Erika Mouynes: ¡°La frontera de Panam¨¢ y Colombia no est¨¢ dise?ada para el tr¨¢nsito, es una selva muy densa¡±

La di¨¢spora haitiana que recorre Am¨¦rica Latina desde hace una d¨¦cada se ha convertido en una crisis humanitaria regional. M¨¢s de 100.000 migrantes ya han atravesado en lo que va de este a?o la selva del Dari¨¦n, la inh¨®spita frontera entre Colombia y Panam¨¢, con rumbo a Norteam¨¦rica. Su principal destino es Estados Unidos, pero tambi¨¦n Canad¨¢ y ahora M¨¦xico. Desde el mes de julio, ese flujo se ha represado a menudo en el municipio colombiano de Necocl¨ª, convertido en un embudo al que llegan m¨¢s de mil migrantes diarios dispuestos a adentrarse por el istmo. ¡°No es un problema que va a poder resolver solo un pa¨ªs¡±, sostiene la ministra de Relaciones Exteriores de Panam¨¢, Erika Mouynes, que apela a la cooperaci¨®n para atender un fen¨®meno de alarmantes dimensiones.

Tanto Colombia como Panam¨¢ son pa¨ªses de tr¨¢nsito para los migrantes haitianos, que no llegan desde la naci¨®n caribe?a sino desde el sur del continente, principalmente de Brasil y de Chile, adonde muchos huyeron despu¨¦s del terremoto de 2010. En su traves¨ªa por el Dari¨¦n, considerada una de las rutas m¨¢s peligrosas del mundo, son acompa?ados en menor medida por cubanos, asi¨¢ticos y africanos. No todos lo logran. Al menos medio centenar de personas han perdido la vida intentando atravesar, muchos asesinados por grupos armados que los asaltan en la ruta, ahogados en las crecidas de los r¨ªos o por ca¨ªdas en las empinadas lomas de ese paraje selv¨¢tico.

¡°La ruta de esta migraci¨®n son 12 pa¨ªses, el ¨²nico que tiene varias estaciones para recepci¨®n de migraci¨®n es Panam¨¢, el ¨²nico que les da alimentaci¨®n¡±, afirma Mouynes en una entrevista por videollamada con EL PA?S desde su despacho en Ciudad de Panam¨¢. ¡°Las necesidades de infraestructura no se pueden resolver de manera inmediata, pero lo que s¨ª se puede, al menos, es controlar el flujo. Nadie puede manejar una migraci¨®n descontrolada. Mantener un enfoque humanitario, si no tienes alg¨²n nivel de control, es absolutamente impensable¡±, sostiene.

Pregunta. El Tap¨®n del Dari¨¦n se consideraba un paso tan peligroso que hasta hace no tanto los n¨²meros de migrantes que intentaban cruzarlo eran comparativamente menores, ?c¨®mo explica que cien mil personas hayan intentado atravesarlo en lo que va de este a?o?

Respuesta. No es que lo hayan intentado, ya cruzaron. Ha habido razones de peso estructurales en algunos pa¨ªses de Sudam¨¦rica en donde han cambiado ya sea requisitos de visa o permisos laborales, unido a un mensaje equivocado, mal intencionado, que les dice [a los migrantes] que tienen 18 meses para llegar a Estados Unidos. Entonces, la mezcla de estas decisiones de algunos pa¨ªses de Sudam¨¦rica sobre endurecer los permisos laborales, etc¨¦tera, ha provocado este movimiento masivo, m¨¢s all¨¢ de las fronteras que se abrieron a este flujo mucho mayor de lo antes visto. La verdad es que este fen¨®meno migratorio no es nuevo, tiene 12 a?os de estar pasado. Hemos tenido picos horribles en el a?o 2015, el 2016, con n¨²meros muy altos tambi¨¦n.

P. Estamos ante un desplazamiento in¨¦dito en la regi¨®n. ?Cu¨¢les son las cifras que maneja Panam¨¢?

R. Somos los que los atendemos y los contamos. No es que hayan intentado, por Panam¨¢ ya han cruzado 105.000 personas. El a?o pasado cruzaron 8.000. En el 2019, sin pandemia, que fue un a?o alto, fueron 20.000. Y no hemos acabado el a?o. Adem¨¢s hemos identificado much¨ªsimos m¨¢s migrantes todav¨ªa en Brasil, en Ecuador, en Chile que es posible que est¨¦n entusiasm¨¢ndose en generar este movimiento. La migraci¨®n que estamos viendo no es migraci¨®n nueva, muchos de los que han pasado por Panam¨¢ han estado en Sudam¨¦rica por diez a?os. Tienen muchos a?os, hijos que han nacido en Sudam¨¦rica.

No hemos visto todav¨ªa la nueva migraci¨®n. La mayor movilizaci¨®n, en particular de Hait¨ª, se dio cuando hubo el terremoto de 2010. El terremoto que acaba de pasar fue incluso m¨¢s complicado, entonces hay que asumir que va a haber una segunda migraci¨®n, que a¨²n no hemos visto. Esto se tiene que volver una prioridad para todos, y tenemos que encontrar una soluci¨®n entre todos. No es un problema que va a poder resolver solo un pa¨ªs. Ning¨²n pa¨ªs tiene la capacidad, ni el manejo ni la infraestructura para poderle dar soluci¨®n.

