Las fuerzas radicales avanzan en Italia en un escenario sin mayor¨ªas claras
El Movimiento 5 Estrellas crece de manera espectacular, pero la coalici¨®n de centroderecha se adelantar¨ªa sin llegar a los asientos necesarios.
Italia acudi¨® ayer a votar amenazada por la ingobernabilidad y se acost¨® todav¨ªa m¨¢s inquieta. Tras Espa?a y Alemania, el pa¨ªs de los 64 Gobiernos en 70 a?os sufre las consecuencias del fin del bipartidismo y del clar¨ªsimo avance de las fuerzas radicales. Los primeros resultados se?alan que nadie lograr¨¢ una mayor¨ªa por si solo. El Movimiento 5 Estrellas crece de manera espectacular, pero la coalici¨®n de centroderecha, con una Liga que logra el sorpasso a Forza Italia, se adelantar¨ªa sin lograr los asientos necesarios. Se abre un complejo escenario, el menos deseado por la UE, en el que las opciones moderadas se derrumban en la tercera econom¨ªa de la zona euro.
Unos 46 millones de italianos estaban llamados a resolver un entuerto que las encuestas llevaban pronosticando durante semanas. Han votado en torno al 73% de los electores, casi dos puntos por debajo de la asistencia registrada hace cinco a?os. Y la opci¨®n de protesta, el mensaje contra el establishment y los posibles arreglos poselectorales ha triunfado en Italia. El recuento del 95% de los votos confirma el derrumbe de las fuerzas de centro -Forza Italia Y PD- y una complicada situaci¨®n de bloqueo.
El Movimiento 5 Estrellas es el partido ganador las elecciones con un gran resultado (m¨¢s del 32%), pero no ser¨¢ capaz de llegar a la mayor¨ªa necesaria por si solo. Las proyecciones le conceden unos 230 esca?os, cuando la mayor¨ªa absoluta se sit¨²a en 316. La coalici¨®n de centroderecha superar¨ªa en m¨¢s de seis puntos a los grillini, pero su resultado (unos 250 esca?os seg¨²n las proyecciones) tampoco ayudar¨ªa a desbloquear la contienda y deber¨ªa buscar m¨¢s socios si quiere sacar adelante un proyecto en el que ha habido cambios muy significativos.
El primero: La Liga de Matteo Salvini da la sorpresa y obtiene unas cifras hist¨®ricas con las que supera a Forza Italia en el sento del centroderecha. El l¨ªder xen¨®fobo y euroesc¨¦ptico se convierte en la referencia del bloque con m¨¢s asientos en las dos c¨¢maras. El espectacular resultado le permitir¨ªa, entre otras cosas, formar un gobierno con el M5S, la opci¨®n que m¨¢s inquieta a la Uni¨®n Europea y a los mercados. Ambos partidos, y esa esa la segunda gran novedad, sumar¨ªan en ambas c¨¢maras la mayor¨ªa necesaria para gobernar Italia. El Partido Democr¨¢tico, se derrumba con un 19% de los votos (un 23% si se suma a sus coaligados), pero todav¨ªa podr¨ªa ser clave para cualquier soluci¨®n. Algunos de sus representantes, sin embargo, ya han anunciado que el fracaso les conducir¨ªa a la oposici¨®n.
Las dos fuerzas m¨¢s destacadas ayer -Movimiento 5 Estrellas y Centroderecha- ten¨ªan la calculadora en el sur del pa¨ªs. Ah¨ª se decid¨ªa realmente la contienda. El norte se daba por asegurado en las filas de Silvio Berlusconi y compa?¨ªa, pero las regiones de Sicilia, Campania, Puglia y Lazio iban a ser la piedra Rosetta del enigma electoral italiano, el m¨¢s incierto que se recuerda en un pa¨ªs cuya pol¨ªtica no es precisamente sencilla de descifrar.
Pero el M5S ten¨ªa muy avanzada la conquista de ese territorio, que se ha te?ido de amarillo. En Sicilia se ha llevado todos los colegios uninominales. La divisi¨®n norte-sur ahora tambi¨¦n es pol¨ªtica en Italia. Subi¨® la participaci¨®n, algo que habr¨ªa beneficiado a los grillinos en mezzogiorno, que lograron lo m¨¢ximo a lo que pod¨ªan aspirar: frenar al centroderecha y obtener un resultado hist¨®rico que le permitir¨¢ llevar la voz cantante en el escenario de los pactos poselectorales.
Salvini le arrebata a Berlusconi el liderazgo de la coalici¨®n
Una de las batallas m¨¢s apasionantes de estas elecciones era la que libraban silenciosamente Forza Italia y la Liga para liderar la coalici¨®n de centroderecha. Silvio Berlusconi y Matteo Salvini hab¨ªan acordado que quien obtuviese un voto m¨¢s elegir¨ªa al candidato a premier de la coalici¨®n. En el caso de Forza Italia es el presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani; en el de la Liga, el propio Salvini quiere erigirse en el aspirante a la presidencia del Consejo de Ministros.
Los primeros resultados indican que la Liga, un partido eur¨®fobo y antinmigraci¨®n, superar¨ªa a Berlusconi y se convertir¨ªa en la formaci¨®n de referencia de la derecha. Un sorpasso que, de confirmarse, supone un inquietante golpe de efecto. "La Uni¨®n Europea va a pasar hoy una mala noche", se congratul¨® Marine Le Pen en su cuenta de Twitter.
