Israel se ofrece a rescatar la econom¨ªa de la Autoridad Palestina sin reanudar el proceso de paz
El ministro de Defensa israel¨ª visita en Ramala al presidente Abbas en el encuentro bilateral de m¨¢s alto nivel en una d¨¦cada
Econom¨ªa por paz, pero sin territorios. El nuevo Gobierno de Israel se ha ofrecido a rescatar las arruinadas finanzas palestinas con el prop¨®sito de afianzar en el poder al presidente de la Autoridad Palestina (AP), el nacionalista Mahmud Abbas frente a la emergencia del islamismo de Ham¨¢s. El ministro de Defensa israel¨ª, Benny Gantz, fue recibido en la noche del domingo por el veterano rais en Ramala, sede administrativa de la AP pr¨®xima a Jerusal¨¦n, en un encuentro bilateral de alto nivel sin precedentes desde 201...
Econom¨ªa por paz, pero sin territorios. El nuevo Gobierno de Israel se ha ofrecido a rescatar las arruinadas finanzas palestinas con el prop¨®sito de afianzar en el poder al presidente de la Autoridad Palestina (AP), el nacionalista Mahmud Abbas frente a la emergencia del islamismo de Ham¨¢s. El ministro de Defensa israel¨ª, Benny Gantz, fue recibido en la noche del domingo por el veterano rais en Ramala, sede administrativa de la AP pr¨®xima a Jerusal¨¦n, en un encuentro bilateral de alto nivel sin precedentes desde 2010. El anuncio del plan para fortalecer la econom¨ªa palestina presentado por Gantz se produce tras la reuni¨®n del viernes en Washington entre el presidente de EE UU, Joe Biden, y el primer ministro israel¨ª, Naftali Bennett, que puso fin a los desencuentros de su predecesor en el cargo, Benjam¨ªn Netanyahu, con las Administraciones dem¨®cratas.
El ultraconservador Bennett, al frente desde junio de un heterog¨¦neo Gobierno de siete partidos que van desde la derecha nacionalista a la izquierda pacifista, ya anticip¨® en la Casa Blanca que no se iban a dar ahora pasos en las negociaciones con los palestinos, suspendidas desde 2014. El mandatario estadounidense, favorable a que se produzcan gestos israel¨ªes hacia los palestinos, volvi¨® a defender la soluci¨®n de los dos Estados como una v¨ªa de salido al conflicto palestino-israel¨ª.
Fuentes pr¨®ximas al primer ministro israel¨ª se han apresurado a precisar este lunes que no se ha iniciado ¡°un proceso diplom¨¢tico con los palestinos ni lo va a haber¡±, y puntualizaron que el encuentro de Ramala gir¨® en torno a ¡°cuestiones rutinarias de seguridad entre el Departamento de Defensa y la Autoridad Palestina¡±.
En una coalici¨®n gubernamental diversa como la israel¨ª se mantienen posiciones tan enfrentadas como la anexi¨®n parcial de Cisjordania o el reconocimiento del Estado palestino. Cada partido trata de salvaguardar al tiempo su electorado. Mientras el ultranacionalista Bennett busca minimizar el impacto de la reuni¨®n con Abbas, el centrista Gantz pone de relieve el acercamiento a la Autoridad Palestina ¡°con medidas para reforzar la econom¨ªa¡±, seg¨²n un comunicado oficial, tras la ruptura de puentes registrada en los 12 a?os de mandatos consecutivos de Netanyahu. El ministro israel¨ª ha resaltado que, ¡°a medida que la Autoridad Palestina se fortalece, Ham¨¢s se debilita¡±. Mantuvo una reuni¨®n de 40 minutos con el rais palestino tras una sesi¨®n de trabajo con sus colaboradores de cerca de dos horas. Ambos acordaron proseguir los contactos.
Gantz anunci¨® que hab¨ªa ofrecido a la Autoridad Palestina un pr¨¦stamo de urgencia de 500 millones de sh¨¦queles (132 millones de euros) para reflotar las maltrechas arcas de la Autoridad Palestina, como anticipo de tributos que Israel recauda en su nombre. En el paquete de medidas se incluye la concesi¨®n de 16.000 permisos de trabajo en Israel (donde ya trabajan m¨¢s de 120.000 palestinos) y el otorgamiento de un millar de licencias de construcci¨®n de viviendas para palestinos en la denominada ?rea C de los Acuerdos de Oslo (1993), de gesti¨®n exclusiva israel¨ª, que comprende el 60% del territorio palestino ocupado de Cisjordania.
Entre las medidas de generaci¨®n de confianza figura la regularizaci¨®n de los documentos de residencia de miles de familiares de habitantes de Cisjordania, en su mayor¨ªa procedentes de la franja de Gaza. En esencia, se trata de volver a cumplir, al menos en parte, los acuerdos por los que naci¨® la Autoridad Palestina, en cap¨ªtulos que hab¨ªan sido relegados por los Gobiernos de Netanyahu, y que durante el mandato del republicano Donald Trump en EE UU cayeron en el olvido.