P. La Defensor¨ªa del Pueblo de Colombia confirm¨® esta semana un nuevo naufragio de migrantes, una lancha ilegal que sali¨® desde Necocl¨ª y pretend¨ªa llevarlos a San Blas, en Panam¨¢. El defensor del Pueblo asegura que se necesita un plan de choque que considere medidas adicionales como la creaci¨®n de un puente humanitario que facilite el tr¨¢nsito de ni?os, adolescentes, mujeres gestantes y madres lactantes sin que tengan que exponer su vida. ?Qu¨¦ hace falta para abrir un corredor humanitario?

R. Estamos recibiendo migrantes muy por encima de la cuota establecida, hab¨ªamos acordado 600 y pasan m¨¢s de mil al d¨ªa. En vez de los migrantes que est¨¢n pasando, Colombia podr¨ªa elegir a esas poblaciones vulnerables. La frontera de Panam¨¢ y Colombia no est¨¢ dise?ada para ning¨²n tipo de tr¨¢nsito ni de migraci¨®n, es una selva muy densa. Aqu¨ª nos llegan ni?os malnutridos que tenemos que atender, muchas veces no est¨¢n acompa?ados por adultos o familiares. En vez de tratar de buscar soluciones inmediatas, hay que entender que esto es un problema estructural, todos nos tenemos que preparar mejor. Al sur de Colombia hay una situaci¨®n importante que tambi¨¦n tiene que ser atendida. Esto va a seguir d¨¢ndose en la medida en que no atendamos la situaci¨®n de origen.

P. ?C¨®mo evitar ese represamiento del flujo de migrantes en la frontera entre Colombia y Panam¨¢?

R. No podemos definir cuales son las medidas que puede tomar Colombia. Pero en tama?o y en dimensi¨®n geogr¨¢fica somos much¨ªsimo m¨¢s peque?os, y hemos dedicado recursos del Estado para generar esta atenci¨®n y dar apoyo humanitario. Consideramos que eso lo tienen que hacer los 12 pa¨ªses, prepararse mejor para poder atender esta situaci¨®n y entender que no va a desaparecer de la noche a la ma?ana. Tenemos que buscar soluciones coordinadas y consensuadas, pues si sigue gener¨¢ndose esta ola, ya sea que se represen en Colombia, en Panam¨¢ o en Costa Rica, sigue siendo el mismo problema.

P. Es una selva impenetrable, ?tienen alguna idea de cuantos migrantes se pueden haber quedado en el camino?

R. No podemos saberlo, son 200 kil¨®metros de selva. Por eso hemos pedido la colaboraci¨®n y el intercambio de informaci¨®n.

P. El presidente Laurentino Cortizo apel¨® el mes pasado a la comunidad internacional en su discurso ante la Asamblea General de la ONU. ?Qu¨¦ pide Panam¨¢ concretamente?

R. Que sea una responsabilidad compartida, que este tema se vuelva prioritario para los 12 pa¨ªses. Volver a sentarnos en la mesa y dialogar para una repuesta consensuada. Todos tenemos que apoyar tambi¨¦n con recursos.

P. La mayor¨ªa son migrantes haitianos, y una buena parte viene de Brasil y Chile, ?qu¨¦ le piden a esos gobiernos?

R. En la reuni¨®n ministerial de agosto participaron todos los gobiernos involucrados, incluyendo los de Brasil y Chile. Creo que la hoja de ruta est¨¢ trazada sobre lo que cada uno tiene que hacer con respecto a visas, pol¨ªticas migratorias, etc¨¦tera. M¨¢s que decirle algo espec¨ªfico a alg¨²n gobierno, es sentarnos en la mesa y que cada uno establezca su responsabilidad.

P. ?Y cual ser¨ªa la de Estados Unidos como principal pa¨ªs de destino?

R. Canad¨¢ tambi¨¦n es pa¨ªs de destino, y M¨¦xico tambi¨¦n se est¨¢ volviendo en parte pa¨ªs de destino, hay que decir todo como lo hemos identificado. Todos tenemos que estar involucrados en esta mesa de di¨¢logo continuo. Nosotros llev¨¢bamos meses hablando de esta migraci¨®n que se iba a dar, que efectivamente al final lleg¨®. Pero realmente no han visto todav¨ªa los n¨²meros que van a llegar, no est¨¢n todav¨ªa en Estados Unidos, no est¨¢n todav¨ªa en M¨¦xico, est¨¢n avanzando porque es un tr¨¢nsito lento al ser a pie. Pero van a llegar.

P. ?Cu¨¢l puede ser el flujo de migrantes al final de este a?o?

R. Creo que vamos a superar los 150.000, que es un n¨²mero realmente preocupante. Antes, cuando entraban los meses lluviosos la migraci¨®n disminu¨ªa, pues en la selva se vuelve muy complicado, pero este a?o no hemos visto que esos n¨²meros disminuyan.

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