Los peligros de un orden mundial roto agitan el Foro de Davos
Guterres alerta de la creciente impunidad, y el jefe de la Agencia de la Energ¨ªa At¨®mica denuncia la expansi¨®n de los arsenales nucleares
Las convulsiones del orden mundial provocadas por los pulsos entre potencias y una gobernanza global ineficaz han sido protagonistas este mi¨¦rcoles en el Foro Econ¨®mico Mundial de Davos (Suiza). Una tormenta perfecta hecha de violaciones del principio de integridad territorial, de los derechos humanos y de un abrupto debilitamiento de las instituciones internacionales se abate sobre la comunidad internacional. El secretario general de la ONU, Ant¨®nio Guterres, describi¨® de la siguiente manera uno de los peligros clave: ¡°Las divisiones geopol¨ªticas son profundas y esto deriva en una situaci¨®n de impunidad. La verdad es que en todas partes todo el mundo piensa que puede hacer lo que quiera y no le pasar¨¢ nada¡±.
La retirada de EE UU de organismos como la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) o mecanismos como el Acuerdo de Par¨ªs infligen un nuevo golpe a un marco internacional turbulento, cuyas consecuencias provocan inquietud. En su discurso, Guterres se?al¨® que no solo el conflicto nuclear es una amenaza existencial: tambi¨¦n lo son el cambio clim¨¢tico y el devenir descontrolado de la inteligencia artificial. En ambos casos no se detectan se?ales prometedoras de gobernanza. En el terreno nuclear, tampoco.
El director de la Agencia Internacional de la Energ¨ªa At¨®mica, Rafael Mariano Grossi, se?al¨® su preocupaci¨®n por la carrera de ampliaci¨®n de los arsenales nucleares en un encuentro con un grupo de periodistas internacionales. ¡°Veo el potencial de una muy seria erosi¨®n del r¨¦gimen de no proliferaci¨®n. Todos parecen incrementar sus arsenales nucleares, olvidando que hay un compromiso de reducirlos [seg¨²n el Tratado de No Proliferaci¨®n Nuclear]. Y cuando digo todos, es todos, incluido China, que siempre fue un campe¨®n del desarme nuclear¡±.
Grossi tambi¨¦n alert¨® de que Ir¨¢n ¡°est¨¢ pisando el acelerador¡± en el desarrollo de su programa nuclear. En su discurso, Guterres exhort¨® a las autoridades iran¨ªes a dejar claro que no quieren la bomba nuclear, en una situaci¨®n de capacidad de vigilancia limitada despu¨¦s de que Donald Trump rompiera el acuerdo que ofrec¨ªa mejores instrumentos de control en su primer mandato presidencial. El vicepresidente de asuntos estrat¨¦gicos de Ir¨¢n, Mohamed Javad Zarif, volvi¨® a asegurar en Davos que Teher¨¢n no busca la bomba. Pero en el foro era clara la preocupaci¨®n entre los expertos por el pulso que se libra entre distintas facciones en Ir¨¢n, entre quienes abogan por la capacidad nuclear como garant¨ªa en la actual situaci¨®n de extrema debilidad y quienes ¨Dcomo Zarif¨D son m¨¢s partidarios de negociar con Occidente.
Otro elemento central de los debates y conversaciones informales en Davos es la perspectiva de una negociaci¨®n para parar las hostilidades en Ucrania. La promesa de Trump de acabar el conflicto en 24 horas ha demostrado su nulo fundamento. El inter¨¦s del Foro se centraba en el discernimiento de m¨²ltiples voluntades: la de Vlad¨ªmir Putin de conformarse con un resultado inferior a la total subyugaci¨®n de Ucrania, la de Trump de elevar realmente la presi¨®n para que el l¨ªder ruso llegue a esa conclusi¨®n y la de los europeos de hacerse cargo de una parte relevante de las garant¨ªas necesarias para sostener un eventual alto el fuego disuadiendo nuevos ataques futuros. Trump amenaz¨® este mi¨¦rcoles a Putin con endurecer las sanciones si no acaba su ofensiva, pero entre palabras y realidades efectivas hay un trecho. En todo ello, la ONU se halla completamente fuera de juego, en un ejercicio que es un puro juego de potencia.
Asimismo, la OMC (Organizaci¨®n Mundial del Comercio) se halla completamente desdentada en v¨ªsperas de lo que se perfila como una escalada de conflictos comerciales. Los expertos consideran improbable que Trump reh¨²ya implementar una promesa de campa?a que ha sido central en su camino de regreso a la Casa Blanca. Acci¨®n y reacciones se desenvolver¨¢n en un terreno sin ¨¢rbitro, ya que el panel de arbitraje de la OMC se halla desactivado por la negativa de EE UU a renovar a los integrantes con el mandato ya caducado.
A su vez, la justicia internacional sufre graves problemas de eficacia, con pa¨ªses que se niegan a cumplir con la obligatoriedad de las ¨®rdenes de detenci¨®n (como Mongolia con Putin) o con sentencias (como China en el caso de la disputa mar¨ªtima con Filipinas, o Israel en los requerimientos cautelares en su ofensiva en Gaza).
El cuadro se ve complicado a¨²n m¨¢s por el papel de las plataformas sociales en las democracias, con la acci¨®n manipuladora sin tapujos de Elon Musk y los movimientos de Mark Zuckerberg. En este cuesti¨®n, el presidente del Gobierno de Espa?a, Pedro S¨¢nchez, abog¨® por que los due?os de las redes sean responsables penalmente de los contenidos que a trav¨¦s de ellas se difunden. Un intento de limitar el espacio de la impunidad que avanza a la cual hizo referencia Guterres en su intervenci¨®n.
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