Netanyahu se dirige al Congreso de EE UU para reclamar su apoyo incondicional a la guerra de Gaza

Benjam¨ªn Netanyahu, primer ministro israel¨ª, ha reclamado este mi¨¦rcoles al Congreso de EE UU, reunido en sesi¨®n conjunta, su apoyo incondicional a la guerra de Gaza, incluidas m¨¢s armas, y advertido de la amenaza que representa Ir¨¢n para la seguridad de Israel, de la regi¨®n y del mundo. Era la primera vez que el jefe de Gobierno israel¨ª se dirig¨ªa al Congreso desde el 7 de octubre, pero su alocuci¨®n estuvo marcada por la ausencia de decenas de legisladores dem¨®cratas que desaprueban el alto coste en vidas de su guerra total en Gaza, as¨ª como por las protestas en los alrededores del Capitolio, con alrededor de 5.000 manifestantes propalestinos. Protestas que, asegur¨® el jefe del Gobierno israel¨ª, son ¡°financiadas y promovidas¡± por Ir¨¢n; manifestantes a los que desde?¨® como ¡°tontos ¨²tiles de Ir¨¢n¡±.

¡°EE UU e Israel deben estar unidos, porque cuando estamos unidos, nosotros ganamos y ellos pierden. Y les aseguro una cosa: ganaremos¡±, dijo enf¨¢ticamente entre aplausos sobre lo que calific¨® de ¡°lucha entre la barbarie y la civilizaci¨®n¡±. ¡°Esto no es un conflicto de civilizaciones, es una lucha entre la barbarie [de Ham¨¢s] y la civilizaci¨®n¡±, subray¨®, comparando el ataque de Ham¨¢s y otros grupos armados palestinos el 7 de octubre con ¡°veinte 11-S en un solo d¨ªa¡±, dados el tama?o y la poblaci¨®n de Israel.

Netanyahu arranc¨® su discurso con un tono emocional, con un relato de lo sucedido aquel d¨ªa, el festival de m¨²sica interrumpido por la irrupci¨®n de los palestinos armados y el secuestro de cientos de israel¨ªes. Inmediatamente reclam¨® la liberaci¨®n de los rehenes, en un mensaje en clara clave interna para acallar las cr¨ªticas de los familiares de los que a¨²n permanecen retenidos, algunos de ellos presentes en la tribuna de invitados. ¡°No descansar¨¦ hasta llevar a todos los rehenes de vuelta a sus casas, a todos¡±, subray¨®. ¡°Mientras hablo, seguimos comprometidos en asegurar su liberaci¨®n. Quiero agradecer al presidente Biden sus esfuerzos para lograrlo. ?l vino a Israel para estar con nosotros en las horas m¨¢s oscuras, no lo olvidaremos jam¨¢s¡±, dijo, en referencia a la visita del dem¨®crata en los primeros d¨ªas de la guerra. Netanyahu defini¨® al dem¨®crata, al que cit¨® con frecuencia, como ¡°un orgulloso sionista irland¨¦s-estadounidense¡±, pese a que recientemente le hab¨ªa criticado con dureza por bloquear el env¨ªo de 3.500 bombas pesadas. ¡°Dennos las herramientas m¨¢s r¨¢pido y terminaremos el trabajo m¨¢s r¨¢pido¡±, inst¨®, para corroborar su determinaci¨®n de acabar con Ham¨¢s.

