Al menos 69 muertos por la erupci¨®n del volc¨¢n de Fuego en Guatemala
La cat¨¢strofe asola el sur del pa¨ªs, donde tres aldeas han desaparecido bajo toneladas de ceniza
La erupci¨®n del volc¨¢n de Fuego este domingo ¡ªla m¨¢s fuerte del cr¨¢ter desde 1974¡ª es una tragedia cuyo alcance todav¨ªa se desconoce. La cifra oficial de fallecidos asciende ya a 69?personas, pero a¨²n quedan muchas zonas por revisar y el n¨²mero de desaparecidos es incalculable.?Solo en las inmediaciones de la aldea El Rodeo (Escuintla, en el sur de Guatemala, la zona m¨¢s afectada) los socorristas han localizado 29 cad¨¢veres, la mayor¨ªa de los cuales no pudieron ser evacuados debido a nuevos r¨ªos de lava y flujos pirocl¨¢sticos.
El m¨¢ximo responsable de la Coordinadora Nacional para la Reducci¨®n de Desastres (Conred), Sergio Garc¨ªa, afirm¨® la noche del domingo que se contabilizaban 3.100 personas evacuadas y 1,7 millones de ciudadanos afectados por la explosi¨®n. De momento se desconoce el n¨²mero de desaparecidos y el de refugiados, ya que muchos de ellos han buscado acogida en casas de familiares o amigos. Al menos tres aldeas desaparecieron bajo toneladas de ceniza.
Las im¨¢genes hablaban por s¨ª solas. Contemplar a un bombero llorar despu¨¦s de salir de la zona de la tragedia donde pudo ver entre los escombros de las casas a familias enteras calcinadas por la lava volc¨¢nica, es una de ellas. Mujeres que caminan como zombis intentando saber la suerte de sus seres queridos, incapaces de entender que no deben llegar hasta sus antiguas viviendas, sin grave riesgo para sus vidas, es otra.
La tragedia se produjo al filo de las tres de la tarde del domingo (hora local) cuando una avalancha de lava volc¨¢nica, piedras y lodo se precipit¨® sobre varias comunidades ubicadas en las faldas del cr¨¢ter. No todos lograron escapar. Familias completas quedaron atrapadas en sus humildes viviendas. Otras en una iglesia evang¨¦lica, donde asist¨ªan a la misa dominical. Algunos cuerpos, como el de una mujer embarazada, quedaron calcinados bajo las expulsiones volc¨¢nicas.
Entre los heridos considerados como "muy graves" se encuentran cuatro ni?os con quemaduras de tercer y cuarto grado. Por lo menos uno de ellos sobrevive con respiraci¨®n asistida. No es f¨¢cil establecer una cifra de heridos, porque cambia con el paso de las horas, mientras se desvanece la esperanza de encontrar a m¨¢s supervivientes.
Si humanamente las v¨ªctimas no han sido cuantificadas, el aspecto material ni siquiera ha sido atendido. Expertos como Gustavo Chigna, del Instituto de Sismolog¨ªa, Vulcanolog¨ªa, Meteorolog¨ªa e Hidrolog¨ªa (Insivumeh), calcula que las cosechas, particularmente de ma¨ªz y caf¨¦, habr¨ªan quedado reducidas a cenizas en un radio de cinco kil¨®metros alrededor del volc¨¢n.
Los albergues est¨¢n saturados, aunque tampoco se sabe a ciencia cierta el n¨²mero de refugiados, entre otras razones porque muchos lo han hecho en casas de amigos y familiares. No obstante, a las 21.00 del domingo la Conred report¨® 653 personas atendidas en refugios de Escuintla y Sacatep¨¦quez.
La lluvia de ceniza afect¨® a por lo menos cinco departamentos (provincias), circunstancia que conlleva el riesgo de contaminaci¨®n del agua potable, a la vez que pone en riesgo el sistema de drenaje, que puede saturarse. El presidente, Jimmy Morales, declar¨® el estado de calamidad en todo el territorio guatemalteco, algo que estaba previsto que se aprobase por el poder legislativo la tarde del lunes, en una reuni¨®n de emergencia.
En tanto, el aeropuerto La Aurora ha sido reabierto y los vuelos nacionales e internacionales empiezan a operar con normalidad.
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