¡°De seguir as¨ª, Maduro podr¨ªa ser juzgado por cr¨ªmenes de lesa humanidad¡±

El investigador de Amnist¨ªa Internacional Ignacio Jovtis (Mar del Plata, 1979) lleg¨® a Caracas un d¨ªa despu¨¦s de que el Gobierno de Nicol¨¢s Maduro concediera?arresto domiciliario a Leopoldo L¨®pez, el principal l¨ªder opositor encarcelado del pa¨ªs. Una alfombra de piedras, cartuchos de gases lacrim¨®genos y bombas molotov se tend¨ªa ese 9 de julio entre el aeropuerto y el hotel al que lleg¨® el abogado argentino. Eran los restos de las manifestaciones contra el Gobierno bolivariano, que duran ya m¨¢s de tres meses y en las que ha habido casi un centenar de muertos.

Amnist¨ªa ha documentado la violaci¨®n sistem¨¢tica de los derechos humanos por parte del Estado venezolano durante la crisis pol¨ªtica. Y ha advertido sobre la alta probabilidad de que aumente en la v¨ªspera de la votaci¨®n para la Asamblea Constituyente, el 30 de julio, convocada por Maduro en medio de su prolongado pulso con el Parlamento para despojar de sus facultades a este poder de mayor¨ªa opositora. Jovtis habla de esta dif¨ªcil situaci¨®n en una entrevista en Madrid.

Pregunta. ?Cu¨¢l es su diagn¨®stico de la crisis de Venezuela?

Respuesta. La situaci¨®n es de crisis de los derechos humanos. Y decimos crisis porque hay un abanico de derechos humanos que est¨¢n siendo vulnerados, tanto de acceso a alimentaci¨®n, a medicamentos¡­ Amnist¨ªa Internacional document¨® casos de tortura, de ejecuciones, de asesinatos, de detenciones arbitrarias, de uso excesivo de la fuerza durante las manifestaciones. El pa¨ªs est¨¢ envuelto en una crisis de derechos humanos muy grande. Esa fue la sensaci¨®n que tuve la semana pasada cuando estuve all¨ª.

P. ?El pa¨ªs est¨¢ cerca de entrar a un enfrentamiento del tipo de una guerra civil?

R. Desde el lugar de Amnist¨ªa, eso ser¨ªa especular, hacer futurolog¨ªa. No lo podemos saber. S¨ª que est¨¢ claro ¡ªporque lo hemos documentado¡ª que en el contexto de las manifestaciones se han dado casos de uso excesivo de la fuerza que en muchas ocasiones han terminado en asesinatos. Hay una conflictividad muy grande desde ese punto de vista. Si eso escalara, naturalmente terminar¨ªa en lo que en el derecho internacional humanitario se llama un conflicto interno, pero eso no lo podemos asegurar.

P. Amnist¨ªa ha acusado al Gobierno de usar la violencia sistem¨¢tica para reprimir a la oposici¨®n. ?C¨®mo funciona esto?

R. Al principio parec¨ªan episodios aislados, pero desde Amnist¨ªa hemos documentado que eso no es as¨ª, que existe un patr¨®n, una pol¨ªtica de Estado tendiente a reprimir voces disidentes. Hemos documentado casos de gente que tiene pedidos [¨®rdenes] de excarcelaci¨®n de hace un a?o y que no sale. En las manifestaciones tambi¨¦n hubo asesinatos. Acompa?ado a esto hay discursos que fomentan esa violencia por parte del Gobierno.

P. ?Cu¨¢l es la situaci¨®n de los m¨¢s de 400 venezolanos sometidos a la justicia penal militar?

R. Ese es uno de los casos que seg¨²n el derecho internacional se puede calificar como detenci¨®n arbitraria. La semana pasada me pude reunir con las esposas de unos polic¨ªas de Chacao [un municipio al este de Caracas gobernado por el opositor Ram¨®n Muchacho] que desde agosto del a?o pasado tienen orden de excarcelaci¨®n firmada por un juez y siguen presos. Ahora han iniciado una huelga de hambre y est¨¢n ah¨ª, en un edificio en el centro de Caracas, y no se sabe cu¨¢ndo los van a soltar. Como a Leopoldo L¨®pez lo trasladaron durante la madrugada, la esposa de una de las personas que est¨¢ detenida ah¨ª me contaba que ella iba en la madrugada para ver si liberaban a su marido. Y no tienen ning¨²n tipo de respuesta del Gobierno. O sea, hay una orden, un fiscal que pide que los liberen, una orden judicial que dice que hay que liberarlos desde hace un a?o, y no pasa nada. Casos como estos hay muchos: gente que es encarcelada sin ning¨²n tipo de juicio, gente que est¨¢ acusada de delitos militares cuando en realidad son civiles¡­

P. ?Qu¨¦ consecuencias legales tienen estos abusos?

R. Si esto sigue as¨ª, se podr¨ªa terminar obteniendo evidencias de que se est¨¢n cometiendo cr¨ªmenes de lesa humanidad en Venezuela. Este aspecto del patr¨®n generalizado [de violencia] como pol¨ªtica de Estado es un elemento importante, porque de continuar la situaci¨®n as¨ª vamos a seguir recolectando evidencia para ver si podemos valorar esto seg¨²n el derecho internacional como un crimen de lesa humanidad.

P. Un centenar de congresistas chilenos y colombianos han denunciado a Maduro ante la Corte Penal Internacional de La Haya por ese tipo de cr¨ªmenes. ?Cu¨¢l es la probabilidad de que sea juzgado?

R. Si esto sigue as¨ª, se van a dar los elementos jur¨ªdicos como para que eso suceda. Eso podr¨ªa pasar. No puedo ser m¨¢s contundente de lo que estoy siendo porque tenemos que terminar de cerrar incidencias. Pero de seguir as¨ª, s¨ª que podr¨ªa acabar en el Art¨ªculo 7 del Estatuto de Roma [sobre cr¨ªmenes de lesa humanidad] y se podr¨ªa llegar al tipo penal. Por eso hablamos de la necesidad de que otros Estados apliquen la jurisdicci¨®n universal, que Amnist¨ªa solamente la pide para las graves violaciones de derechos humanos. Hay que hacer algo para que esto pare.

P. Hace unas semanas el Gobierno dio casa por c¨¢rcel al opositor Leopoldo L¨®pez, pero en paralelo ha intensificado el hostigamiento a la oposici¨®n con la detenci¨®n de tres diputados.

R. El caso de Leopoldo L¨®pez ilustra una situaci¨®n mucho m¨¢s generalizada. Con ese traslado no se soluciona el problema en lo m¨¢s m¨ªnimo. Primero, porque no fue liberado; y despu¨¦s porque hay un mont¨®n de gente como ¨¦l.