Menos cola en Do?a Manolita por la Loter¨ªa de Navidad pero m¨¢s ilusi¨®n: ¡°A ver si pasa algo bueno este a?o¡±
¡°Se dice mucho que cuando hay crisis la loter¨ªa se vende m¨¢s, pero yo no estoy de acuerdo¡±, se?ala la gerente, que apunta a los ERTE y la ca¨ªda de compras que se hac¨ªan en bares y oficinas
Ni el fr¨ªo invernal, ni los momentos de lluvia disuaden una de las tradiciones del Sorteo de loter¨ªa de Navidad en Madrid: la cola en do?a Manolita, una de las administraciones que m¨¢s vende en toda Espa?a y que, en consecuencia, se ha convertido en una de las que m¨¢s premios reparte. Estas semanas en muchos momentos sigue doblando dos esquinas, hasta llegar a la plaza del Carmen. Sin embargo, es un espejismo causado por la distancia que se debe mantener entre las persona. La cola de Do?a Manolita, este 2020, tampoco es la de un a?o al uso. El tiempo de espera para comprar un d¨¦cimo que tiene ...
Ni el fr¨ªo invernal, ni los momentos de lluvia disuaden una de las tradiciones del Sorteo de loter¨ªa de Navidad en Madrid: la cola en do?a Manolita, una de las administraciones que m¨¢s vende en toda Espa?a y que, en consecuencia, se ha convertido en una de las que m¨¢s premios reparte. Estas semanas en muchos momentos sigue doblando dos esquinas, hasta llegar a la plaza del Carmen. Sin embargo, es un espejismo causado por la distancia que se debe mantener entre las persona. La cola de Do?a Manolita, este 2020, tampoco es la de un a?o al uso. El tiempo de espera para comprar un d¨¦cimo que tiene un un 0,001% de posibilidades de llevarse El Gordo es este diciembre m¨¢s corto aunque la fila parece m¨¢s larga, se?ala Concha Corona, gerente de la administraci¨®n. Lo que se mantiene igual, subraya, es la ilusi¨®n, con la coletilla de ¡°a ver si pasa algo bueno este a?o¡± como comentario estrella.
Sin embargo, las cifras de ventas totales no se han mantenido. ¡°Hemos vendido bastante menos por ventanilla y un poco m¨¢s en la web. Aunque por pol¨ªtica de empresa no damos cifras porque eso es mala suerte¡±, resume Corona. El olfato que le da la experiencia le hace pensar que la gran diferencia este a?o ha estado en las compras que hac¨ªan bares o empresas, que entre los ERTE y el teletrabajo se han visto obligados a romper la tradici¨®n. ¡°Se dice mucho que cuando hay crisis la loter¨ªa se vende m¨¢s, pero yo no estoy de acuerdo con eso, lo puedo ver con mis propios ojos¡±, agrega.
En esta administraci¨®n abierta desde 1904 -y que tuvo varias localizaciones antes de llegar a Carmen, 22- hay clientes que repiten cola cada a?o, ya por tradici¨®n. Situada a escasos metros de la Puerta del Sol, era parada obligatoria para mucho turismo nacional. Y muchos residentes en Madrid llevan los d¨¦cimos sellados por Do?a Manolita como regalo al volver a casa por Navidad, como Sergio y Pamela, ambos de Galicia, que estudian interpretaci¨®n en la capital y esta semana han sacado un rato -una hora y pico- para su misi¨®n de emisarios. ¡°Como nos vamos a quedar aqu¨ª durante las fiestas, nos ha tocado ser las v¨ªctimas y venir a cogerle decimos a todo Galicia¡±, cuentan entre risas. Unos 20 d¨¦cimos para familiares y amigos que custodiaran en la distancia porque ambos van a sacrificar este a?o las fiestas con las familias para evitar momentos de riesgo. [Recomendaciones para frenar el coronavirus en Navidad]
El a?o pasado en esta administraci¨®n, y en su ventanilla en internet, se repartieron varios premios, incluido el 26.590, el n¨²mero de El Gordo de la Navidad del a?o pasado. De camino a comprar sus d¨¦cimos, Marta Rivera se pone a la cola, con un horizonte de una hora de espera por delante y de una ilusi¨®n de muchos euros: si lleva el primer premio del sorteo, se comprar¨ªa un piso . Esta terapeuta de origen colombiano, que lleva 30 a?os en Espa?a, se pone a la fila de esta administraci¨®n cada Navidad: ¡°Vengo todos los a?os aqu¨ª un poco como inercia porque es donde dicen que m¨¢s cae. El a?o pasado me gan¨¦ 300 euros, a ver si este a?o tambi¨¦n tengo suerte¡±.
Otros, como Rafa, madrile?o jubilado, que es de los que solo juegan ¡°por jugar¡±, por la inercia de la tradici¨®n, pero sin la esperanza real de ganar. Hasta el punto que lo m¨¢ximo que espera, dice, es ganar ¡°lo justo para volver a jugar¡±. Eso, claro, es un poco m¨¢s f¨¢cil que el Gordo. Lleva veinticinco minutos de fila con su primo, y calcula que le queda una hora m¨¢s, por lo menos. ¡°Yo esperaba bastante menos gente, pero ya que estamos aqu¨ª habr¨¢ que aguantar¡±, apunta.
En Do?a Manolita hay tres vigilantes con chalecos amarillos encargados del orden de la fila, de comprobar que la distancia m¨ªnima entre las personas pero no es tarea f¨¢cil. ¡°Aqu¨ª hay fila desde antes de que abren, a las nueve de la ma?ana, y se mantiene todo el d¨ªa¡±, explica uno de los trabajadores. Y Corona, la gerente, agrega que conforme se acerca la Navidad -estos d¨ªas ya se sabe que a la vuelta de la esquina, al cambiar de a?o, comenzar¨¢n a llegar las vacunas a Espa?a- percibe un poco m¨¢s de alegr¨ªa en el ambiente: ¡°Siempre decimos que nosotros repartimos ilusiones, y ahora se puede palpar de nuevo. Hace un mes incluso hab¨ªa una sensaci¨®n de pena y tristeza, ahora es otra vez como siempre¡±.