El partido gobernante de Singapur renueva mandato pero pierde apoyo en favor de la oposici¨®n

El Partido de Acci¨®n Popular (PAP), en el poder desde la independencia de Singapur en 1965, se ha alzado este viernes con una nueva victoria en las elecciones de la ciudad-Estado asi¨¢tica, seg¨²n los recuentos preliminares. Se prev¨¦ que sea, no obstante, uno de sus peores resultados de los ¨²ltimos a?os, con la oposici¨®n logrando por primera vez m¨¢s del 10% de la representaci¨®n parlamentaria en unos comicios marcados por la pandemia de co...

El Partido de Acci¨®n Popular (PAP), en el poder desde la independencia de Singapur en 1965, se ha alzado este viernes con una nueva victoria en las elecciones de la ciudad-Estado asi¨¢tica, seg¨²n los recuentos preliminares. Se prev¨¦ que sea, no obstante, uno de sus peores resultados de los ¨²ltimos a?os, con la oposici¨®n logrando por primera vez m¨¢s del 10% de la representaci¨®n parlamentaria en unos comicios marcados por la pandemia de coronavirus y la crisis econ¨®mica.

Seg¨²n los primeros recuentos de un muestreo, el PAP ha logrado una holgada mayor¨ªa, asegur¨¢ndose 83 de 93 esca?os, disputados por 192 candidatos y un r¨¦cord de 11 partidos. Mientras, el Partido de los Trabajadores, que ten¨ªa 6 esca?os hasta ahora, habr¨ªa logrado superar por primera vez el 10% de la representaci¨®n parlamentaria, con una decena de asientos. A falta del recuento definitivo, se trata de un resultado m¨¢s similar al de los comicios de 2011, cuando el PAP sufri¨® su peor resultado en cuatro d¨¦cadas, ganando un 60,1% de los votos, que al de las elecciones de 2015, en las que remont¨® hasta rozar el 70% de los apoyos.

Una de las principales sorpresas de la jornada fue la victoria del Partido de los Trabajadores en el distrito de Sengkang, que supone s¨®lo la segunda vez en la historia del pa¨ªs que una circunscripci¨®n con m¨²ltiples esca?os de la isla de 5,7 millones de habitantes cae en manos de la oposici¨®n. Docenas de vecinos del distrito salieron a la calle a celebrar el resultado, entre m¨²sica y v¨ªtores. Weilee, votante de dicha formaci¨®n en Sengkang, aseguraba este viernes que el pa¨ªs estaba listo para un cambio.

¡°Estas elecciones han sido un desastre, empezando por el hecho de que se celebren en plena pandemia¡±, critica Weilee. Los 2,65 millones de ciudadanos llamados este viernes a las urnas en Singapur ¡ªuno de los pa¨ªses m¨¢s afectados por el coronavirus del sudeste asi¨¢tico, con m¨¢s de 45.000 casos y todav¨ªa cifras de contagios diarios de tres d¨ªgitos¡ª acudieron a votar con mascarillas y guantes desechables. En los centros electorales se les tomaba la temperatura, mientras se hab¨ªan establecido de antemano turnos con una franja de dos horas para cada votante.

¡°Lo que m¨¢s me preocupa son las crecientes desigualdades, el racismo del que el partido gobernante hace caso omiso deliberadamente, y su obsesi¨®n por priorizar el dinero sobre la gente¡±, considera la joven. Uno de los m¨¢ximos ejemplos de la desigualdad es, dice, la situaci¨®n de los centenares de miles de trabajadores inmigrantes, normalmente procedentes del sur de Asia, que trabajan como obreros de la construcci¨®n en la isla. Este colectivo, que reside en dormitorios en condiciones de hacinamiento, ha sido el m¨¢s afectado por la pandemia. Representa el 90% de los contagios, entre 100 y 200 casos diarios todav¨ªa. ¡°El desempleo y el coronavirus, en especial la situaci¨®n de los trabajadores migrantes, son mis principales preocupaciones¡±, aseguraba un joven que acud¨ªa junto a su t¨ªa a votar en un colegio del este de la isla.

La pandemia y la crisis econ¨®mica generada parcialmente en consecuencia ¡ªcon la previsi¨®n de que el pa¨ªs entre este a?o en su primera recesi¨®n desde la crisis financiera de 1998¡ª han sido un arma de doble filo para Gobierno y oposici¨®n. Los ¨²ltimos culpan al partido gobernante de desatender los barracones y empujar por ello al pa¨ªs a un semicierre de dos meses y unas nefastas consecuencias econ¨®micas que no han hecho m¨¢s que empezar. Para la oposici¨®n, ese ser¨ªa el motivo por el que se ha precipitado la convocatoria de los comicios, que pod¨ªan celebrarse como tarde en abril de 2021, cuando el PAP podr¨ªa ser m¨¢s castigado si la devastaci¨®n econ¨®mica se agudiza.

