Lozoya le prometi¨® al director de Odebrecht en M¨¦xico un cargo p¨²blico si el PRI ganaba las elecciones
El juez acepta las medidas cautelares pactadas por la fiscal¨ªa y la defensa. El exdirector de Pemex no pisar¨¢ la prisi¨®n mientras dure el juicio por los sobornos de Odebrecht y Altos Hornos
Emilio Lozoya no pisar¨¢ la c¨¢rcel mientras dure su juicio por los sobornos del Odebrecht y Altos Hornos. El juez, al igual que hizo en la vista de ayer martes, ha imputado al exdirector de Pemex por los delitos de lavado de dinero, asociaci¨®n delictuosa y cohecho. Pero a la vez, ha aceptado de nuevo las medidas cautelares pactadas por la Fiscal¨ªa General de la Rep¨²blica (FGR) y la defensa: prohibici¨®n de salida del pa¨ªs, retirada del pasaporte y colocaci¨®n de un brazalete de seguimiento. El caso Lozoya entra en una nueva fase tras confirmarse la libertad condicional, pero mantiene las l¨ªneas de investigaci¨®n que apuntan cada vez con m¨¢s fuerza a la c¨²pula del Gobierno de Enrique Pe?a Nieto.
Antes de tomar las riendas de Pemex, Emilio Lozoya fue el coordinador del ¨¢rea internacional de la campa?a presidencial de Pe?a Nieto. Durante esa etapa, en 2012, Lozoya le prometi¨® al director de Odebrecht en M¨¦xico, Luis Alberto de Meneses Weyll, un cargo p¨²blico si el PRI ganaba las elecciones. Este es uno de los detalles de la acusaci¨®n que la Fiscal¨ªa General de la Rep¨²blica (FGR) present¨® este mi¨¦rcoles en la segunda vista ante el juez del exdirector de Pemex. Lozoya ya hab¨ªa sido se?alado por De Meneses, testigo protegido en Brasil, como receptor de sobornos por 10,5 millones de d¨®lares a cambio de contratos para la constructora en M¨¦xico.
El exdirector de Pemex ha vuelto por segundo d¨ªa consecutivo a declararse inocente y a subrayar su disposici¨®n a colaborar con la Justicia en la compleja trama de sobornos que amenaza a los m¨¢ximos responsables del ¨²ltimo gobierno del PRI. Desde el hospital privado donde est¨¢ ingresado tras volver a M¨¦xico extraditado desde Espa?a hace casi dos semanas, Lozoya ha afirmado v¨ªa telem¨¢tica ante el juez que fue ¡°intimidado, presionado, influenciado e instrumentalizado¡±.
Su postura exculpatoria est¨¢ en l¨ªnea con su declaraci¨®n del d¨ªa anterior, donde se present¨® como la v¨ªctima de un ¡°aparato organizado de poder¡±, en el marco de su participaci¨®n en el caso Agronitrogenados, la compra de una planta de fertilizantes a sobreprecio por parte de la petrolera estatal en enero de 2014 a la sider¨²rgica Altos Hornos, origen de la primera de los denuncias presentadas hace m¨¢s de un a?o. Este mi¨¦rcoles, en la audiencia centrada en el caso Odebrecht, ha vuelto a enfatizar: ¡°Denunciar¨¦ y se?alar¨¦ a las personas responsables de estos hechos y los posibles beneficios de las mismos¡±.
La defensa del que fuera jefe de la petrolera mexicana entre 2013 y 2016 y persona de confianza del expresidente Enrique Pe?a Nieto va perfilando cada vez m¨¢s su estrategia de apuntar a lo m¨¢s alto a cambio de conseguir un menor castigo para su cliente. Los abogados defensores han insistido este mi¨¦rcoles en acogerse al criterio de oportunidad, una figura que puede garantizar la absoluci¨®n del acusado a cambio de destapar delitos de mayor gravedad que los que se le imputan. Siguiendo esta l¨®gica, los letrados Miguel Ontiveros y Alejandro Rojas insistieron en que Lozoya ¡°ha sido utilizado por un aparato de poder conformado por altas autoridades del Estado mexicano¡±. Y que en su momento ¡°¨¦l proceder¨¢ a denunciar de manera muy clara y contundente sus nombres, sus cargos y los m¨¦todos de instrumentaci¨®n¡±.
