Barnier dise?a un Gobierno conservador con gui?os a Le Pen en inmigraci¨®n
La lista de ministros, aprobada por Macron, se anunciar¨¢ ¡°antes del domingo¡± y conformar¨¢ un Ejecutivo inclinado a la derecha y con una mayor¨ªa de fieles al presidente de la Rep¨²blica
Francia tendr¨¢ un nuevo Gobierno antes del pr¨®ximo domingo, ha prometido el El¨ªseo despu¨¦s de que el presidente de la Rep¨²blica, Emmanuel Macron, aprobase los nombres que su primer ministro, Michel Barnier, le present¨® el jueves por la noche. La constituci¨®n del nuevo Ejecutivo llegar¨¢ dos meses y medio despu¨¦s de las elecciones del pasado 7 de julio, tras un bloqueo in¨¦dito y un espect¨¢culo con aires de fin de ciclo que ha...
Francia tendr¨¢ un nuevo Gobierno antes del pr¨®ximo domingo, ha prometido el El¨ªseo despu¨¦s de que el presidente de la Rep¨²blica, Emmanuel Macron, aprobase los nombres que su primer ministro, Michel Barnier, le present¨® el jueves por la noche. La constituci¨®n del nuevo Ejecutivo llegar¨¢ dos meses y medio despu¨¦s de las elecciones del pasado 7 de julio, tras un bloqueo in¨¦dito y un espect¨¢culo con aires de fin de ciclo que ha encendido todas las alarmas. Incluso en el ¨²ltimo momento, las fricciones entre Macron y Barnier han amenazado con mandarlo todo de nuevo al garete. El nuevo Gobierno, con una identidad escorada al centroderecha, pese a que el vencedor de las elecciones fue el bloque de izquierda, deja pocas dudas sobre sus intenciones. La ¨²nica pregunta por resolver, la m¨¢s importante, es cu¨¢nto durar¨¢.
El Gobierno de Barnier, en una nueva p¨¢gina por estrenar en la V Rep¨²blica, nace tocado de muerte. Su supervivencia depende inexorablemente del Nuevo Frente Popular (NFP), el bloque de izquierdas que gan¨® las elecciones y que ya ha adelantado que lo tumbar¨¢ en una moci¨®n de censura, y del Reagrupamiento Nacional (RN) de Marine Le Pen. Los ultraderechistas, malheridos en los ¨²ltimos comicios, han recuperado el pulso gracias a la fragmentaci¨®n del llamado frente republicano ¡ªla alianza entre la izquierda y los partidos de centro¡ª y se han erigido en ¨¢rbitros de la contienda. Este Ejecutivo durar¨¢ lo que quiera el RN, el partido que casi todas las formaciones trataron de bloquear en las ¨²ltimas elecciones. Le Pen har¨¢ valer en el momento que considere sus 126 diputados y 11 millones de votos.
El Ejecutivo de Barnier nace tambi¨¦n tras un parto complicado. En un primer momento el primer ministro trat¨® de imponer un n¨²mero elevado de ministros de su partido, Los Republicanos, en carteras de peso. El mi¨¦rcoles por la noche, en una reuni¨®n en el El¨ªseo, Macron rechaz¨® su propuesta y abri¨® un nuevo pulso que se resolvi¨® el jueves por la v¨ªa r¨¢pida. Esta vez, el jefe del Estado qued¨® conforme con una lista donde Los Republicanos de Barnier, que ni siquiera formaban parte del frente republicano que logr¨® frenar al Reagrupamiento Nacional a costa de grandes renuncias colectivas en determinadas circunscripciones, ser¨¢n la segunda fuerza. ¡°Este Gobierno es la alianza de los perdedores¡±, lo defini¨® la ecologista Sandrine Rousseau.
El equilibrio que pretend¨ªa Macron, obviamente, favorece a su partido: Ensemble. El nuevo Gobierno estar¨¢ compuesto por 38 ministros con una divisi¨®n paritaria entre g¨¦neros. El reparto entre formaciones tambi¨¦n estar¨ªa ya configurado. Solo 16 de esos ministros ser¨ªan de pleno ejercicio. Siete carteras ser¨ªan para la fuerza de apoyo mayoritaria, es decir, el partido de Macron. Los Republicanos (LR), la derecha cl¨¢sica francesa de la que procede el propio Barnier, tendr¨ªa tres carteras: y MoDem, un partido de centroderecha fundado por el exministro Fran?ois Bayrou, tendr¨ªa otras dos. A la lista se a?adir¨ªa un ministro del partido Horizons, del ex primer ministro ?douard Philippe; otro del partido centrista UDI y otros dos puestos a repartir entre un ministro procedente de la ¨®rbita de la derecha y otro de la izquierda.
Barnier prometi¨® dureza en materia de seguridad y de inmigraci¨®n. Y la mostrar¨¢ ahora, seg¨²n se ha filtrado a los medios franceses, con el nombramiento al frente del Ministerio del Interior de Bruno Retailleau, miembro de Los Republicanos y con un historial pol¨ªtico m¨¢s a la derecha incluso que el partido donde milita actualmente. Los mensajes lanzados por Retailleau en los ¨²ltimos meses no permiten dudar de su rigidez en la materia. Un gui?o claro al RN de Le Pen, de quien depende la suerte de su labor. Una t¨®nica que se repetir¨ªa, si se confirma el nombre que circula en los mentideros pol¨ªticos parisinos, con el Ministerio de Familia. Al frente de dicha cartera, Michel Barnier habr¨ªa propuesto a Laurence Garnier, diputada de su partido conocida por su oposici¨®n al matrimonio entre personas del mismo sexo y a inscribir el derecho al aborto en la Constituci¨®n (ni siquiera Marine Le Pen se opuso a esta iniciativa hist¨®rica). Garnier es uno de los nombres que Macron podr¨ªa retocar en las siguientes horas, seg¨²n trascendi¨® el viernes por la ma?ana, y que Barnier utilizar¨ªa como moneda de cambio para lograr algo m¨¢s de influencia.
Al frente del Ministerio de Econom¨ªa, que se dividir¨¢ para dar pie tambi¨¦n a la cartera de Finanzas, estar¨¢ Antoine Armand, 33 a?os y miembro del partido de Macron. El jefe del Estado se reserva tambi¨¦n ¡ªpor las atribuciones que le otorga la Constituci¨®n¡ª el nombramiento de los titulares de Defensa y Exteriores, donde se nombrar¨¢ a S¨¦bastien Lecornu y Jean-No?l Barrot, respectivamente.
El aroma del Gobierno, al menos el que ha trascendido hasta ahora, conforma una mezcla de fragancias pol¨ªticas y un intenso olor a final de ¨¦poca. El escenario salido de las urnas era extremadamente complicado sin recurrir a grandes pactos o coaliciones, un arte para el que Francia ha demostrado falta de preparaci¨®n. El Nuevo Frente Popular (NFP), la alianza integrada por socialistas, comunistas, ecologistas y La Francia Insumisa (LFI) de Jean-Luc M¨¦lenchon, se convirti¨® en la primera fuerza en la Asamblea Nacional con 193 de 577 diputados, aunque qued¨® muy lejos de la mayor¨ªa absoluta de 289. El bloque presidencial, formado por tres partidos de centro y centroderecha, obtuvo 166; y el ultraderechista Reagrupamiento Nacional, 126.