Claves de la ofensiva del M23 en Congo: una vieja rebeli¨®n que alimenta el conflicto con Ruanda
El avance de la guerrilla le ha permitido hacerse con el control de nuevas minas de colt¨¢n, el valioso mineral con el que se fabrican los tel¨¦fonos m¨®viles
La entrada del grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23) el pasado domingo en la ciudad congole?a de Goma, la capital de Kivu Norte, en el este de Rep¨²blica Democr¨¢tica de Congo (RDC), es, por ahora, el ¨²ltimo cap¨ªtulo de un largo conflicto. La disputa, que hunde sus ra¨ªces en el genocidio ruand¨¦s de 1994, se nutre de la explotaci¨®n de las minas de colt¨¢n. Y ha llevado a Ruanda y Congo al borde de una guerra. La crisis, adem¨¢s, go...
La entrada del grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23) el pasado domingo en la ciudad congole?a de Goma, la capital de Kivu Norte, en el este de Rep¨²blica Democr¨¢tica de Congo (RDC), es, por ahora, el ¨²ltimo cap¨ªtulo de un largo conflicto. La disputa, que hunde sus ra¨ªces en el genocidio ruand¨¦s de 1994, se nutre de la explotaci¨®n de las minas de colt¨¢n. Y ha llevado a Ruanda y Congo al borde de una guerra. La crisis, adem¨¢s, golpea a un pa¨ªs del ?frica central, Congo, que a¨²n siente los efectos de las dos grandes guerras que entre 1996 y 2003 acabaron con la vida de m¨¢s de cinco millones de personas, entre combatientes y civiles que fallecieron de forma indirecta a causa de la malnutrici¨®n y los problemas de salud posteriores.
?Qu¨¦ es el M23?
El M23, que ahora se presenta bajo el marco de la Alianza del R¨ªo Congo (AFC, seg¨²n sus siglas en franc¨¦s), es la ¨²ltima expresi¨®n de los grupos armados tutsis que combaten desde hace tres d¨¦cadas a las milicias hutus, a las que acusan de la muerte de un mill¨®n de tutsis y hutus moderados en Ruanda en 1994. El 23 de marzo de 2009, los rebeldes tutsis congole?os llegaron a un acuerdo con las autoridades de Kinshasa para su integraci¨®n en el ej¨¦rcito, pero el fracaso de dicho proceso hizo que tres a?os despu¨¦s volvieran a constituirse en guerrilla. Su nombre conmemora la fecha del acuerdo fallido.
En noviembre de 2012, el M23 ya logr¨® tomar la ciudad de Goma (en torno a dos millones de habitantes) e, igual que ahora, Ruanda estaba detr¨¢s del grupo armado. En pocos meses, la guerrilla de mayor¨ªa tutsi demostr¨® la debilidad de las Fuerzas Armadas congole?as y se hizo con el control de la ciudad. Dicha ocupaci¨®n, que vino acompa?ada de masacres, violaciones de derechos humanos y asesinatos, seg¨²n la ONU, dur¨® apenas 11 d¨ªas. El 3 de diciembre, las fuerzas congole?as volvieron a entrar en Goma merced a un acuerdo de paz firmado en la vecina Uganda.
?Cu¨¢ndo comenz¨® la reciente ofensiva?
Tras una d¨¦cada de hibernaci¨®n del conflicto, la rebeli¨®n volvi¨® a activarse en 2022 y desde entonces ha ido ganando terreno a las Fuerzas Armadas congole?as, incapaces de detener un avance que se intensific¨® a comienzos de 2025 y ha logrado llegar, de nuevo, hasta Goma. La ocupaci¨®n de cada vez m¨¢s territorio ha provocado la progresiva huida de hasta 800.000 personas que, en un primer momento, se trasladaron como desplazadas hasta la ciudad de Goma y que, en los ¨²ltimos d¨ªas, se han vuelto a mover en su intento de cruzar hacia Ruanda. Al mismo tiempo, dicho avance ha permitido al M23 hacerse con el control de la regi¨®n minera de Rubaya, donde se extrae el valioso colt¨¢n con el que se fabrican tel¨¦fonos m¨®viles y productos tecnol¨®gicos.
?Apoya Ruanda a la guerrilla?
Tanto el Gobierno de Congo como la ONU, la UE y Estados Unidos han acusado a Ruanda de estar detr¨¢s del M23, algo que las autoridades de Kigali niegan. Un informe de Naciones Unidas datado a mediados de enero apuntaba a la presencia en suelo congole?o de entre 2.000 y 3.000 soldados ruandeses en apoyo del M23. Buena parte del colt¨¢n y otros minerales que se extraen del territorio controlado por la guerrilla va a parar a Ruanda y de ah¨ª se exporta al resto del mundo, seg¨²n organismos especializados.
El apoyo de Ruanda al M23 ha tensado las relaciones entre Kinshasa y Kigali desde 2022. El presidente congole?o, F¨¦lix Tshisekedi, acusa a Ruanda de haber iniciado una guerra contra su pa¨ªs mediante la ocupaci¨®n de una parte de su territorio, algo que la propia ONU ha confirmado, y ha retirado a todos sus diplom¨¢ticos de la capital ruandesa. El presidente ruand¨¦s, Paul Kagame, asegura, sin embargo, que el apoyo congole?o a las milicias hutus est¨¢ en el origen del problema, y tambi¨¦n ha llamado a su personal en Kinshasa. El secretario general de Naciones Unidas, Ant¨®nio Guterres, teme una extensi¨®n del conflicto en el continente africano.
?Qu¨¦ posibilidades hay de que se firme la paz?
El ¨²ltimo intento de alcanzar un acuerdo de paz cristaliz¨® en el proceso de Luanda (Angola), liderado por el presidente angole?o, Joao Louren?o, que promovi¨® un alto el fuego fallido en julio de 2024. El pasado 15 de diciembre, Tshisekedi y Kagame deb¨ªan encontrarse en Luanda, pero, a ¨²ltima hora, el presidente ruand¨¦s anunci¨® que no asistir¨ªa a la reuni¨®n alegando la falta de compromiso de Congo para negociar con el M23.
?Qu¨¦ otras fuerzas participan en el conflicto?
Nacida en 1999, la Misi¨®n de la ONU para la Estabilizaci¨®n de Congo (Monusco), que en diciembre pasado contaba con 11.000 soldados sobre el terreno, se ha visto tambi¨¦n envuelta en los combates. Aunque su mandato es la protecci¨®n de civiles y la estabilizaci¨®n de las rutas de aprovisionamiento, han tratado de impedir el avance de los rebeldes. Tres de estos cascos azules murieron la semana pasada en combates con el M23.
La Comunidad de Desarrollo del ?frica Austral (SADC, seg¨²n sus siglas en ingl¨¦s) tambi¨¦n envi¨® tropas, la mayor¨ªa de ellas sudafricanas, que luchan junto al ej¨¦rcito congole?o. Diez soldados de la SADC han muerto en combates en los ¨²ltimos d¨ªas.