Aunque medios como el portal Axios hab¨ªan informado de que Netanyahu presentar¨ªa un plan para el d¨ªa despu¨¦s de la guerra en Gaza, se limit¨® a esbozar pinceladas de lo que llam¨® su ¡°visi¨®n¡± para el futuro del enclave, que seg¨²n dijo no tiene planes de ocupar (¨²nicamente plante¨® el establecimiento de una zona desmilitarizada, bajo control civil palestino pero rodeada por un cerco israel¨ª). Lo hizo brevemente, despu¨¦s de dirigir toda su artiller¨ªa ret¨®rica contra Ir¨¢n. ¡°Ir¨¢n est¨¢ financiando y promoviendo protestas contra Israel aqu¨ª, en EE UU... Tambi¨¦n las protestas que se est¨¢n desarrollando a las puertas de este edificio (...) Estas protestas al grito de ¡®From the river to the sea¡¯ [del r¨ªo Jord¨¢n al Mediterr¨¢neo, una supuesta alusi¨®n a la expulsi¨®n de los jud¨ªos de Palestina], en las que muchos no tienen ni idea de qu¨¦ est¨¢n hablando, ni de Geograf¨ªa ni de Historia¡±, denunci¨® enfadado. Tambi¨¦n abord¨®, ridiculiz¨¢ndola, la movilizaci¨®n de los campus esta primavera para alertar del auge del antisemitismo, que tild¨® de mal absoluto. ¡°Depende del contexto, dijo la rectora de Harvard [al ser preguntada sobre si los mensajes antisemitas en los campus eran punibles] ?Contexto? ?Qu¨¦ contexto?¡±, bram¨®.

¡°Ir¨¢n est¨¢ virtualmente detr¨¢s de todo el terrorismo en el mundo. Cuando Israel combate a Ham¨¢s, est¨¢ combatiendo a Ir¨¢n; cuando combate a Hezbol¨¢ [en L¨ªbano], combate a Ir¨¢n (...) No nos estamos protegiendo s¨®lo a nosotros, les estamos protegiendo a ustedes. Nuestros enemigos son vuestros enemigos y nuestra victoria ser¨¢ la vuestra. Israel har¨¢ todo lo que est¨¦ en su mano para restaurar la seguridad y devolver a todos [los rehenes] a su casa¡±.

Su discurso fue escasamente propositivo ¡ªaparte de las pinceladas sobre la Gaza que pretende, una Gaza ¡°desradicalizada¡±¡ª y sobre todo, defensivo, para defender su liderazgo: rechaz¨® las cr¨ªticas a Israel por no permitir el paso de ayuda humanitaria a la Franja, asegurando lo contrario, que ha franqueado el acceso de toneladas de comida y material, por lo que achac¨® la crisis humanitaria a las autoridades de Ham¨¢s, en el poder en Gaza, por razones de supervivencia pol¨ªtica. ¡°Cada muerte civil [palestina] es una tragedia, pero para Ham¨¢s, es estrategia¡±, asegur¨®. Por ello, reiter¨® su agradecimiento a EE UU ¡°por apoyar a Israel, que es apoyar la verdad¡±.

Divisi¨®n en las filas dem¨®cratas

En segundo plano de su visita a EE UU, opacada por el se¨ªsmo pol¨ªtico de la sucesi¨®n dem¨®crata, Netanyahu se reunir¨¢ el jueves con el presidente Joe Biden y, por separado, con la vicepresidenta y aspirante a la candidatura presidencial, Kamala Harris, que no ha asistido a la sesi¨®n por encontrarse en un mitin en Indian¨¢polis. Su ausencia, calificada de deslealtad a un aliado por algunos republicanos, no implica cambio alguno en su postura sobre Israel, seg¨²n su campa?a.

Adem¨¢s de Harris, al menos medio centenar de legisladores dem¨®cratas, representantes no s¨®lo de la facci¨®n progresista, sino tambi¨¦n moderados o centristas, han declinado asistir a la solemne sesi¨®n, entre ellos pesos pesados como Nancy Pelosi, presidenta em¨¦rita de la C¨¢mara, que posteriormente calific¨® el discurso como ¡°la peor intervenci¨®n de un dignatario extranjero invitado al Congreso¡±. El senador Bernie Sanders hab¨ªa subrayado que la invitaci¨®n a Netanyahu, cursada personalmente por el presidente de la C¨¢mara, el republicano Mike Johnson, en el apogeo de las protestas estudiantiles por la guerra, era ¡°una verg¨¹enza¡± y calificado al israel¨ª de ¡°criminal de guerra¡±, la definici¨®n usada por su correligionaria Alexandria Ocasio-Cortez. La ¨²nica dem¨®crata cr¨ªtica con Israel que asisti¨® fue la diputada Rashida Tlaib, de origen palestino, ense?ando a Netanyahu desde su asiento un cartel que dec¨ªa, tambi¨¦n, ¡°criminal de guerra¡±. La tensi¨®n en el interior de la C¨¢mara era tal que Johnson amenaz¨® con hacer arrestar a todo aquel que provocara disturbios en el hemiciclo o en la tribuna de invitados. Las ausencias confirman la honda divisi¨®n que el conflicto de Gaza ha provocado en las filas dem¨®cratas.

