La pandemia rompe el luto de los pueblos ind¨ªgenas de Brasil: ¡°Necesitamos llorar en nuestras aldeas¡±
Las comunidades piden un debate para conciliar sus rituales con los protocolos restrictivos del Gobierno por la covid-19
Cuando alguien del pueblo ind¨ªgena Kuikuro muere en Alto del Xing¨², en el coraz¨®n de Brasil, pintan su cuerpo con dibujos ancestrales para que pueda partir hacia el mundo de los muertos. Hay que adornarlo ¨Dy abrazarlo con fuerza durante la despedida¨D como si se preparase para una fiesta. Pintar a los que se fueron y vestirlos con la ropa de los antepasados es darles los elementos para que sean respetados en el otro lado. Pero, desde que la epidemia del coronavirus empez¨® a avanzar sobre las aldeas ¨Dya son m¨¢s de 8.000 infectados y...
Cuando alguien del pueblo ind¨ªgena Kuikuro muere en Alto del Xing¨², en el coraz¨®n de Brasil, pintan su cuerpo con dibujos ancestrales para que pueda partir hacia el mundo de los muertos. Hay que adornarlo ¨Dy abrazarlo con fuerza durante la despedida¨D como si se preparase para una fiesta. Pintar a los que se fueron y vestirlos con la ropa de los antepasados es darles los elementos para que sean respetados en el otro lado. Pero, desde que la epidemia del coronavirus empez¨® a avanzar sobre las aldeas ¨Dya son m¨¢s de 8.000 infectados y 184 muertos en el pa¨ªs, seg¨²n el Gobierno, y m¨¢s de 400 seg¨²n los c¨¢lculos de la asociaci¨®n de pueblos originarios¨D, varios grupos ind¨ªgenas han tenido que suspender sus rituales para frenar el contagio en sus territorios.
Siguiendo las directrices de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud, Brasil entierra en un ata¨²d precintado o incinera a las v¨ªctimas de la covid-19, sin funerales largos ni aglomeraciones. ¡°Ahora, los que mueren no van a ser guapos en el mundo de los muertos. Los parientes pueden pasar el resto de sus vidas en el otro mundo sintiendo verg¨¹enza¡±, dice el ind¨ªgena Takum? Kuikuro, hablando de su pueblo, que vive en un territorio en el sur del Parque Nacional del Xing¨², Estado de Mato Grosso. ¡°El coronavirus est¨¢ quebrantando nuestras creencias. No vemos a los muertos, no los podemos pintar ni abrazar. Nos tenemos que apartar todos. Y eso duele, est¨¢ hiriendo nuestra espiritualidad¡±, dice. En la aldea Ipatse ¨Duna de las 109 que acomodan al menos a 16 etnias en el Xing¨² y donde vive Takum?¨D ni siquiera podr¨¢n concluir ahora los ritos f¨²nebres de los parientes que murieron el a?o pasado a causa de otras enfermedades.
All¨ª, todos los a?os, los ind¨ªgenas esperan el tiempo de sequ¨ªa entre julio y agosto, cuando el agua del r¨ªo se vuelve m¨¢s cristalina y facilita la pesca, para rendirles el ¨²ltimo homenaje a los l¨ªderes que perdieron la vida el a?o anterior. Preparan el pescado y comidas a base de yuca para los dos d¨ªas de su ritual m¨¢s importante, cuando reciben a cientos de parientes de otras aldeas. El Kuarup es la ¨²ltima ceremonia para llorar a los muertos. Los participantes tocan flautas y sacudidores. Se disponen varios troncos de madera en el centro de la aldea para representar a los l¨ªderes muertos, a quienes se les llama para recibir, una vez m¨¢s, las pinturas que les servir¨¢n de adorno en el otro mundo. Durante horas, lloran por los que murieron. Luego, llega el momento de alegrar el esp¨ªritu del fallecido. Los hombres m¨¢s fuertes de la tribu luchan y se entonan m¨¢s c¨¢nticos. Cuando termina el Kuarup, acaba tambi¨¦n el luto. Pero la fiesta, que tendr¨ªa lugar este a?o, se ha pospuesto al a?o que viene debido a la pandemia.