Este resultado, el mejor de la historia de un partido que no hace tanto defend¨ªa la secesi¨®n del norte de Italia, a?adir¨ªa agresividad a la fase poselectoral donde deben forjarse los pactos de gobierno. La formaci¨®n de corte lepenista es un fen¨®meno aupado por la crisis migratoria, que ha motivado unos 600.000 desembarcos en Italia en los ¨²ltimos cinco a?os y se ha convertido en su caballo de batalla.
El auge de la Liga abre tambi¨¦n la ventana al escenario m¨¢s temido por la UE y los mercados: un pacto entre el partido de Salvini y el Movimiento 5 Estrellas, que tambi¨¦n ha flirteado en los ¨²ltimos cinco a?os con la idea de convocar un refer¨¦ndum sobre el euro. El liderazgo de la Liga ser¨ªa dif¨ªcilmente aceptable por el establishment y por las instituciones italianas, inquietas por el discurso antieuropeo de Salvini, que ha prometido que Italia saldr¨¢ de la moneda ¨²nica si Europa no se aviene a negociar sus tratados.
Pero la fuerza con m¨¢s votos sigue siendo la del centroderecha, en plena lucha interna por el liderazgo del artefacto entre Matteo Salvini y Berlusconi ¡ªen el avance del recuento, la Liga (17,5%) supera en m¨¢s de tres puntos a su aliado (14%)¡ª. Pero la suma de las cifras de Forza Italia, la ultraderecha populista de la Liga y Hermanos de Italia no alcanzar¨ªa para gobernar. De modo que se abrir¨¢n diversos escenarios, incluido el que la propia coalici¨®n pesque en el caladero de otros grupos para alcanzar una base suficiente.
Desde que las encuestas dejaron de publicarse hace dos semanas, los n¨²meros hablaban de un complicado rompecabezas en tres bloques: el centroderecha, el centroizquierda y el M5S. La gravedad del asunto y la prisa en solucionarlo, en cualquier caso, la marcar¨¢n ahora los mercados y una prima de riesgo que empezar¨¢ a morder si el bloqueo no se solventa. El presidente de la Rep¨²blica, Sergio Mattarella, y las instituciones ya trabajan en un escenario de consultas y pactos para evitar el caos. Los mercados, por supuesto, hubieran preferido una gran coalici¨®n entre el centroizquierda ¡ªel Partido Democr¨¢tico (PD) de Matteo Renzi y +Europa de Emma Bonino¡ª y Forza Italia, un artefacto pol¨ªtico parecido al que ayer recibi¨® luz verde en Alemania. Pero ya no ser¨¢ posible. El desplome del PD en las primeras proyecciones (cerca de un 20% de votos, cinco puntos menos que en 2013) y la debilidad de Berlusconi no aportan cifras de mayor¨ªa. Pero en el Quirinale se barajaban ya otras dos soluciones de emergencia que contemplaban un gran resultado del M5S.
El partido fundado por Beppe Grillo deber¨ªa hacer sacrificios si quiere formar parte de un Ejecutivo. El m¨¢s claro, renunciar a su promesa de no entrar en alianzas de gobierno. En el seno del M5S se ha hablado del tema toda la semana. Los n¨²meros nunca le dieron una mayor¨ªa. Y una posibilidad evidente ser¨ªa formar un Ejecutivo con el PD de Renzi y la izquierda de Libres e Iguales, pero las primeras voces de los socialdem¨®cratas descartaban anoche esa idea.
En 2013, el entonces secretario general del PD, Pier Luigi Bersani, ya busc¨® un pacto con el M5S, el famoso Gobierno de cambio que le cost¨® el puesto, pese a haber obtenido un buen resultado (24,5%). Para Renzi, sin embargo, ser¨ªa una partida complicada, la negaci¨®n de todo lo que ha prometido hasta ahora de no pactar con ¡°los extremistas¡±. Una alianza que podr¨ªa fagocitar definitivamente al PD.
La otra opci¨®n, la que inquieta m¨¢s a los mercados y a la UE y que cog¨ªa cuerpo a medida que avanzaban las proyecciones, llevar¨ªa a decantarse por la Liga (que en las ¨²ltimas elecciones lleg¨® solo al 4,1% y ahora rondar¨ªa el 17,6%) y su socio peque?o, los posfascistas Hermanos de Italia. Una combinaci¨®n que entusiasma a personajes como Steve Bannon, el exasesor del presidente de EE?UU, Donald Trump, que se encuentra estos d¨ªas en Roma como hincha de las opciones m¨¢s populistas (dicho por ¨¦l mismo).
La militancia del M5S no ver¨ªa bien los pactos. Pero el partido liderado por Luigi di Maio no permite a sus representantes presentarse m¨¢s de dos legislaturas, una norma que afecta al propio candidato a primer ministro, que afronta ahora su segundo encargo. Si no hubiera gobierno y tuvieran que repetirse las elecciones, no podr¨ªa volver a presentarse, dato que podr¨ªa ayudarle a reconsiderar algunas de sus promesas. Alessandro di Battista, uno de los grandes exponentes de la formaci¨®n, advirti¨® el precio: ¡°Es un triunfo, una apoteosis. Ahora todos tendr¨¢n que hablar con nosotros¡±.
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