EE UU y la UE planean cortar el acceso de Rusia a la financiaci¨®n del FMI y el Banco Mundial

A¨²n quedaba otra vuelta en la tuerca de las sanciones impuestas por Estados Unidos y sus aliados europeos a Rusia tras la invasi¨®n en Ucrania. Los aliados, en una acci¨®n concertada, impulsan una medida de enorme alcance para el acceso de Rusia a cr¨¦ditos multilaterales: suspender los derechos de este pa¨ªs como miembro del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial y cortarle el acceso a la financiaci¨®n que proporcionan estas instituciones. ¡°Nos asegurarermos de que Rusia no puede obtener cr¨¦ditos u otros beneficios de estas organizaciones¡±, ha advertido la presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen. El objetivo ¨²ltimo es expulsar a Mosc¨² del orden econ¨®mico internacional, como han declarado reiteradamente los l¨ªderes occidentales.

Tanto EE UU como la Uni¨®n Europea (UE) y los pa¨ªses del G-7 llevan avisando: la munici¨®n en forma de sanciones econ¨®micas y financieras no se ha agotado, y mientras el presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, prosiga con la invasi¨®n de Ucrania quedan nuevas medidas para aplicar y continuar ahogando la econom¨ªa rusa.

Tres semanas despu¨¦s del comienzo de la guerra, el presidente Joe Biden ha anunciado este viernes la prohibici¨®n de importar marisco, vodka y diamantes rusos. Tambi¨¦n ha pedido al Congreso que Washington ponga fin al trato comercial preferente con Mosc¨², lo que a?adir¨ªa presi¨®n financiera sobre el agresor. De acuerdo con el mandatario, la medida se tomar¨¢ en coordinaci¨®n con el resto de los pa¨ªses del G-7 y con la Uni¨®n Europea.

Entre otras medidas, el G-7 ¨Cel club de las viejas potencias industriales¨C plantea negar a Rusia el estatuto de ¡°naci¨®n m¨¢s favorecida¡± en la Organizaci¨®n Mundial del Comercio (OMC), estatuto que permite a los miembros de esta instituci¨®n disfrutar de un trato comercial igualitario y no discriminatorio. Esta restricci¨®n abre el camino hacia la imposici¨®n de aranceles.

La iniciativa figuraba en un comunicado conjunto tanto del G-7 como de los l¨ªderes europeos reunidos en Versalles. ¡°Rusia no puede violar gravemente el derecho internacional y esperar beneficiarse de ser parte del orden econ¨®mico internacional¡±, justifica el texto. El G-7 tambi¨¦n se compromete a tomar medidas para evitar que los oligarcas rusos sorteen el peso de las sanciones acudiendo a las criptomonedas, adem¨¢s de ¡°limitar a¨²n m¨¢s la capacidad de Rusia para recaudar dinero¡± en los mercados y a combatir la ¡°propagaci¨®n de desinformaci¨®n¡± por parte del Kremlin.

Von der Leyen anunci¨® al t¨¦rmino de una cumbre de la UE en Versalles otras medidas, parecidas a las que Biden anunci¨® en EE UU. Entre ellas, un aumento de la presi¨®n sobre la ¨¦lite m¨¢s pr¨®xima a Putin. Y la prohibici¨®n de exportar productos de lujo europeos a Rusia, de importar bienes del sector del hierro y acero rusos, y de invertir en la exploraci¨®n y la producci¨®n energ¨¦tica rusa.

¡°La unidad entre los aliados es de vital importancia¡±, ha dicho Biden en una comparecencia en la Casa Blanca. ¡°Putin es un agresor. Es el agresor. Y tiene que pagar un precio¡±.

