Espa?a renuncia a nombrar embajador en Venezuela en plena crisis por la huida de Leopoldo L¨®pez

El Gobierno espa?ol ha decidido rebajar las relaciones diplom¨¢ticas entre Madrid y Venezuela y nombrar¨¢ a un encargado de Negocios en sustituci¨®n del embajador saliente, Jes¨²s Silva. Este cambio en los v¨ªnculos con Caracas se conoci¨® este jueves, d¨ªas despu¨¦s de la salida de Leopoldo L¨®pez del pa¨ªs sudamericano. No obstante, fuentes diplom¨¢ticas aseguran a EL PA?S que el nuevo r¨¦gimen de relaciones bilaterales ya estaba previsto desde hace semanas y lo desvinculan de la huida del dirigente opositor.

La decisi¨®n fue anunciada en la Comisi¨®n de Asuntos de Exteriores del Congreso de los Diputados por la secretaria de Estado de Exteriores, encargada de Iberoam¨¦rica, Cristina Gallach. Seg¨²n explic¨®, se trata de la misma v¨ªa adoptada por otros pa¨ªses europeos como Italia y Pa¨ªses Bajos, avanz¨® Europa Press. La Uni¨®n Europa y los Estados miembros cuestionaron la limpieza de las ¨²ltimas elecciones presidenciales de 2018 y, record¨® Gallach, no las consideran "justas ni transparentes¡±. Esos comicios, en los que rechaz¨® participar la mayor¨ªa de las fuerzas de la oposici¨®n por carecer de garant¨ªas, desencadenaron la crisis de legitimidad de la que se vali¨® Juan Guaid¨®, presidente de la Asamblea Nacional, para declararse a principios de 2019 como presidente interino frente al Gobierno de Nicol¨¢s Maduro. Alrededor de 60 pa¨ªses le reconocieron como jefe de Estado leg¨ªtimo. Sin embargo, tanto el margen de maniobra de Guaid¨® como ese reconocimiento solo tienen alcance simb¨®lico, ya que Maduro y el aparato chavista mantienen a todos los efectos el poder.

A finales de septiembre Espa?a anunci¨® el relevo de Silva, que dirige la Embajada en Caracas desde 2017, y el Gobierno asegur¨® que el cambio no iba a afectar la situaci¨®n de L¨®pez, quien llevaba un a?o y medio resguardado en la residencia del representante diplom¨¢tico. El pasado s¨¢bado el l¨ªder opositor abandon¨® el pa¨ªs y el domingo aterriz¨® en Madrid para reunirse con su familia. Esta semana ha sido recibido por presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, en la sede del PSOE y ha ofrecido su primera conferencia de prensa en casi siete a?os, en la que asegur¨® que pretende regresar ¡°para liberar a Venezuela¡±.

Este tipo de replanteamiento en las relaciones diplom¨¢ticas es relativamente frecuente en casos de inestabilidad pol¨ªtica. Ocurri¨®, por ejemplo, con Bolivia, que ha permanecido un a?o en un limbo con un Gabinete interino tras el derrocamiento de Evo Morales. Tambi¨¦n en ese caso, el Gobierno envi¨® a un encargado de Negocios, el mismo cargo que ocupar¨¢ el pr¨®ximo jefe de la delegaci¨®n diplom¨¢tica en Caracas. Desde hace semanas, lo previsto por Exteriores es que esa responsabilidad recaiga en el actual embajador en Cuba, Juan Fern¨¢ndez Trigo.

Aun as¨ª, el caso de Venezuela es m¨¢s complejo. El Gobierno de Maduro est¨¢ cada vez m¨¢s solo en el tablero internacional con la excepci¨®n de sus aliados habituales, China, Rusia, Ir¨¢n o Turqu¨ªa. El r¨¦gimen bolivariano est¨¢ duramente enfrentado a la mayor¨ªa de los pa¨ªses americanos, con Estados Unidos y la vecina Colombia a la cabeza, pero ha mantenido canales de di¨¢logo m¨¢s fluidos con Bruselas. La Uni¨®n Europea apoya una salida pactada a la grave crisis institucional y pol¨ªtica que azota al pa¨ªs y apuesta por la celebraci¨®n de elecciones. Hasta hace semanas, por ejemplo, abierta a negociar su participaci¨®n con una misi¨®n de observaci¨®n en las legislativas convocadas para el 6 de diciembre. Sin embargo, el considerar que no se dan las suficientes garant¨ªas, solicit¨® a Maduro aplazar la votaci¨®n. Este rechaz¨® de plano, lo que al menos por el momento cerr¨® el camino del acercamiento diplom¨¢tico con Bruselas.

En la en¨¦sima crisis bilateral de los ¨²ltimos a?os, Caracas volvi¨® a endurecer su postura con Espa?a tras la fuga de L¨®pez. Primero lo hizo la Canciller¨ªa a trav¨¦s de un comunicado y el mi¨¦rcoles fue Maduro quien se encarg¨® criticar al Gobierno de S¨¢nchez y arremeter contra el embajador espa?ol. El sucesor de Hugo Ch¨¢vez habl¨® de una supuesta negociaci¨®n previa a la salida del dirigente opositor, sin dar m¨¢s detalles ni ofrecer evidencias. Acus¨® a Madrid de complicidad, pero evit¨®, por ahora, adoptar medidas diplom¨¢ticas concretas. El Gobierno espa?ol niega la decisi¨®n de reducir las relaciones diplom¨¢ticas guarde relaci¨®n con L¨®pez o con un cambio de criterio con respecto al r¨¦gimen chavista, a pesar de que a principios de a?o S¨¢nchez no recibi¨® a Guaid¨® a su paso por Espa?a durante una gira internacional.