La C¨¢mara de Representantes aprueba ¡®in extremis¡¯ un acuerdo para financiar el Gobierno y evitar su cierre

Los republicanos de la C¨¢mara de Representantes de EE UU han salvado los muebles del Gobierno este viernes con una nueva propuesta de financiaci¨®n temporal para evitar el cierre de la Administraci¨®n, lo que habr¨ªa privado al Gobierno federal de la capacidad de contar con los fondos necesarios para hacer frente a sus obligaciones financieras (por ejemplo, el pago de los salarios p¨²blicos). La propuesta aprobada por la C¨¢mara, que prev¨¦ tres meses de financiaci¨®n, es la tercera presentada desde el martes por la noche, despu¨¦s de que las dos primeras ¡ªuna, con apoyo bipartidista, y la segunda, s¨®...

Los republicanos de la C¨¢mara de Representantes de EE UU han salvado los muebles del Gobierno este viernes con una nueva propuesta de financiaci¨®n temporal para evitar el cierre de la Administraci¨®n, lo que habr¨ªa privado al Gobierno federal de la capacidad de contar con los fondos necesarios para hacer frente a sus obligaciones financieras (por ejemplo, el pago de los salarios p¨²blicos). La propuesta aprobada por la C¨¢mara, que prev¨¦ tres meses de financiaci¨®n, es la tercera presentada desde el martes por la noche, despu¨¦s de que las dos primeras ¡ªuna, con apoyo bipartidista, y la segunda, s¨®lo republicana y con el respaldo de Donald Trump¡ª fueran derrotadas por el rechazo de la inmensa mayor¨ªa de los dem¨®cratas y varias docenas de legisladores republicanos de l¨ªnea dura. La votaci¨®n, con un refrendo mayoritario ¡ªhan apoyado el texto 366 legisladores, frente a 34 noes y 29 abstenciones¡ª, se ha producido menos de seis horas antes de la fecha l¨ªmite para que se hiciera efectivo el cierre, el escaso tiempo del que dispon¨ªa el Senado para su tramitaci¨®n.

El presidente de la C¨¢mara, el republicano Mike Johnson ¡ªmu?idor de los tres proyectos¡ª, hab¨ªa anunciado a primera hora de la tarde un nuevo plan que financiar¨ªa temporalmente las operaciones federales y la ayuda en caso de cat¨¢strofe natural, pero aplazar¨ªa hasta el nuevo a?o la principal exigencia del presidente electo Donald Trump ¡ªexpresa en el segundo acuerdo¡ª de aumentar el techo de la deuda. El acuerdo alcanzado, no obstante, apenas s¨ª logra enmendar la sensaci¨®n de caos y desgobierno legislativo y partidista, que aumentaba a medida que pasaban las horas, mientras Trump redoblaba sus exigencias.

¡°Hay un acuerdo un¨¢nime de que tenemos que avanzar¡±, declar¨® Johnson a los periodistas al salir de una reuni¨®n a puerta cerrada de la bancada republicana de la C¨¢mara de Representantes, tras la pausa del almuerzo. ¡°No voy a detallarles sus especificidades, porque debemos rematar un par de cosas antes, pero espero que salga adelante. No habr¨¢ cierre del Gobierno¡±, asegur¨®. Aliviado por el resultado de la votaci¨®n, Johnson calific¨® despu¨¦s la ley de ¡°documento legislativo muy importante¡±, pero tambi¨¦n de ¡°paso necesario para salvar la brecha y situarnos en ese momento en el que podamos poner nuestras huellas en las decisiones finales sobre el gasto para 2025¡å, asegurando que las cosas van a ser ¡°muy diferentes por aqu¨ª¡± cuando su partido tome el control de ambas c¨¢maras del Congreso en enero.

Aunque ninguno de los dos se ha pronunciado de momento sobre el acuerdo, tanto Trump como Elon Musk, art¨ªfice del rechazo a la primera propuesta de financiaci¨®n, han hablado por tel¨¦fono con Johnson. Trump entendi¨® ¡°exactamente lo que est¨¢bamos haciendo y por qu¨¦¡±, ha explicado Johnson. ¡°Creo que ¨¦l tambi¨¦n estaba bastante contento con el resultado¡±. En cuanto a Musk, el portavoz dijo que hablaron sobre ¡°los extraordinarios desaf¨ªos del trabajo¡± de presidir la C¨¢mara y bromearon sobre un posible intercambio de papeles. ¡°Este puede ser el trabajo m¨¢s dif¨ªcil del mundo¡±, le dijo Musk a Johnson.