Biden advirti¨® m¨¢s tarde, durante un desplazamiento a Filadelfia, de que Estados Unidos y los aliados de la OTAN no luchar¨¢n contra Rusia en Ucrania. ¡°Est¨¢ garantizado, si respondemos, habr¨¢ una Tercera Guerra Mundial¡±, ha sentenciado en un comentario que supone una escalada en su dial¨¦ctica b¨¦lica, antes de reiterar que su compromiso es defender a los miembros de la Alianza Atl¨¢ntica. Por ese motivo, ha a?adido, ha desplegado ¡°12.000 soldados¡± en las fronteras de los pa¨ªses de la OTAN que se tocan con Ucrania. ¡°Seguiremos unidos a nuestros aliados en Europa y enviaremos un mensaje inequ¨ªvoco. Defenderemos cada cent¨ªmetro del territorio de la OTAN con todo el poder de la OTAN unida y motivada¡±, ha dicho.

Al t¨¦rmino de su comparecencia, el presidente ha aceptado una sola pregunta. Era sobre las sospechas de que Mosc¨² est¨¢ advirtiendo sobre la amenaza del uso de armas qu¨ªmicas por parte de Ucrania para contar precisamente con un pretexto para emplearlas en su ofensiva. ¡°Pagar¨¢ un precio elevado si usa armas qu¨ªmicas¡±, ha advertido Biden, en referencia a Rusia.

Canad¨¢, miembro del G-7, ya hab¨ªa retirado a Mosc¨² la condici¨®n de socio comercial preferente (tambi¨¦n lo hab¨ªa hecho Ucrania). La medida ser¨¢ sin duda m¨¢s onerosa para la UE que para Estados Unidos. Rusia no es una de las principales contrapartes comerciales de Washington. En 2019, la potencia euroasi¨¢tica ocup¨® el puesto 26 entre los pa¨ªses por n¨²mero de intercambios con Estados Unidos, seg¨²n datos de la Oficina de la Representante de Comercio. Un 60% de esas transacciones son de petr¨®leo y gas, y ya han sido cortadas de ra¨ªz desde principios de esta semana.

Esta medida se suma a las sanciones anteriores, que van desde el bloqueo del acceso a los mercados internacionales de grandes empresas y bancos hasta las limitaciones a las importaciones tecnol¨®gicas y la suspensi¨®n de la compra de energ¨ªa. Con ella, queda desactivado el mecanismo de naci¨®n m¨¢s favorecida, uno de los principios que rigen el comercio internacional, fijados por los acuerdos de la Organizaci¨®n Mundial del Comercio (OMC). Seg¨²n este principio, si un pa¨ªs decide dar un trato de favor a otro, autom¨¢ticamente esa ventaja se aplica al resto de pa¨ªses miembros.

Ahora le toca al Congreso de Estados Unidos aprobar la medida impulsada por Canad¨¢. Aunque no se esperan sorpresas: miembros de ambos partidos en la C¨¢mara respaldaron la semana pasada un proyecto de ley para retirar a Rusia y Bielorrusia de ese estatus comercial preferente. Aquel proyecto de ley iba a¨²n m¨¢s lejos, al plantear un plan para que Estados Unidos proponga excluir a Rusia de la OMC, una decisi¨®n dr¨¢stica de la que no se conocen precedentes. El organismo multilateral, que suma 164 miembros, no contempla esa opci¨®n, por lo que ser¨ªa necesario reescribir los acuerdos que lo rigen.

La decisi¨®n podr¨ªa acarrear otras consecuencias, como denegar a las compa?¨ªas rusas el acceso a sus mercados de servicios o poner fin a la protecci¨®n rec¨ªproca de los derechos de propiedad intelectual.

Es la cuarta vez que Biden se dirige a la naci¨®n para hablar de la guerra en Ucrania. No estaba en su estilo comportarse como un presidente tan expuesto. En ese cambio de actitud se intuye el deseo de mostrar liderazgo en el frente occidental contra Putin, y tambi¨¦n el convencimiento de que le conviene explicar directamente a sus ciudadanos unas medidas que impactar¨¢n con fuerza en sus bolsillos, en un momento en el que la inflaci¨®n registra m¨¢ximos nunca vistos en cuatro d¨¦cadas y el precio de la gasolina, producto de primera necesidad en el pa¨ªs del autom¨®vil, est¨¢ por las nubes.

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