Los 10,5 millones de Odebrecht
La denuncia centrada en el caso Odebrecht identifica al menos dos sobornos de la constructora brasile?a a cambio de tratos de favor durante los a?os 2011 y 2014. El primero, durante la etapa de Lozoya como coordinador de la campa?a presidencial. ¡°Usted refiri¨® a Luis Alberto de Meneses Weyll un pago de cuatro millones de d¨®lares cuando era parte del comit¨¦ de campa?a en 2012 y le dijo que en caso de ganar tendr¨ªa un cargo que le permitir¨ªa proporcionar contratos de obra p¨²blica, como as¨ª fue en los estado de Hidalgo, Veracruz y Tamaulipas¡±, carg¨® la Fiscal¨ªa.
La informaci¨®n proviene de las confesiones y delaciones ante la justicia brasile?a de los directivos de Odebrecht, que se?alaron a Lozoya como ¡°la persona que recib¨ªa los sobornos¡±. Las reuniones entre de Meneses y el directivo mexicano eran, seg¨²n la misma versi¨®n, constantes y Lozoya lleg¨® a agradecerle a ¨¦l y a sus colaboradores ¡°el apoyo brindando por Odebrecht en la campa?a de Pe?a Nieto¡±, sin dar m¨¢s detalles sobre una hipot¨¦tica financiaci¨®n de la campa?a con dinero sucio.
El segundo soborno, ya con Lozoya como director de la petrolera estatal mexicana, fue de seis millones y medio de d¨®lares a cambio de diversos contratos de obras p¨²blicas, como la refinar¨ªa de Tula. Lozoya est¨¢ acusado tambi¨¦n de involucrar a empresarios privados en las alianzas con Odebrecht, adem¨¢s de saltarse los procedimientos de licitaci¨®n p¨²blica. El beneficio que obtuvo la contratista mexicana en M¨¦xico por la adjudicaci¨®n de obras fue de 39 millones de d¨®lares.
En el entramado fraudulento que dibuja la FGR aparecen tambi¨¦n los familiares del exdirectivo: ¡°Usted sab¨ªa que los recursos eran de Odebrecht. Recibi¨® 10,5 millones de d¨®lares como resultado de sobornos y se asoci¨® con su madre, su esposa y su hermana con el prop¨®sito de delinquir¡±. En concreto, la Fiscal¨ªa identifica una serie de empresas tapadera y negocios inmobilarios donde presuntamente se ingresaron los sobornos. La acusaci¨®n habla de ¡°infinidad de dep¨®sitos bancarios en M¨¦xico, Brasil y otros pa¨ªses¡± con ¡°el prop¨®sito de ocultar el origen de los recursos¡±. Al igual que durante la investigaci¨®n relacionada con los sobornos de Altos Hornos, aparecen de nuevo movimientos a nombre de Tochos Holding Limited, ubicada en Suiza, que tiene como beneficiaria a Gilda Susana Lozoya, la hermana menor del acusado.
La madre, Gilda Margarita Austin, fue detenida en Alemania el a?o pasado y est¨¢ imputada por lavado de dinero y asociaci¨®n delictuosa. Debido a su edad, 71 a?os, logr¨® el arraigo domiciliario. La cooperaci¨®n de Lozoya con la Fiscal¨ªa, iniciada desde su arresto y extradici¨®n, se enmarca tambi¨¦n en la voluntad de lograr beneficios tanto para su caso como para sus familiares, incluso en calidad de testigos protegidos. De momento, tanto Lozoya como su madre, ambos imputados, ya han conseguido al menos evitar pisar la c¨¢rcel mientras dure el juicio.
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