?Vive de verdad Italia una emergencia migratoria? El aumento de llegadas y la falta de recursos tensan la situaci¨®n

Italia ha sido la principal puerta de los migrantes que alcanzaron Europa de forma irregular en el ¨²ltimo trimestre. M¨¢s de la mitad de las entradas a las fronteras comunitarias (27.651 en los tres primeros meses de 2023), seg¨²n Frontex, la agencia europea de fronteras, se han producido por mar a trav¨¦s de la ruta del Mediterr¨¢neo central. ...

Italia ha sido la principal puerta de los migrantes que alcanzaron Europa de forma irregular en el ¨²ltimo trimestre. M¨¢s de la mitad de las entradas a las fronteras comunitarias (27.651 en los tres primeros meses de 2023), seg¨²n Frontex, la agencia europea de fronteras, se han producido por mar a trav¨¦s de la ruta del Mediterr¨¢neo central. El fen¨®meno, aunque antes se daba en menor medida, no es nuevo. Ha constituido desde hace una d¨¦cada el principal caballo de batalla electoral en Italia, especialmente de la derecha. Por eso, y ante el aumento en los ¨²ltimos tres meses (las cifras se han cuadruplicado respecto al a?o anterior), el Gobierno italiano que preside la ultraderechista Giorgia Meloni decret¨® el martes por la tarde el estado de emergencia para afrontar la situaci¨®n. Una medida inusual ¨Dsolo se hab¨ªa aplicado con estos fines en 2011, durante el ¨²ltimo mandato de Silvio Berlusconi¨D que responde a distintas cuestiones: el gran aumento de desembarcos, la falta de capacidad de un sistema de acogida desmantelado y un claro aviso a la Uni¨®n Europea sobre la necesidad de abordar conjuntamente este desaf¨ªo.

El alcance de la declaraci¨®n no est¨¢ claro todav¨ªa. Se sabe que est¨¢ motivada por el colapso de centros de acogida como el de Lampedusa, que se nombrar¨¢ a un comisario y que se dotar¨¢ al decreto de una partida inicial de cinco millones de euros que podr¨ªa llegar hasta los 300. Pero vista la situaci¨®n, nadie se atreve todav¨ªa a establecer una cr¨ªtica concreta a la medida. S¨ª se puede, en cambio, mostrar una fotograf¨ªa del momento. Si se toma como referencia lo que va de a?o hasta el 11 de abril, las llegadas por mar (31.292) se han casi cuadruplicado respecto a 2022 (7.928) y 2021 (8.505). Pero, adem¨¢s, el mes de marzo ha arrojado un ins¨®lito pico (13.216) que hace temer una cifra r¨¦cord a final de a?o que podr¨ªa superar el tope de los 181.000 de 2016. Unos datos que van ligados tambi¨¦n a la mortalidad de esta ruta mediterr¨¢nea, que ha alcanzado otro r¨¦cord hist¨®rico en el ¨²ltimo trimestre con 441 personas fallecidas en el mar. ?Justifica eso el estado de excepci¨®n?

Matteo Villa, investigador principal del ISPI (Istituto per gli Studi di Politica Internazionale) y codirector de su laboratorio de datos, cree que la situaci¨®n presenta ¡°algunos elementos de excepcionalidad¡±. ¡°No juzgo si tiene o no sentido activar la declaraci¨®n de estado de emergencia. Es una decisi¨®n pol¨ªtica. Pero algo irrefutable es que el nivel de desembarcos de los tres primeros meses del a?o es el m¨¢s alto de la historia. Incluso en 2017, que fue un r¨¦cord absoluto en ese mismo espacio de tiempo. Si la tendencia contin¨²a como en estos tres meses, se puede llegar hasta 180.000 desembarcos, pero nuestro modelo apunta a unos 130.000¡å, afirma.

Hay otro asunto crucial. Ahora mismo hay ocupadas unas 120.000 plazas del sistema de acogida (funciona con un modelo en acorde¨®n: se activan en funci¨®n de la necesidad). Y si se alcanzan m¨¢s de 150.000 personas, ser¨ªa dif¨ªcil organizar m¨¢s, seg¨²n todos los expertos. El principal problema, pues, es ahora la gesti¨®n de las llegadas a trav¨¦s de la estructura nacional de acogida. Un sistema que lleg¨® a una capacidad m¨¢xima de 190.674 personas en octubre de 2017, pero que fue desmantelado durante la ¨¦poca en que Matteo Salvini fue ministro del Interior (de 2018 a 2019). El tipo de centro cambi¨® y los concursos redujeron las cuant¨ªas de sus partidas. De modo que muchas de estas licitaciones quedan desiertas. ?Resolver¨ªa eso el estado de emergencia? En parte, se supone que se agilizar¨¢n esos procesos de adjudicaci¨®n y se destinar¨¢n mayores partidas econ¨®micas que coordinar¨¢ un comisario. Pero la medida despierta sospechas.

Salvini redujo en 2018 la protecci¨®n humanitaria y pas¨® a llamarla protecci¨®n especial. La consecuencia es que del 40% de migrantes que la recib¨ªan, se pas¨® a cerca del 20%. Luego el porcentaje de protecci¨®n volvi¨® a aumentar algo con su sucesora, Luciana Lamorgese. ¡°Pero si nos hubi¨¦ramos quedado en el ¨ªndice [tan bajo] de Salvini, hoy habr¨ªa como m¨ªnimo 32.000 extranjeros irregulares m¨¢s [se calcula que en Italia hay en total unos 500.000]. Es un error responder a la emergencia con medidas que aumenten la irregularidad. Solo crece el problema, porque condenas a mucha gente a trabajar en negro o a la delincuencia¡±, se?ala Villa.

Las ONG que trabajan en Italia, fuertemente perseguidas por el Gobierno de Giorgia Meloni en su labor de rescate mar¨ªtimo, coinciden en que la situaci¨®n puede ser cr¨ªtica a medio plazo. Marco Bertotto, director de programas de M¨¦dicos Sin Fronteras en Italia, lo atribuye tambi¨¦n al ¡°debilitamiento del sistema de acogida¡±. ¡°Desde 2018 se dej¨® de invertir y se continu¨® con la l¨®gica de emergencia, que no ayuda cuando te encuentras con n¨²meros como estos. Es obvio que el pa¨ªs va hacia una crisis. Y si estamos ya as¨ª en abril, con la situaci¨®n de T¨²nez, la nueva ruta de Turqu¨ªa que llega hasta Calabria, la situaci¨®n de Libia y la gesti¨®n entorpecida de la actividad del rescate en el mar, es obvio que nos encaminamos a una tormenta perfecta¡±.

Nadie quiere llamarlo emergencia. Pero las definiciones son parecidas. ¡°Es una situaci¨®n dif¨ªcil que no deber¨ªa ser gestionada con la declaraci¨®n de emergencia. Pero es preocupante porque los n¨²meros son muy altos y tenemos un sistema que no est¨¢ preparado para gestionarlos¡±, insiste Bertotto. Y ese es el principal temor ahora del Gobierno italiano, que incluso ha acusado recientemente al grupo de mercenarios rusos Wagner de alimentar las salidas de Libia como parte de una estrategia de guerra h¨ªbrida contra las posiciones proucranias de Roma.

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