªa m¨¢s desesperada, recurri¨® a enviar mujeres bomba entre los miles de civiles que manten¨ªan como escudos humanos y han ido saliendo a medida que perd¨ªan territorio. A la vez, est¨¢ aumentando el n¨²mero de atentados dentro de zonas libres en teor¨ªa de su presencia como Kirkuk y Bagdad. Esa tendencia pone contra las cuerdas a unas fuerzas de seguridad llevadas al l¨ªmite por tres a?os de combates frente a los terroristas. Seg¨²n datos extraoficiales, las fuerzas antiterroristas, el cuerpo de ¨¦lite entrenado por EE UU, ha sufrido un 40% de bajas en la campa?a para liberar Mosul.

M¨¢s grave a¨²n, mientras Irak no resuelva sus fracturas internas, la ideolog¨ªa que sustenta a ese grupo seguir¨¢ resultando atractiva para quienes se sienten perdedores del cambio de r¨¦gimen que provoc¨® la intervenci¨®n estadounidense de 2003 y no se ven representados por el Gobierno de Bagdad. La ocupaci¨®n del ISIS en 2014 uni¨® a todos los grupos, ¨¢rabes y kurdos, mayor¨ªa chi¨ª y minor¨ªa sun¨ª, frente al enemigo com¨²n. Con Mosul liberada, las diferencias vuelven a salir a la superficie.

Irak afronta el a?o que viene unas cruciales elecciones legislativas sin que los partidos pol¨ªticos hayan logrado superar su afiliaci¨®n ¨¦tnico-religiosa ni consensuado un modelo nacional inclusivo. La descentralizaci¨®n, el reparto de los ingresos del petr¨®leo y el fin del sistema de patronazgo pol¨ªtico siguen rehenes de intereses partidistas. Si los pol¨ªticos no son capaces de elevarse sobre sus intereses y solucionar los problemas de los iraqu¨ªes, el pa¨ªs dar¨¢ a luz a un sucesor del ISIS.