Mientras en la Franja el balance de muertos se eleva a casi 40.000 y el de heridos a 90.000, seg¨²n fuentes oficiales gazat¨ªes, la visita de Netanyahu no s¨®lo se produce en medio de una crisis imprevista, tras el intento de atentado contra Donald Trump, con quien el jefe de Gobierno israel¨ª se ver¨¢ el viernes, y la retirada de Biden; tambi¨¦n ante la frustraci¨®n de la Administraci¨®n dem¨®crata por su resistencia a un alto el fuego y el alto coste en v¨ªctimas civiles de la guerra. Adem¨¢s del discurso, tambi¨¦n estaban en juego, en reuniones con funcionarios de la Administraci¨®n de Biden, las esperanzas de progreso del acuerdo, mediado desde hace meses por EE UU, que ponga fin a la guerra. El consenso alcanzado el martes en Pek¨ªn por una quincena de grupos palestinos enfrentados, entre ellos Ham¨¢s y la Autoridad Palestina, a?ade presi¨®n a Netanyahu, a quien familiares de los rehenes acusan de supeditar la necesidad de un alto el fuego a su intenci¨®n de mantenerse en el poder.

El discurso de Netanyahu al Congreso deber¨ªa haber tenido un fuerte efecto simb¨®lico, de proyecci¨®n de poder. Cada vez m¨¢s criticado en su pa¨ªs, le daba la oportunidad de mostrarse como un estadista global ante los representantes del aliado m¨¢s estrecho de Israel: ese era su prop¨®sito cuando recibi¨® la invitaci¨®n. Su alocuci¨®n podr¨ªa haber supuesto un conveniente espaldarazo a su imagen para acallar las cr¨ªticas por su gesti¨®n de la guerra tanto en casa como en EE UU. Ning¨²n conflicto internacional ha sacudido tanto EE UU como el de Gaza, como demuestra la honda fractura en la base del Partido Dem¨®crata y la frustraci¨®n creciente del presidente Biden, crispado personalmente con Netanyahu por el fracaso de sus intentos de propiciar un alto el fuego. A ¨²ltima hora, adem¨¢s, las turbulencias en la campa?a electoral estadounidense han contribuido a oscurecer m¨¢s si cabe el prop¨®sito de lucimiento de Netanyahu desde la tribuna del Congreso.

El Capitolio, sede del Congreso, ha amanecido este mi¨¦rcoles pr¨¢cticamente tomado al asalto por un impresionante despliegue de fuerzas de seguridad en previsi¨®n de incidentes entre algunas de las opuestas protestas a favor y en contra de la visita: grupos que ped¨ªan el regreso de los rehenes en poder de Ham¨¢s; carteles que exig¨ªan a Netanyahu que cerrase el elusivo acuerdo de alto el fuego y alrededor de 5.000 manifestantes propalestinos, con kufiyas, los pa?uelos palestinos, que le acusaban de genocidio y cr¨ªmenes de guerra. Todos los accesos a la colina del Capitolio estaban cortados al tr¨¢fico, con altas barreras de acero. Tras una sentada en uno de los edificios de oficinas de la C¨¢mara bajo el eslogan ¡°No en nuestro nombre¡±, m¨¢s de 200 manifestantes convocados por el grupo progresista Jewish Voice for Peace (Voz de los Jud¨ªos por la Paz) fueron arrestados, seg¨²n inform¨® la polic¨ªa del Capitolio. Johnson hab¨ªa advertido de una ¡°pol¨ªtica de tolerancia cero¡± ante cualquier signo de disturbios.

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