Despu¨¦s de que la primera propuesta de financiaci¨®n naufragara antes incluso de votarse, la inmensa mayor¨ªa de los dem¨®cratas y 38 republicanos rechazaron el jueves un segundo proyecto de ley que combinaba una pr¨®rroga de tres meses de la financiaci¨®n del Gobierno, 110.000 millones de d¨®lares en ayudas para desastres y agricultura y otras medidas con una suspensi¨®n de dos a?os del l¨ªmite de la deuda ¡ªla cantidad que puede pedir prestado el Gobierno, con autorizaci¨®n del Congreso, para afrontar sus obligaciones financieras¡ª, esta ¨²ltima una exigencia de ¨²ltima hora de Trump para financiar algunas de sus promesas electorales.

La tercera propuesta o plan C aparca temporalmente la modificaci¨®n del l¨ªmite de la deuda, ya que cualquier aumento es anatema para l¨ªnea dura de los republicanos por implicar mayor gasto p¨²blico. Tambi¨¦n es una l¨ªnea roja para los dem¨®cratas, de ah¨ª la confluencia en el voto de la bancada azul y las casi cuatro docenas de republicanos el jueves. Tambi¨¦n se concilian intereses en el acuerdo final, ya que, de no haberse aprobado esta pr¨®rroga, habr¨ªa pagado la factura del cierre la Administraci¨®n dem¨®crata. Hakeem Jeffries, el l¨ªder de la minor¨ªa dem¨®crata, calific¨® la aprobaci¨®n de la ley de ¡°victoria para el pueblo estadounidense¡± y alab¨® la responsabilidad de los legisladores de su partido, que con su voto ¡°frenaron a los republicanos MAGA¡±, las siglas de Make America Great Again, el movimiento que ha llevado de nuevo a Trump a la Casa Blanca.

El llamado plan C hace coincidir tres medidas distintas en un solo paquete: financiar el Gobierno, destinar ayuda para cat¨¢strofes naturales y asignar asistencia agr¨ªcola. Fuera de la ecuaci¨®n, o del endiablado sudoku, queda por el momento la principal exigencia de Trump, el aumento del techo de la deuda. El presidente electo redobl¨® este viernes su insistencia en que se incluyera esa provisi¨®n en cualquier acuerdo, y si no, ¡°que el cierre comience ahora¡±. Su declaraci¨®n no pudo ser m¨¢s clara: ¡°Si tiene que haber un cierre, mejor que sea ahora con Biden¡± a¨²n en la presidencia. Trump tomar¨¢ posesi¨®n el pr¨®ximo 20 de enero.

Los republicanos del Senado tambi¨¦n se han mostrado furiosos por lo que calificaron de ¡°espect¨¢culo de mierda, disfuncional y fiasco¡± de la C¨¢mara, al tumbar dos propuestas para financiar el Gobierno en menos de 48 horas. A instancias de Musk, que llev¨® la voz cantante mediante una ofensiva en la red social de su propiedad X (antes Twitter), Trump hizo descarrilar el primer proyecto de ley, un acuerdo bipartidista de m¨¢s de 1.500 p¨¢ginas, porque hac¨ªa concesiones a los dem¨®cratas, pero impuls¨® y apoy¨® el segundo, derrotado en una votaci¨®n. El problema ahora no son tanto Musk o Trump, sino la v¨ªa de agua de los ultramontanos, alineados en torno al Freedom Caucus, en el Partido Republicano.

En caso de haberse producido el cierre de la Administraci¨®n, los militares no habr¨ªan cobrado su paga en Navidad, como tampoco los millones de estadounidenses que dependen de un cheque de la Seguridad Social, entre otras disfunciones administrativas. Todas las agencias federales se habr¨ªan visto afectadas, y de hecho, seg¨²n la CNN, la Oficina de Gesti¨®n y Presupuesto de la Casa Blanca ya estaba enviando directrices adicionales a estas instancias sobre los preparativos para el cierre. Cada departamento y agencia tiene sus propios procedimientos para determinar cu¨¢ntos empleados deber¨ªan ser suspendidos de empleo y sueldo y cu¨¢les los considerados esenciales, as¨ª c¨®mo qu¨¦ actividades se cancelar¨ªan temporalmente. Alrededor de 875.000 trabajadores federales civiles habr¨ªan causado baja autom¨¢tica, mientras que otros 1,4 millones, los esenciales, habr¨ªan tenido que seguir trabajando, la mayor¨ªa de ellos sin sueldo, seg¨²n el Centro de Pol¨ªtica Bipartidista, en un an¨¢lisis de datos de septiembre. Los trabajadores habr¨ªan recibido sus n¨®minas atrasadas una vez finalizado el impasse.

En su rueda de prensa diaria, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, explic¨® por qu¨¦ el presidente Biden no se hab¨ªa pronunciado p¨²blicamente sobre la inminencia de un cierre del Gobierno. ¡°El presidente no tiene que arreglar esto. Son los republicanos los que tienen que arreglar el l¨ªo que han causado¡±, declar¨®. No obstante, tanto Biden como la vicepresidenta, Kamala Harris, regresaron este viernes a Washington de los lugares donde ten¨ªan previsto pasar el fin de semana.