Menos cazas, m¨¢s antivirus
Europa se enfrenta a una ciberguerra que se ensaya a diario en el patio trasero de Ucrania
El t¨¢ndem francoalem¨¢n se enfrasca en el desarrollo de un nuevo caza y Espa?a en la compra de 60 F-35 estadounidenses ¡ª120 millones de euros por unidad¡ª, pero la principal amenaza contra los europeos no puede ser combatida con aviones. Hace 20 a?os sonaba a ciencia ficci¨®n. Hace diez, Estonia sufri¨® el primer ciberataque de Estado de la nueva era. Hoy, vemos uno de envergadura mundial por trimestre. Sin embargo, la ciberguerra no ha hecho m¨¢s que empezar.
Europa tiene muchas posibilidades de convertirse en el primer campo de batalla cibern¨¦tica regional, pero los responsables de seguridad no ponen medios de defensa adecuados ¡ªv¨¦ase el ¨¦xito de los ataques¡ª ni informan de los peligros a los ciudadanos. La prueba del riesgo est¨¢ hoy en Ucrania. All¨ª, y desde hace cuatro a?os, hackers de Estado ¡ªOccidente se?ala a Rusia¡ª tumban la red el¨¦ctrica, interrumpen el acceso a Internet o bloquean webs oficiales y redes de telefon¨ªa.
Ataques mundiales recientes con los virus WannaCry y Petya son vistos como ensayos para una ofensiva a gran escala contra Occidente. Analistas del Cooperative Cyber Defence Centre of Excellence, ligado a la OTAN, se preguntan en un reciente estudio si Rusia prepara ataques cibern¨¦ticos contra infraestructuras cr¨ªticas.
Grupos rusos de ciberespionaje, como los denominados Fancy Bear y Cozy Bear, han logrado objetivos de alto nivel. En 2015, Francia adjudic¨® a uno de ellos el ataque a la cadena TV5, que vio interrumpida su emisi¨®n dos d¨ªas mientras en sus hackeadas cuentas aparec¨ªa la bandera del ISIS. Hace unas semanas, el presidente Emmanuel Macron acus¨® a Mosc¨² de ataques cibern¨¦ticos contra su campa?a.
Son ejemplos, como tantos otros ¡ªla OTAN registra 500 ataques al mes¡ª, de que la amenaza se ampl¨ªa con el objetivo pol¨ªtico obvio de debilitar al rival. Ucrania ha registrado un caso extraordinario tras haber perdido el 20% de sus ca?ones de largo alcance D-30 a causa de bombardeos rusos o prorrusos. Nadie se explicaba c¨®mo eran localizados. El hallazgo ha sido incre¨ªble: hackers rusos hab¨ªan introducido un malware bautizado como Agente X en una aplicaci¨®n desarrollada por un oficial ucranio para manejar el D-30. Gracias al Agente X, los rusos localizaban los ca?ones en cuanto alguien activaba la aplicaci¨®n.
Las opciones para que los ciberataques a Ucrania traspasen las fronteras hacia el oeste son elevadas. Dos noticias de estos d¨ªas lo auguran. Kiev ha planteado oficialmente su viejo deseo de incorporarse a la OTAN, una tesis vista como una agresi¨®n por Mosc¨². A su vez, la organizaci¨®n atl¨¢ntica ha asumido p¨²blicamente que los aliados activar¨¢n el art¨ªculo 5 del tratado ¡ªdefensa mutua¡ª si uno de ellos sufre un ciberataque.
Los servicios secretos alemanes acaban de citar al ciberespionaje como una de las principales amenazas para el pa¨ªs y apuntan a Rusia, China y Turqu¨ªa. Temen ciberataques ante las elecciones de septiembre, como ya pas¨® en Estados Unidos o Francia.
La peque?a Estonia ha tomado una original medida defensiva. Para proteger sus datos estatales, guardar¨¢ en Luxemburgo una copia de seguridad. Una ¡°embajada de datos¡±, como ha sido bautizada. Pese tener frontera con Rusia, el pa¨ªs b¨¢ltico no tiene ni un solo avi¨®n de combate. Seguramente ha llegado el momento de imitarlo.
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