¡±Nuestro luto va a durar un a?o m¨¢s. No vamos a poder hacer nuestro ¨²ltimo lloro ahora, y vamos a llorar tambi¨¦n por los que morir¨¢n por esta enfermedad. Nuestra alegr¨ªa solo puede volver mediante el Kuarup. Pero la tristeza aumenta cada vez m¨¢s¡±, dice Takum?. En el Xing¨², al menos 56 ind¨ªgenas ya han contra¨ªdo la covid-19 y dos han muerto, seg¨²n el Gobierno. El avance de la epidemia sobre las aldeas, hist¨®ricamente vulnerables y sometidas a un sistema de salud fr¨¢gil, ha activado una alerta y est¨¢ modificando las ceremonias tradicionales entre varios pueblos, que han implantado sus propias medidas sanitarias y orientan a la comunidad ¨Dincluyendo la suspensi¨®n o restricci¨®n de rituales¨D para frenar los contagios. Entienden el peligro que una enfermedad grave como esta, para la que todav¨ªa no hay medicamentos, supone para la comunidad. Pero tambi¨¦n saben que necesitan los rituales para que, tanto quienes murieron como quienes siguen vivos, puedan salir adelante.
Xavante y el di¨¢logo para restringir las ceremonias
El pueblo Xavante de la aldea Guadalupe, tambi¨¦n en el Estado de Mato Grosso, abre el ata¨²d varias veces y toca al pariente que muri¨®, en una demostraci¨®n de respeto y dolor durante la despedida. Es como dibujar en la memoria un ¨²ltimo recuerdo con las virtudes de quien se fue antes de que lo entierren en las fosas cercanas a la aldea. ¡°La persona solo vivir¨¢ ahora en el mundo del para¨ªso Xavante. Por eso, la familia tiene que abrirlo algunas veces [el ata¨²d] para dejarlo ir¡±, explica el ind¨ªgena Lucio Wa¡¯ane Terwaa. Despu¨¦s, hay otra celebraci¨®n donde se sirve una gran tarta para confortar a la familia. Lucio Wa¡¯ane Terwaa es tambi¨¦n un l¨ªder de los rituales sagrados. Cuenta que habla constantemente con la comunidad para que las familias suspendan o restrinjan las ceremonias durante la pandemia.
El nuevo coronavirus ya ha matado a m¨¢s de 30 xavantes, nueve de ellos en un solo d¨ªa. ¡°Algunas familias quer¨ªan despedirse normalmente, pero estamos intentando explic¨¢rselo. Ahora los ata¨²des tienes que estar cerrados. No podemos despedirnos como es debido en este momento¡±, dice Lucio Wa¡¯ane Terwaa. Cuenta que, aparte de los ritos f¨²nebres, tienen que interrumpirse otras ceremonias importantes para la comunidad, como el ritual sagrado Wai¡¯a, en el que los hombres se re¨²nen para buscar fuerza espiritual y tener visiones de otros universos. ¡°Estamos buscando formas de fortalecernos durante la pandemia sin nuestro ritual sagrado. Sabemos que esto es serio y a¨²n estamos buscando un soluci¨®n para nuestro ritual sagrado¡±, cuenta.
El regreso de los muertos yanomami
Cuando un yanomami muere, nunca se le puede poner bajo tierra. Son los rituales realizados durante meses en las aldeas los que le dan tiempo y fuerza al fallecido para que pueda vivir una vida sin males en otro universo y morir para la comunidad. Incluso cuando fallece en los hospitales de la ciudad, en tiempos normales, el yanomami regresa a la aldea.
El cad¨¢ver permanece un mes aislado para purificarse y, solo despu¨¦s, ser incinerado. Los parientes de las aldeas vecinas participan en la ceremonia, y sus cenizas se conservan hasta una nueva celebraci¨®n, en la cual se recuerda a quien parti¨® por sus virtudes y por su historia. Luego, las cenizas del difunto se diluyen en una gacha de pl¨¢tano, que comparten. Y ya no se habla m¨¢s de ¨¦l. Solo dejando en el olvido las cenizas de los muertos, sus almas podr¨¢n viajar al cielo con tranquilidad. Solo as¨ª es posible para los yanomamis eliminar el dolor y seguir adelante.
