Maduro se asegura el control de la convocatoria

El chavismo recurri¨® este martes a la convocatoria de elecciones presidenciales antes del 30 de abril siguiendo una estrategia que le asegura el control de los tiempos y de los escenarios que rodean a esa cita. Lo hizo unilateralmente, ya que el ¨®rgano que la aprob¨® ¨Cpor aclamaci¨®n-, la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) de Venezuela, est¨¢ conformado exclusivamente por diputados oficialistas. Tras uno de los a?os m¨¢s dram¨¢ticos de la historia reciente del pa¨ªs, asfixiado por la hiperinflaci¨®n y el desastre econ¨®mico, el r¨¦gimen de Nicol¨¢s Maduro busca culminar su huida hacia adelante. Fortalecerse, demostrar a la comunidad internacional que su poder sigue intacto a pesar del hartazgo de ampl¨ªsimos sectores de la sociedad y desafiar a la oposici¨®n, que atraviesa uno de sus peores momentos.

Esos comicios, a falta de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) determine una fecha, se van a celebrar en medio de un ciclo electoral trascendental para Am¨¦rica Latina. Colombia elige presidente el 27 de mayo, M¨¦xico votar¨¢ al sustituto de Enrique Pe?a Nieto el 1 de julio y los brasile?os acudir¨¢n a las urnas en octubre. Esta circunstancia permitir¨¢ a Maduro mantener su pulso con unos Gobiernos muy cr¨ªticos con la deriva de la llamada revoluci¨®n bolivariana. Al mismo tiempo, cabe esperar que lo que ocurra en Venezuela agite tambi¨¦n las campa?as en esos pa¨ªses. El aparato chavista utilizar¨¢, adem¨¢s, el argumento de las elecciones para tratar de lavar su imagen y dar una p¨¢tina de democracia a su gesti¨®n. Sin embargo, como ya ocurri¨® a lo largo de 2017, lo har¨¢ imponiendo sus reglas de juego.

Desde el pasado 30 de julio, el oficialismo ha logrado aumentar su dominio de las instituciones y debilitar a la opositora Mesa de Unidad Democr¨¢tica (MUD) precisamente gracias a tres votaciones. Primero, desmantel¨® el Parlamento elegido en diciembre de 2015, en el que hab¨ªa una mayor¨ªa de representantes cr¨ªticos con el r¨¦gimen, y eligi¨® una nueva Asamblea Nacional Constituyente que act¨²a como brazo ejecutor del Gobierno. En segundo lugar, convoc¨® en octubre unas elecciones regionales que, sin apenas supervisi¨®n internacional y manchadas por las acusaciones de fraude, multiplic¨® su poder territorial. Ese resultado contribuy¨® a la divisi¨®n de la oposici¨®n, cuyos principales partidos decidieron no presentarse a los comicios municipales de diciembre.

Tambi¨¦n en esta ocasi¨®n, algunas de las fuerzas mayoritarias de la MUD, a las que el propio Maduro amenaz¨® con excluir de las presidenciales, afrontar¨¢n este dilema. Esto es, si participar en una cita que deber¨ªa ser decisiva para el futuro de Venezuela, previsiblemente sin garant¨ªas ni observadores acordados entre las partes, y competir con una maquinaria que cuenta con todos los resortes de poder necesarios para controlar la celebraci¨®n de esa cita.