Un esc¨¢ndalo de pedofilia sacude al colegio religioso donde estudi¨® Mauricio Macri
Un exalumno denunci¨® que fue abusado por el padre Alfredo hace 40 a?os y otras v¨ªctimas se sumaron
Hace unos meses, Argentina conoci¨® el infierno que vivieron los alumnos del Instituto Provolo de Mendoza y de La Plata, sometidos a abusos sexuales de todo tipo. Eran ni?os sordos y muy pobres y una monja seleccionaba a los m¨¢s d¨®ciles para entreg¨¢rselos a los curas ped¨®filos. Ahora, un nuevo esc¨¢ndalo de pedofilia vuelve a conmocionar al pa¨ªs, pero esta vez las v¨ªctimas no son menores vulnerables sino exalumnos de uno de los colegios m¨¢s exclusivos de Argentina, el Cardenal Newman, en el que estudi¨® el presidente argentino, Mauricio Macri, y varios miembros de su Gabinete.
Rufino Varela ten¨ªa 12 a?os cuando fue abusado por el cura irland¨¦s Finnlugh Mac Conastair, conocido en el Newman como padre Alfredo, seg¨²n revel¨® en un art¨ªculo publicado en La Naci¨®n a fines de diciembre. Seis meses despu¨¦s de haber roto el silencio, Varela asegura que cuenta con el testimonio de otras 22 personas que sufrieron abusos parecidos al suyo en la escuela, aunque ninguno m¨¢s se ha atrevido a hacerlo p¨²blico. Desde el Newman afirman que cinco exestudiantes se han presentado ante la comisi¨®n de psic¨®logos creada ex profeso para contar su caso y recibir contenci¨®n, aunque admiten que la cifra puede ser m¨¢s alta, ya que "es comprensible que muchos no quieran acercarse".
"El abuso no es de derecha ni de izquierda, no es de gente pobre ni rica", dice Varela.
El abuso a Varela se perpetr¨® un mediod¨ªa de 1977. El joven acudi¨® al padre Alfredo para confesarle que el casero de su familia abusaba de ¨¦l. Al escucharlo, el cura lo llev¨® a su cuarto, debajo de la capilla, le oblig¨® a bajarse los pantalones, lo acost¨® boca abajo en su cama, lo azot¨® y manose¨® mientras le preguntaba detalles sexuales. "Ya est¨¢s en paz y esto es un secreto entre nosotros y Dios", le dijo el religioso cuando termin¨®. Le quiso dar unos caramelos que ten¨ªa en una bolsa, pero Varela le dio un codazo y se alej¨® de ¨¦l corriendo. Lloraba cuando volvi¨® a clase.
Tard¨® muchos a?os en poder verbalizar lo que hab¨ªa sufrido y a¨²n entonces, el episodio era conocido s¨®lo por su c¨ªrculo ¨ªntimo. Sin embargo, cuando se enter¨® de que el colegio planeaba coronar el le¨®n del escudo para celebrar que Macri hab¨ªa llegado a la presidencia escribi¨® al director para decirle que en todo caso deb¨ªa ser una corona de espinas y le cont¨® lo ocurrido cuando se encontraron en persona. Varela decidi¨® dar un paso m¨¢s despu¨¦s de que el colegio se negase reiteradamente a un pedido p¨²blico de disculpa. ?ste s¨®lo lleg¨® un d¨ªa despu¨¦s de que su testimonio apareciese publicado en el diario y desatase un terremoto.
"Desde que lo cont¨¦, siento que revole¨¦ una mochila pesada pero aparecieron muchas mochilas m¨¢s. En un mes ten¨ªa 14, 15 casos del Newman y otros 140 casos en familias no vinculadas al colegio", dice a EL PA?S Varela. De 52 a?os, casado y con dos hijos, Varela fue profesor de tenis y despu¨¦s importador de muebles, pero desde que se atrevi¨® a hablar vive dedicado a combatir el abuso con la organizaci¨®n que ha creado con ese fin, Cruzada francisca. A trav¨¦s de Facebook o del tel¨¦fono m¨®vil, cada d¨ªa recibe mensajes de personas que le cuentan el calvario que han pasado y le preguntan qu¨¦ pueden hacer. "Creo que ayudo a mucha gente y que es una obligaci¨®n moral contarlo, m¨¢s all¨¢ de quienes lastime por el camino", opina. "No hay vuelta atr¨¢s".
"Todo el mundo est¨¢ expuesto"
"Esto no es un ataque contra el Newman. El Newman de hoy no es el Newman de hace 40 a?os, ni las familias de hoy son las familias de hace 40 a?os", subraya Varela, consciente de la divisi¨®n de opiniones que su testimonio ha generado en su comunidad escolar. Algunos excompa?eros le recriminan haber ensuciado la imagen del colegio, hay quienes le dicen que inventa y los que insin¨²an que busca perjudicar a Macri, pero muchos tambi¨¦n apoyan su valent¨ªa por sacar a la luz un tema espinoso que casi siempre permanece oculto. "El abuso no es ni de derecha ni de izquierda, no es cat¨®lico, ni jud¨ªo ni protestante. No es de gente pobre ni gente rica. El abusador elige a su v¨ªctima por un tema de oportunidad y estudio, pero no le pregunta nada de eso, todo el mundo est¨¢ expuesto", dice.
El Cardenal Newman es uno de los pocos colegios de Argentina que se mantiene solo para varones. Fue fundado en 1948 por la congregaci¨®n irlandesa Christian Brothers, en San Isidro, a las afueras de Buenos Aires, aunque desde hace una d¨¦cada est¨¢ dirigido por laicos. Adem¨¢s de Macri, estudiaron en ¨¦l sus ministros de Interior, Rogelio Friguerio; Finanzas, Luis Caputo; de Trabajo, Jorge Triaca; y su exministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay.
El pasado 10 de abril, el superior regional de los Christian Brothers admiti¨® la existencia en el pasado de abusos al pedir perd¨®n a "todas las v¨ªctimas del colegio" en una carta p¨²blica. Semanas atr¨¢s, Varela recibi¨® un correo electr¨®nico de la Polic¨ªa irlandesa en la que le solicitaba que le facilitase el contacto de otras v¨ªctimas y tambi¨¦n de abusadores que podr¨ªan seguir vivos. El padre Alfredo falleci¨® en 1997, pero el director de la escuela durante los a?os 70, John Burke, se encuentra en Irlanda. En 1981, Burke retir¨® al padre Alfredo del Newman sin informar las causas ni hacer la denuncia y lo traslad¨® a una vicar¨ªa de Jos¨¦ Le¨®n Su¨¢rez, en la provincia de Buenos Aires.
El padre Alfredo podr¨ªa no ser el ¨²nico cura acusado. La semana pasada, otro exalumno del colegio, Guillermo Newbery, dijo a la revista Noticias que denunci¨® en 1964 al entonces director de la primaria, el padre Derham, por manosear a varios de sus compa?eros. Seg¨²n el semanario, el cura fue trasladado a un colegio en Montevideo y Newbery expulsado del Newman al cerrar el a?o. Su testimonio puede abrir la puerta a nuevas denuncias.
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