Una banda secuestra durante horas un hospital de Ecuador

Las bandas criminales ya no dejan un rinc¨®n de Ecuador donde no tengan presencia, esta vez siete hombres con ametralladoras, fusiles y rev¨®lveres se tomaron por casi tres horas el hospital de Chone, una ciudad de la provincia de Manab¨ª, en la costa ecuatoriana, la noche del domingo. ¡°?No disparen que yo tengo una hija!¡±, gritaba a los polic¨ªas una enfermera que fue capturada como reh¨¦n y era usada como escudo por uno de los delincuentes que ped¨ªa a los uniformados que abrieran la puerta externa del hospital para huir.

Dentro, cientos de personas entre pacientes y personal m¨¦dico gritaban y lloraban mientras se escuchaban las detonaciones de disparos en el segundo piso donde est¨¢ la sala de cuidados intensivos. Los delincuentes buscaban a ?ngel Le¨®nidas M, un adolescente de 16 a?os, conocido con el alias de Cara sucia. La Polic¨ªa segu¨ªa el rastro del joven desde hace tres a?os por consumo de drogas, microtr¨¢fico y sicariato.

Cara sucia es un temido sicario en la provincia de Manab¨ª, a quien las autoridades investigan su participaci¨®n en el intento de asesinato a un polic¨ªa en un operativo hace tres meses, dijo el comandante Fausto Salinas. No pudo ser detenido en ese entonces y no se sab¨ªa de ¨¦l hasta el s¨¢bado, cuando intentaron asesinarlo y lo llevaron al hospital de Chone, en delicado estado de salud, por las perforaciones de seis balas que atravesaron su cuerpo y que lo dejaron inv¨¢lido.

Seg¨²n Salinas, detr¨¢s del intento de asesinato del joven sicario est¨¢ la banda delictiva de Los Choneros, que se dedica al sicariato, extorsi¨®n y tr¨¢fico de droga. Este grupo criminal es el m¨¢s prominente en Ecuador, que ha obtenido un importante espacio debido a sus nexos con el cartel mexicano de Sinaloa, al que apoya en sus operaciones log¨ªsticas para el env¨ªo de coca¨ªna a Centroam¨¦rica, Estados Unidos y Europa.

A Cara sucia le atribuyen el asesinato del t¨ªo de uno de los miembros de Los Choneros, Adolfo Ch¨¢vez, quien guarda prisi¨®n en la c¨¢rcel regional de Guayaquil, desde donde sali¨® la orden de matar al adolescente, que pertenece a la banda contraria denominada Los Cornejos.

Los siete delincuentes terminaron por rendirse, soltaron a los cinco rehenes y a los pacientes que temerosos hu¨ªan como pod¨ªan, en sillas de ruedas o cargados por sus familiares o param¨¦dicos hasta alejarse del hospital. Este lunes los sujetos fueron procesados por la justicia por el delito de terrorismo y un juez orden¨® su detenci¨®n en la c¨¢rcel El Rodeo de Manab¨ª, donde la mayor¨ªa de los presos son de la banda Los Choneros.

Un contingente militar da seguridad en los exteriores del hospital, y a por lo menos 10 personas se les ha dado el alta m¨¦dica, mientras que otros pacientes fueron transferidos a otros centros. Este es el cuarto atentado a una casa de salud que se registra en el pa¨ªs sudamericano en el ¨²ltimo a?o.

El pasado 1 de noviembre unos sujetos dispararon contra el centro de salud del barrio Basti¨®n Popular en Guayaquil y asesinaron a un hombre que esperaba a una paciente. Desde entonces el centro fue blindado con pedazos de madera por miedo a un nuevo ataque terrorista. El pasado junio, 18 personas armadas de una banda delictiva entraron en un hospital privado para custodiar el ingreso de uno de sus miembros que hab¨ªa recibido varios disparos en un intento de asesinato.

En mayo de 2021, Carla Rocchetti, de 40 a?os, estaba en la habitaci¨®n 1120, en el segundo piso de una cl¨ªnica privada de Guayaquil, hab¨ªa ingresado por un dolor en el abdomen y estaba en observaci¨®n. Unas horas antes, la habitaci¨®n hab¨ªa sido ocupada por un hombre que sobrevivi¨® a un atentado de sicariato. Mientras Carla esperaba el alta m¨¦dica, cinco sicarios, dos de ellos vestidos con uniformes de la Polic¨ªa, entraron por emergencia a la cl¨ªnica, fueron a la habitaci¨®n 1120 y asesinaron a la mujer.

El Ministerio de Salud P¨²blica de Ecuador, rechaz¨® este lunes ¡°los actos de violencia en los establecimientos de salud¡± y asegur¨® que reforzar¨¢n los mecanismos de seguridad, aunque no especific¨® cu¨¢les ser¨ªan las medidas que tomar¨¢n.

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