Este proceso de luto se ha visto interrumpido por la pandemia. El coronavirus ya ha llegado a varias aldeas yanomami, en el norte del pa¨ªs, y los cuerpos de al menos cuatro de ellos que murieron por la covid-19 fueron enterrados en el cementerio de la capital m¨¢s pr¨®xima, Boa Vista, en el Estado de Roraima. ¡°Ha sido la primera vez que ha ocurrido eso. Necesitamos llorar bastante en nuestras aldeas. La p¨¦rdida es muy grande. Lloramos 30 d¨ªas para poder matar la tristeza. La sociedad blanca tiene que entenderlo¡±, dice el l¨ªder yanomami D¨¢rio Kopenawa. ?l quiere que el Estado brasile?o sea m¨¢s claro y les explique a los pueblos originarios cu¨¢les son las normas de seguridad y c¨®mo devolver¨¢ los cuerpos a la aldea tras la pandemia.¡±Los yanomami entienden que deben tener seguridad, y que la xawara (enfermedades que traen los bancos a los territorios ind¨ªgenas) no puede propagarse.
¡°Estoy triste, porque en Boa Vista no se hacen cremaciones. Entiendo que por ahora haya que enterrarlos, pero necesitamos que sean claros. Que los infect¨®logos nos expliquen si hay que esperar dos o tres a?os para traerlos¡±, afirma D¨¢rio. El protocolo brasile?o permite la cremaci¨®n de cuerpos, pero Boa Vista no tiene crematorios. De momento, el pueblo yanomami solo ha logrado que una parte del cementerio municipal est¨¦ reservado a la etnia. All¨ª permanecer¨¢n los cuerpos de los muertos por coronavirus al menos hasta que puedan tra¨¦rselos de nuevo a sus aldeas. ¡°Estamos intentando dialogar con el Gobierno, pero a¨²n no est¨¢ claro c¨®mo ser¨¢ [su devoluci¨®n]¡±, asegura D¨¢rio.
El pueblo Yanomami cuenta con la ayuda del Ministerio P¨²blico Federal, que ya le ha recomendado a la Secretar¨ªa de Salud Ind¨ªgena (Sesai) ¨Dbrazo del Ministerio de Sanidad responsable de los pueblos ancestrales¨D que busque soluciones para las etnias. Ese tipo de decisiones est¨¢ multiplic¨¢ndose por el pa¨ªs, por eso los grupos ind¨ªgenas que tienen cementerios en las aldeas han conseguido enterrar all¨ª a sus parientes. EL PA?S se puso en contacto con la Sesai para saber cu¨¢les son los planes del Gobierno para que los ind¨ªgenas puedan llevar a cabo sus rituales f¨²nebres, aunque sea despu¨¦s de la pandemia, pero no obtuvo respuesta.
En varias comunidades, se quejan de que falta di¨¢logo para llegar a un acuerdo que respete las diversas tradiciones de las aldeas, un derecho asegurado por la Constituci¨®n brasile?a. ¡°Nuestra cultura no es as¨ª. Eso es la cultura de los blancos. Sentimos mucho dolor y sufrimiento por las p¨¦rdidas. Estamos muy preocupados por c¨®mo va a ser¡±, dice D¨¢rio. El antrop¨®logo e ind¨ªgena Jo?o Paulo Tukano explica que, de forma general, la colectividad marca tanto las actividades sociales de la aldea como la relaci¨®n con la muerte y con otros universos, a los que acceden con la mediaci¨®n de chamanes.
¡°Cuando me muera, esa fuerza tiene que continuar en medio de mi familia. El ritual de despedida es para mantener esa fuerza en la comunidad¡±, explica. La interrupci¨®n de estos rituales prolonga el luto e interfiere en la forma ind¨ªgena de protegerse de la enfermedad. ¡°Hacer rituales colectivos tambi¨¦n es proteger el cuerpo¡±, dice Jo?o Paulo Tukano. ¡±Es tomar protecci¨®n del muerto para la covid-19. La medicina, los profesionales del ¨¢rea, no logran entenderlo¡±.