Limpiarse en la ropa y otras man¨ªas de los hijos que ponen de los nervios a padres y madres

En Instagram o en conversaciones con otros padres, padres y madres muestran la parte m¨¢s maravillosa de la crianza, porque la tiene y porque siempre es mejor compartir lo bueno, que para sembrar odio y desaz¨®n ya est¨¢ Twitter. Pero incluso as¨ª, todos los progenitores tienen una lista secreta de man¨ªas de sus hijos que les sacan de quicio, peque?as tonter¨ªas que, repetidas d¨ªa a d¨ªa, acaban por ponerles los ojos en blanco, les hacen soltar alg¨²n grito o encerrarse a mirar el m¨®vil en el lavabo ...

En Instagram o en conversaciones con otros padres, padres y madres muestran la parte m¨¢s maravillosa de la crianza, porque la tiene y porque siempre es mejor compartir lo bueno, que para sembrar odio y desaz¨®n ya est¨¢ Twitter. Pero incluso as¨ª, todos los progenitores tienen una lista secreta de man¨ªas de sus hijos que les sacan de quicio, peque?as tonter¨ªas que, repetidas d¨ªa a d¨ªa, acaban por ponerles los ojos en blanco, les hacen soltar alg¨²n grito o encerrarse a mirar el m¨®vil en el lavabo como c¨¢mara de descompresi¨®n.

Aunque de normal se las guardan para ellos, creo que les relajar¨¢ ver que muchos pasan por lo mismo.

Estas son las m¨ªas:

1. Que a la hora de comer se olviden de la existencia de las servilletas y se limpien con una manga o en su camiseta, en especial si es ropa clara y la mancha se quedar¨¢ a vivir ah¨ª para siempre.
2. Que, como consecuencia de esto, adem¨¢s se limpien en mis pantalones, con especial intensidad y asiduidad si son claros.
3. Que si usan servilleta lo compensen con la opci¨®n de apoyarse en todas las paredes para convertir nuestra casa en una Atapuerca particular. El mito dice que con una esponja de fregar platos un poco mojada esas manchas desaparecen, pero nuestro museo particular dice lo contrario.
4. Que nunca se acaben un pl¨¢tano y que las familias tengan restos en distinto estado de putrefacci¨®n en la nevera, debajo del cochecito o en alguna mochila.
5. Que dejen las luces encendidas. Siempre. Y todas. Y que cuando se les pida apagarlas su t¨¦cnica rupestre implique golpear los interruptores con fuerza de luchador de la WWF.
6. Que sean incapaces de hacer una comida entera sentados en la mesa, sin levantarse 36 veces para ir al lavabo, jugar a 15 cosas o hacer el IVA trimestral.
7. Que no calculen bien lo que se van a comer y siempre manoseen o chupen la comida para dejarla despu¨¦s en el plato. Todo padre se ha acabado varios pl¨¢tanos a medio pudrir, pero los restos chupados y fr¨ªos de una cena ya hay que tener valor¡­
8. Que cada vez que estoy en el lavabo acudan todos como si se tratara de una reuni¨®n de junta, pero, en cambio, cuando los llamas a comer tarden mucho rato.
9. Que nunca quieran irse de casa de las amigas a la hora que los padres van a buscarles (hora ya pactada para evitar dramas) y que, despu¨¦s, acaben todos los cr¨ªos enfadados por la separaci¨®n, despu¨¦s de haber estado juntos todo el d¨ªa¡­ (y normalmente vayan a verse al d¨ªa siguiente).
10. Que no quieran contar nada de c¨®mo les ha ido el d¨ªa y justo cuando les acompa?as a la cama, y lo ¨²nico que quieres es que se duerman y dormir, empiecen con un mon¨®logo de media hora que no lo aguantar¨ªan ni en un programa de testimonios.

Estas son mis man¨ªas actuales, peque?os peajes rid¨ªculos en un d¨ªa a d¨ªa lleno de amor¡­ y de lavadoras de la ropa que me han manchado al limpiarse conmigo.

?Cu¨¢les son las que os ponen de los nervios a vosotros?

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