Por su lado, las autoridades singapurenses se han presentado como las ¨²nicas capaces de proteger a la ciudadan¨ªa de la crisis econ¨®mica y sanitaria. ¡°Esta elecci¨®n es muy seria, se trata de nuestros trabajos, nuestra vida y nuestro futuro¡±, asegur¨® el ¨²ltimo d¨ªa de campa?a el viceprimer ministro, Heng Swee Keat. El supuesto sucesor del actual primer ministro, Lee Hsien Loong, subray¨® la ¡°seriedad de la crisis de la covid-19. Tenemos que superar esta crisis y emerger todav¨ªa m¨¢s fuertes de ella¡±, a?adi¨®.

Estas elecciones se consideran tambi¨¦n una prueba de la confianza de los singapurenses en la nueva generaci¨®n del PAP. En principio, Heng Kwee Seat, de 59 a?os, sustituir¨ªa en alg¨²n momento de la pr¨®xima legislatura a Lee Hsien Loong. Heng habr¨ªa ganado el 54% del voto en su circunscripci¨®n, un resultado mediocre para quien en principio va a sustituir al primer ministro. Aunque el hijo del considerado padre de la patria, Lee Kuan Yew, quien convirti¨® lo que era una isla de pescadores en un centro de negocios regional, hab¨ªa advertido sobre su retirada, ha asegurado recientemente que se quedar¨¢ hasta que su pa¨ªs se recupere de la crisis.

¡°No son como mi padrino Lee Kuan Yew¡±, considera Harry (nombre ficticio), conductor de taxi de 54 a?os. El hombre asegura que, mientras el exdirigente ¡°sab¨ªa lo que hac¨ªa, ahora ya no es as¨ª. El coste de vida se ha elevado mucho¡±, a?ade. Por primera vez, su voto no ha sido para el PAP, sino para el nuevo Partido por el Progreso de Singapur (PSP), liderado por un exmiembro de la formaci¨®n gobernante, Tan Cheng Bock, y respaldado por el hermano y n¨¦mesis del primer ministro, Lee Hsien Yang. ¡°Al menos siento que ellos alzan la voz por nosotros¡±, enfatiza.

La crisis del coronavirus ha dejado al descubierto los contrastes de uno de los pa¨ªses con el PIB per c¨¢pita m¨¢s alto del planeta (cerca de los 65.000 d¨®lares anuales, m¨¢s de 59.000 euros), donde los obreros inmigrantes cobran alrededor de 600 d¨®lares al mes. Los asuntos raciales, un tema muy delicado en una naci¨®n multi¨¦tnica, con poblaci¨®n china (76,2%), malaya (15%) e india (7,45%), tambi¨¦n han estado en boga, sobre todo a ra¨ªz de una pol¨¦mica que ha salpicado a una candidata del Partido de los Trabajadores, Raessah Khan.

El PAP solicit¨® a la polic¨ªa que investigara unos comentarios publicados por Khan en Facebook hace a?os, en los que supuestamente suger¨ªa que ¡°la ley trata de forma diferente a los chinos ricos y a los blancos¡±. ¡°La mayor¨ªa de la gente puede hacer comentarios discriminatorios, pero si hablan las minor¨ªas, entonces enseguida se les amenaza con la ley¡±, arguye Liz (nombre ficticio).

El racismo y la inmigraci¨®n cualificada, con la mayor¨ªa de partidos opositores abogando por restringir la contrataci¨®n de extranjeros (actualmente unos 400.000) a favor de los singapurenses, han sido parte del debate de unas elecciones donde los votantes de la oposici¨®n parecen mostrarse m¨¢s vocales que los del PAP. En las inmediaciones del centro electoral de Ang Mo Kio, la circunscripci¨®n de Lee Hsien Loong, predominaba el rechazo a compartir consideraciones. Una mayor¨ªa silenciosa de la que es consciente Weilee. ¡°Quiz¨¢s porque estoy rodeada de gente joven que tambi¨¦n va a votar a la oposici¨®n, puedo creer que todo es as¨ª. Pero s¨¦ que una gran parte de la poblaci¨®n teme no votar al PAP¡±, elucubra.