Una turba de vecinos lincha hasta la muerte a un funcionario electoral mexicano en Puebla

Un funcionario electoral fue linchado en una localidad de Puebla. Gaspar Palacios Monterrosas fue golpeado y quemado por una turba vecinal en Tlacotepec de Benito Ju¨¢rez, un municipio de Puebla ubicado a poco m¨¢s de tres horas de la capital mexicana. La Fiscal¨ªa del Estado ha informado que inici¨® una carpeta de investigaci¨®n para indagar el linchamiento de este hombre acusado por los pobladores de haber robado una motocicleta. Las autoridades han detallado que la madrugada del mi¨¦rcoles unas cien personas retuvieron a la v¨ªctima y no reportaron su detenci¨®n a las autoridades. El cuerpo ya fue identificado por los familiares.

Palacios Monterrosas fung¨ªa como presidente del Consejo Municipal del Instituto Electoral del Estado en la localidad de Chalchicomula de Sesma. La Fiscal¨ªa ha se?alado que investiga qu¨¦ hac¨ªa Palacios en la localidad donde se desat¨® la turba vecinal. En un comunicado de prensa el ¨®rgano electoral aclar¨® que lo sucedido no tiene relaci¨®n con el proceso electoral. Se investiga si Palacios fue confundido con un ladr¨®n de motos.

La Secretar¨ªa de Seguridad P¨²blica de Puebla ha advertido que el linchamiento es un delito que puede ser castigado hasta con 30 a?os de c¨¢rcel. En lo que va del a?o se han registrado 18 intentos de linchamientos en Puebla, de los que se han consumado nueve, seg¨²n reportes de medios locales. El ajusticiamiento popular es una de las caras m¨¢s salvajes del pa¨ªs que reflejan un gran vac¨ªo institucional. Los estados que concentran la mayor cantidad de casos son Puebla, Chiapas, Hidalgo, Estado de M¨¦xico y Oaxaca.

El m¨®vil es muy parecido en todos los casos: una persona propaga en la localidad la comisi¨®n de un delito perpetrado por alg¨²n desconocido. El rumor se propaga r¨¢pidamente por la comunidad ¨Cen la mayor¨ªa de los casos pueblos peque?os- y un grupo de vecinos detiene al presunto responsable. La turba no reporta el il¨ªcito a las autoridades y amarra al ajusticiado, a quien golpea y posteriormente prende fuego. Cuando las autoridades se percatan del hecho siempre es demasiado tarde. El linchamiento se ha consumado.

Uno de los casos m¨¢s pol¨¦micos ocurridos en Puebla fue el linchamiento de dos hermanos que fueron confundidos con secuestradores de ni?as. Los dos j¨®venes se encontraban en la localidad de Ajalpan levantando encuestas sobre las preferencias en marcas de tortilla. Un grupo de vecinos los se?al¨® como delincuentes y llamaron a la polic¨ªa. Ambos fueron llevados a la comisar¨ªa, a donde lleg¨® la turba a sacarlos de la comandancia para golpearlos y prenderles fuego.

Los escasos expertos que le prestan atenci¨®n al tema han acusado que el ajusticiamiento popular est¨¢ relacionado con los altos ¨ªndices de impunidad en el pa¨ªs, el deficiente sistema de justicia, la desconfianza en la polic¨ªa y la descomposici¨®n del tejido social. Este c¨®ctel repercute para que ante un presunto delito, la gente decida emprender el castigo por su propia mano, pese a que est¨¢ prohibido en la Constituci¨®n mexicana.