Bruselas ampl¨ªa la investigaci¨®n sobre la red social X por las dudas sobre la moderaci¨®n de sus contenidos
La Comisi¨®n Europea adopta la decisi¨®n en v¨ªsperas del regreso de Trump a la presidencia de Estados Unidos
Bruselas ha ampliado la investigaci¨®n que ya ten¨ªa abierta sobre X (antigua Twitter) en pleno desaf¨ªo del multimillonario tecnol¨®gico y activista de ultraderecha Elon Musk, propietario de la plataforma. La Comisi¨®n Europea ha extendido la investigaci¨®n que ya realizaba sobre la red social X, cuyo due?o es aliado estrecho del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, consistente en determinar si la compa?...
Bruselas ha ampliado la investigaci¨®n que ya ten¨ªa abierta sobre X (antigua Twitter) en pleno desaf¨ªo del multimillonario tecnol¨®gico y activista de ultraderecha Elon Musk, propietario de la plataforma. La Comisi¨®n Europea ha extendido la investigaci¨®n que ya realizaba sobre la red social X, cuyo due?o es aliado estrecho del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, consistente en determinar si la compa?¨ªa hace lo suficiente para moderar los contenidos que ofrece. Esta medida llega tras las reacciones de varios gobiernos europeos y grupos parlamentarios en la Euroc¨¢mara contra el hombre m¨¢s rico del planeta con acusaciones de injerencia en las elecciones alemanas, por su apoyo al partido extremista Alternativa para Alemania (AfD), y con la sospecha de que su actitud haya estimulado actitudes desafiantes por parte de otros gigantes tecnol¨®gicos como Meta.
El paso que da la Comisi¨®n este viernes consiste, concretamente, en agrandar en tres frentes el expediente que ya tiene abierto sobre X desde diciembre de 2023. El primero se trata de exigirle que antes del 15 de febrero le env¨ªe documentaci¨®n sobre el sistema de recomendaci¨®n de contenidos a sus usuarios y los cambios recientes que haya podido a?adir en ese mecanismo. El segundo pasa por una orden de conservaci¨®n de los documentos internos e informaci¨®n sobre cambios en los algoritmos que emplee entre el 17 de enero -es decir, este viernes- y el 31 de diciembre de 2025. El ¨²ltimo persigue conocer e investigar c¨®mo funciona la moderaci¨®n de contenidos y la viralidad de sus cuentas.
La medida adoptada este viernes por el departamento que dirige la vicepresidenta de la Comisi¨®n Henna Virkkunen probablemente dilatar¨¢ la resoluci¨®n de la investigaci¨®n ya abierta. Ese expediente se encontraba ya en la fase ¨²ltima, pues Bruselas hab¨ªa presentado unas conclusiones preliminares en las que acusaba a la empresa de incumplir el reglamento europeo de servicios digitales (DSA, por sus siglas en ingl¨¦s) por ¡°c¨®mo la plataforma maneja los riesgos para el discurso c¨ªvico y los procesos electorales¡±. La compa?¨ªa estadounidense hab¨ªa presentado sus alegaciones e, incluso, las hab¨ªa defendido este verano delante de las instructores de la investigaci¨®n.
La ampliaci¨®n del expediente abierto a X tiene mucho de simb¨®lico y desborda los l¨ªmites de la propia investigaci¨®n dado que la actitud del propio Musk, con su activismo en favor de la ultraderecha en Europa, ha puesto a prueba las costuras del DSA y ha desafiado a varios gobiernos europeos (Alemania y Reino Unido). El respaldo sostenido del multimillonario de origen sudafricano a partidos euroesc¨¦pticos y con escaso pedigr¨ª democr¨¢tico hab¨ªa levantado muchos recelos en la UE.
Y esto se acentu¨® todav¨ªa m¨¢s cuando otro gigante tecnol¨®gico, Meta, acaudillada por Mark Zuckerberg, anunci¨® que abandonaba su pol¨ªtica de vigilancia y contraste sobre los bulos para pasar a un modelo en el que es la comunidad de sus redes sociales (Facebook, Instagram y Threads) quien har¨ªa ese trabajo, un sistema similar al que ya tiene X. Adem¨¢s, Zuckerberg lleg¨® a acusar a la UE de institucionalizar la censura en el v¨ªdeo que anunci¨® su giro.
¡°Entorno digital justo, seguro y democr¨¢tico¡±
¡°Hoy [por este viernes] tomamos nuevas medidas para arrojar luz sobre la conformidad de los sistemas de recomendaci¨®n de X por las obligaciones del DSA. Nos comprometemos a garantizar que todas las plataformas que operan en la UE respeten nuestra legislaci¨®n, cuyo objetivo es que el entorno digital sea justo, seguro y democr¨¢tico para todos los ciudadanos europeos¡±, ha expuesto Virkkunen en el comunicado en el que se informaba de la decisi¨®n adoptada.
El mismo texto se?ala que con estas medidas la Comisi¨®n pretende evaluar si X se ajusta a la norma y adoptar remedios sobre los posibles riesgos que pueda tener su actividad. Esta es una de las exigencias del reglamento de servicios digitales para las grandes plataformas digitales: ser transparentes y evaluar los riesgos que su actividad puede tener para el discurso c¨ªvico y democr¨¢tico para adoptar los remedios necesarios si se detectan problemas.
Si la conclusi¨®n de las autoridades europeas fuera que X no cumple con sus obligaciones legales, la sanci¨®n podr¨ªa ascender al 6% de la facturaci¨®n global de la red social. Y si despu¨¦s de eso, la compa?¨ªa siguiera en rebeld¨ªa frente la norma, entonces podr¨ªa llegarse al extremo de que la Comisi¨®n Europea reclamara ante un juez la suspensi¨®n de la actividad de la empresa.
En la UE todav¨ªa no se ha llegado a dar este paso, que s¨ª orden¨® en Brasil un juez hace unos meses. Las batallas que tiene Bruselas con las grandes tecnol¨®gicas, hasta ahora, han ca¨ªdo m¨¢s dentro del ¨¢mbito de las reglas del mercado y la competencia. En este campo, las multas impuestas hasta el momento han sido milmillonarias (la m¨¢s alta por ahora se le ha impuesto a Google, m¨¢s de 4.000 millones de euros). Pero eso no les ha disuadido en muchos casos de continuar buscando los l¨ªmites de la norma e, incluso ir m¨¢s all¨¢.
Por esto ¨²ltimo, la UE aprob¨® el reglamento de mercados digitales (DMA, por sus siglas en ingl¨¦s) y tambi¨¦n el DSA. Aunque el objeto de control es diferente en sendos reglamentos -uno se encarga de vigilar los mercados y el otro de que los contenidos de las plataformas sean legales y no pongan en riesgo a menores o la democracia- su concepto es similar. Revierten la carga de la prueba en el caso de los grandes operadores digitales para que los expedientes que se abren no acaben eterniz¨¢ndose y perdiendo eficacia.