Las detenciones de inmigrantes en la frontera sur de Estados Unidos caen un 75% en seis meses
Los acuerdos forzados de Trump con M¨¦xico y pa¨ªses centroamericanos logran frenar la ola migratoria
El escenario en la frontera de Estados Unidos con M¨¦xico ha cambiado dr¨¢sticamente aunque haya pasado medio a?o. El punto m¨¢s alto de la crisis migratoria lo marcaron las 132.000 detenciones en mayo, una cifra que no se hab¨ªa visto en los ¨²ltimos 13 a?os. Pero aunque haya pasado solo medio a?o, las caravanas son un recuerdo lejano. La Oficina de Aduanas y Protecci¨®n Fronteriza estadounidense inform¨® este lunes que en noviembre detuvieron a 33.510 inmigrantes, encadenando la sexta disminuci¨®n mensual consecutiva. La ca¨ªda del 75% desde mayo es la segunda m¨¢s grande a nivel porcentual de cualquier per¨ªodo de seis meses en lo que va de siglo, seg¨²n The Wall Street Journal.?
La racha se debe a una serie de acuerdos logrados por el presidente Donald Trump con algunos de sus vecinos de la regi¨®n, principalmente con el Gobierno mexicano de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, que reforz¨® los controles extranjeros y militariz¨® su frontera en el sur para evitar una subida arancelaria de parte de Washington.
La ola migratoria que lleg¨® a la frontera de Estados Unidos esta primavera trajo consigo a un nuevo perfil de inmigrantes. Ya no eran hombres solos que ven¨ªan de M¨¦xico en busca de una oportunidad laboral. Ahora eran en su mayor¨ªa familias centroamericanas escapando de la violencia y pobreza de sus pa¨ªses. Para frenarlos, Trump primero forz¨® el acuerdo en junio con M¨¦xico y en julio con Guatemala. Al pa¨ªs centroamericano tambi¨¦n lo amenaz¨® con imponer aranceles comerciales si no hac¨ªa lo que le ped¨ªa: convertirse en tercer pa¨ªs seguro. Esto significa que los que quieran buscar refugio o asilo en Estados Unidos y que previamente han pasado por Guatemala deber¨¢n solicitarlo y esperar en este ¨²ltimo pa¨ªs. Washington tambi¨¦n ha llegado a acuerdos similares con Honduras y El Salvador, aunque todav¨ªa no entran en vigor.
El director interino de la seguridad de fronteras de Estados Unidos, Ken Cuccinelli, cuestionado este martes en una rueda de prensa en Washington sobre el riesgo para los inmigrantes de esperar mientras se resuelve su proceso de asilo en los pa¨ªses de los que estaban escapando por inseguros, respondi¨®: "El viaje que emprenden hacia EE UU es de por s¨ª muy inseguro y riesgoso. La ¨²nica manera de que no se expongan a los abusos es que no se produzca el viaje. Los desaf¨ªos que ellos enfrentan tambi¨¦n los tienen otros pa¨ªses. Estados Unidos tiene lugares a los que yo no ir¨ªa. Desafortunadamente, varios. Pero al igual que esos pa¨ªses tambi¨¦n tienen zonas seguras que funcionan bien. Nosotros queremos asegurarnos de que se queden lo m¨¢s cerca de casa posible, para que cuando se sienten seguros decidan, voluntariamente, volver a su hogar".
El mensaje de Cuccinelli enfatiz¨® en que quienes soliciten una entrada legal al pa¨ªs tienen verdaderas opciones. Sostuvo que durante el a?o fiscal de 2019 se convirtieron en ciudadanos estadounidenses 800.000 inmigrantes. Y que el a?o pasado fueron sobre 760.000. "La suma de los dos primeros a?os fiscales completos de la Administraci¨®n son las cifras m¨¢s altas de nuevos ciudadanos, comparadas con cualquier presidente en la historia en el mismo rango de tiempo". Pero en agosto, el mismo Cuccinelli, dio a conocer el endurecimiento de los requisitos para obtener la residencia a los inmigrantes legales que reciben ayudas sociales, como el programa gratuito de salud Medicaid o los cupones de alimentos. La norma ampl¨ªa la definici¨®n de "carga p¨²blica" para reducir los permisos de residencia legal o green card a quienes "dependen de los recursos p¨²blicos para satisfacer sus necesidades".
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