Boris Johnson consolida su ventaja para liderar a los conservadores
El exministro para el Brexit, Dominic Raab, queda descartado de la competici¨®n
Boris Johnson despierta tantas pasiones como recelos, y si llega a ser primer ministro del Reino Unido, no ser¨¢ un camino de rosas. Se comprob¨® este martes, en la segunda votaci¨®n de los diputados conservadores. El exalcalde de Londres consolid¨® su primer puesto, y hasta ara?¨® una decena de votos m¨¢s. Pero su apoyo sigue fijo en una tercera parte de sus correligionarios. Los otros dos tercios se repartir¨¢n este mi¨¦rcoles entre cuatro candidatos muy igualados en respaldo, que compiten por ser el rival responsable frente a un Johnson imprevisible.
La recta final en la batalla por liderar a los conservadores no ser¨¢ un duelo de ideas sino de personalidades. Ninguno de los candidatos reniega del Brexit, as¨ª que el criterio ¨²ltimo para decidirse por cualquiera de ellos ser¨¢ m¨¢s bien qui¨¦n es m¨¢s fiable para sacar al Reino Unido del atolladero; si los diputados ¡ªpor miedo a perder sus esca?os¡ª y los afiliados ¡ªextraviados en su fanatismo antieuropeo¡ª optan m¨¢s bien por un candidato que les lleve derechos al precipicio anhelado o si priman una dosis m¨ªnima de sensatez.
?Johnson consolida su posici¨®n como defensor ardiente del Brexit. Y ara?a poco a poco los respaldos de ese tercio de conservadores que suponen los euroesc¨¦pticos de pura raza. A los 114 apoyos que logr¨® en la primera ronda sum¨® este martes 12, hasta lograr 126 votos de un total de 313 diputados. La l¨®gica lleva a pensar que a su campo han ido a parar las 11 papeletas que obtuvo en su primer y ¨²nico intento Andrea Leadsom, la ministra para las Relaciones con la C¨¢mara de los Comunes. Durante el ¨²ltimo a?o fue la defensora m¨¢s firme de un Brexit a las bravas, sin acuerdo con la UE, y en las ¨²ltimas horas ha expresado p¨²blicamente su apoyo al candidato Johnson.
La segunda ronda exig¨ªa un respaldo m¨ªnimo de 33 votos para no quedar eliminado. El exministro para el Brexit, Dominic Raab, solo logr¨® 30. El cachorro neoliberal y thatcheriano al que cortejaron durante un tiempo las filas euroesc¨¦pticas se ha ido desinflando con rapidez, por una mezcla de ambici¨®n poco disimulada, torpeza en sus declaraciones y una exhibici¨®n de testosterona de la que no hizo gala en el breve periodo en que fue responsable de las negociaciones con Bruselas.
Tercera ronda
En la competici¨®n, que celebra este mi¨¦rcoles su tercera ronda, quedan Johnson y otros cuatro. Entre ellos, el ministro de Exteriores, Jeremy Hunt ¡ªque obtuvo este martes 46 votos¡ª sigue siendo el que ofrece una mayor imagen de experiencia y seriedad, pero adolece de magnetismo y no termina de ganar nuevos adeptos. El ministro para el Medio Ambiente, Michael Gove, sobrevive a su confesi¨®n de los flirteos juveniles con la coca¨ªna y mantiene su base. Ayer le apoyaron 41 diputados. Hasta ahora, fiel a su propia leyenda, ha demostrado ser el m¨¢s ¡°zorro¡± de los contendientes, al piropear a algunos de rivales, sembrar dudas sobre otros y criticar abiertamente la personalidad de Johnson.
Sajid Javid, el ministro del Interior, ha sido la segunda sorpresa del combate. Musulm¨¢n, de origen humilde, financiero de ¨¦xito que dio el salto a la pol¨ªtica, su historia personal y su mensaje inclusivo recaba apoyos entre aquellos conservadores que piensan que su partido, adem¨¢s de un nuevo l¨ªder, necesita un renovado cambio de imagen.
Porque la primera sorpresa, como reflejan los medios brit¨¢nicos, es Rory Stewart. Este pol¨ªtico con pinta de despistado, de or¨ªgenes y educaci¨®n arist¨®cratas, tutor de los pr¨ªncipes Enrique y Guillermo, diplom¨¢tico y aventurero, se ha convertido, con un discurso sensato y honesto, en la esperanza de muchos.
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