Refuerzo de la Autoridad Palestina
Tanto israel¨ªes como palestinos parecen inclinados a mantener un perfil bajo en el proceso de di¨¢logo econ¨®mico. Los primeros evitan abordar asuntos conflictivos que pueden tensionar la heter¨®clita coalici¨®n, que incluye una fuerza islamista de la minor¨ªa ¨¢rabe. El presidente Abbas, de 85 a?os e instalado en el poder desde 2005 sin haberse vuelto a someter a las urnas, se est¨¢ viendo cada vez m¨¢s cuestionado por los ciudadanos palestinos, que critican la corrupci¨®n y la ausencia de avances en la creaci¨®n de un Estado propio.
Los islamistas de Ham¨¢s, que gobiernan de hecho en la franja de Gaza desde 2007 ¨Ctras haber desalojado por la fuerza al Gobierno de Fatah, el partido de Abbas¨C, han acusado al presidente de haber dado un ¡°paso peligroso¡± y de ¡°estar m¨¢s preocupado en cooperar con la seguridad de Israel que en [defender] los intereses nacionales de Palestina¡±. Tras el conflicto armado que libraron en mayo el Ej¨¦rcito y las milicias de Gaza, la popularidad de Ham¨¢s, como fuerza capaz de enfrentarse a la ocupaci¨®n de Israel, se increment¨® entre los palestinos. En los 11 d¨ªas de escalada b¨¦lica perdieron la vida 250 personas en Gaza en ataques israel¨ªes y en Israel se contabilizaron 13 muertos por los disparos de cohetes desde el enclave costero.
El Gobierno de Abbas se ha enfrentado tambi¨¦n a una crisis interna ante la ola de manifestaciones desatada tras la muerte de un disidente pol¨ªtico tras haber sido detenido por las fuerzas de seguridad palestinas. El declive de la econom¨ªa del 11,5% en 2020 a consecuencia de la pandemia se ha visto agravado adem¨¢s por la dr¨¢stica ca¨ªda de la ayuda internacional. De ah¨ª que Israel se ofrezca a acudir ahora al rescate financiero.
¡°Todas est¨¢s medidas parecen ir encaminadas a preparar el relevo en el poder, el d¨ªa despu¨¦s del presidente Abbas, en Palestina¡±, argument¨® el exgeneral israel¨ª Eitan Dangot, que dirigi¨® los servicios de enlace militares con la Autoridad Palestina. ¡°Israel tiene un inter¨¦s estrat¨¦gico en mantener la coordinaci¨®n de seguridad con los palestinos y evitar el ascenso de Ham¨¢s al poder en Cisjordania¡±, puntualiz¨® Dangot, que en la actualidad ejerce como analista en el Instituto de Seguridad y Estrategia de Jerusal¨¦n, en una teleconferencia con periodistas extranjeros.
La violencia retorna a la frontera de Gaza
En paralelo, la tensi¨®n se ha disparado en Gaza en los ¨²ltimos d¨ªas a consecuencia de la reanudaci¨®n de las marchas de protesta palestinas en la frontera de la Franja, que han causado al menos dos muertos y decenas de heridos entre los manifestantes por disparos de los francotiradores israel¨ªes. Uno de estos agentes de seguridad ha perdido la vida este lunes despu¨¦s de haber recibido el pasado d¨ªa 20 un tiro de pistola que le caus¨® heridas muy graves en la cabeza.
En respuesta a estas marchas y al lanzamiento de globos incendiarios en direcci¨®n a campos de cultivo en Israel, la aviaci¨®n de combate ha bombardeado posiciones de Ham¨¢s en Gaza. La ¨²ltima incursi¨®n a¨¦rea se registr¨® en la madrugada del domingo. Varios centenares de gazat¨ªes volvieron a manifestarse en el norte de frontera en la noche del domingo. Israel hab¨ªa mantenido semiparalizada la reconstrucci¨®n de Gaza tras el ¨²ltimo conflicto, a pesar de que EE UU le hab¨ªa reclamado que facilitase la entrada de ayuda internacional, pero este lunes ha vuelto a autorizar el paso de materiales de construcci¨®n.
Para sellar una tregua estable y de larga duraci¨®n, el Gobierno israel¨ª exige a Ham¨¢s que se comprometa a no volver a disparar cohetes, a liberar a dos israel¨ªes que mantiene cautivos desde hace seis a?os y a devolver los restos de dos militares muertos en la guerra de 2014. Los islamistas pretenden a su vez intercambiarlos por la excarcelaci¨®n de cientos de presos palestinos en Israel.
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