Cinco muertos en un atentado con coche bomba en la ciudad paquistan¨ª de Quetta
El ataque, que se han atribuido los talibanes de Pakist¨¢n, coincidi¨® con una visita del embajador chino en Islamabad
Al menos cinco personas resultaron muertas y una decena heridas al explotar un coche bomba en el aparcamiento del hotel Serena, el principal de Quetta (al oeste de Pakist¨¢n), en la noche del mi¨¦rcoles. Medios locales han relacionado el atentado, que este jueves se han atribuido los talibanes paquistan¨ªes, con la presencia en la ciudad del embajador chino, Nong Rong. Pero el diplom¨¢tico no se encontraba en el establecimiento en el momento ...
Al menos cinco personas resultaron muertas y una decena heridas al explotar un coche bomba en el aparcamiento del hotel Serena, el principal de Quetta (al oeste de Pakist¨¢n), en la noche del mi¨¦rcoles. Medios locales han relacionado el atentado, que este jueves se han atribuido los talibanes paquistan¨ªes, con la presencia en la ciudad del embajador chino, Nong Rong. Pero el diplom¨¢tico no se encontraba en el establecimiento en el momento de la explosi¨®n.
El estallido, casi al filo de la medianoche, provoc¨® un aparatoso incendio cuyas im¨¢genes enseguida circularon por las redes sociales. El ministro del Interior paquistan¨ª, Sheikh Rashid Ahmad, ha explicado en una conferencia de prensa que ¡°se trat¨® de un ataque suicida en el que se emplearon entre 60 y 80 kilos de explosivos¡±. ¡°Cinco personas resultaron muertas y 11 heridas, aunque s¨®lo dos de gravedad¡±, ha a?adido. Durante la madrugada ya hab¨ªa precisado que, aunque estaba registrado en el hotel, el embajador chino no hab¨ªa llegado cuando se produjo la deflagraci¨®n.
El Serena aloja a empresarios, diplom¨¢ticos y periodistas de visita en Quetta, la capital de la conflictiva provincia de Baluchist¨¢n. Tambi¨¦n es un lugar de reuni¨®n favorito de las autoridades locales. Por eso, desde la ola de atentados que sacudi¨® Pakist¨¢n a mediados de la primera d¨¦cada de este siglo, el hotel, como el resto de los grandes del pa¨ªs, instal¨® controles de acceso y otras medidas de protecci¨®n. Al menos dos de los muertos son guardas de seguridad.
Baluchist¨¢n, lim¨ªtrofe con Ir¨¢n y Afganist¨¢n, es la regi¨®n m¨¢s atrasada de Pakist¨¢n a pesar de sus recursos naturales, en especial dep¨®sitos de gas. En ese caldo de cultivo han aparecido desde mediados del pasado siglo diferentes grupos insurgentes, desde islamistas radicales hasta separatistas. Estos, adem¨¢s de reclamar la independencia, se oponen a los proyectos de infraestructuras chinas en la zona porque aseguran que no benefician a la poblaci¨®n local.
En esta ocasi¨®n, sin embargo, han sido los talibanes paquistan¨ªes quienes se han atribuido el atentado, en un mensaje a la agencia Reuters. ¡°Fue un ataque suicida en el que nuestro [militante] hizo estallar su coche lleno de explosivos en el hotel¡±, aseguraba el mensaje del portavoz de Tehrik-e-Taliban Pakistan. Este grupo y otras organizaciones de similar ideolog¨ªa han intensificado sus ataques contra las zonas tribales en la frontera con Afganist¨¢n durante los ¨²ltimos meses.
China, que tiene una gran presencia en Pakist¨¢n a trav¨¦s de su multimillonario Corredor Econ¨®mico, ha condenado el atentado. Su portavoz de Exteriores, Wang Wenbin, ha dicho que no ten¨ªa noticias de ninguna v¨ªctima entre los miembros de la delegaci¨®n de su pa¨ªs. Wang no ha mencionado, sin embargo, la posibilidad de que esta fuera el objetivo de los terroristas. Aunque no se ha confirmado ese extremo, intereses chinos han sido objeto de ataques con anterioridad.
En mayo de 2019, un atentado dirigido contra inversores chinos mat¨® a cuatro civiles en el hotel Pearl Continental de Gwadar. El nuevo puerto de esta ciudad paquistan¨ª forma parte de la Nueva Ruta de la Seda china y da a Pek¨ªn acceso al mar Ar¨¢bigo. Un a?o antes, un grupo de insurgentes baluches atac¨® el Consulado chino en Karachi y mat¨® a dos polic¨ªas y dos civiles. Los ciudadanos chinos que trabajan en las infraestructuras financiadas por el gigante asi¨¢tico tambi¨¦n han sufrido ataques y secuestros.