M¨¦xico reintroduce el bisonte americano 100 a?os despu¨¦s de su desaparici¨®n

Las amplias planicies del Estado de Coahuila ¡ªlocalizado en el noroeste del pa¨ªs¡ª atraen estos d¨ªas la atenci¨®n de los mexicanos por la belleza de sus campos blanqueados por la nieve, pero tambi¨¦n porque un viejo habitante de estas regiones ha vuelto a pastar libre: el bisonte americano, el mam¨ªfero terrestre m¨¢s grande de Am¨¦rica, ha sido reintroducido con ¨¦xito por las autoridades ambientales, 100 a?os despu¨¦s de su exterminaci¨®n debido a la cacer¨ªa indiscriminada y la destrucci¨®n de su h¨¢bitat.

El animal, tambi¨¦n conocido como b¨²falo, fue el rey de los amplios campos del norte de M¨¦xico y las planicies de Estados Unidos y Canad¨¢, donde pastaban en enormes manadas. Hace 300 a?os, seg¨²n la Comisi¨®n Nacional de ?reas Naturales Protegidas (Conanp), hab¨ªa en territorio norteamericano entre 30 y 60 millones de bisontes, pero ¡°para 1880, desgraciadamente, la poblaci¨®n se redujo a poco m¨¢s de 1.000 individuos, debido a la destrucci¨®n y fragmentaci¨®n de los pastizales, enfermedades y cacer¨ªa¡±. Gracias a un proyecto conjunto que involucr¨® a las autoridades ambientales, universidades, cient¨ªficos y con el apoyo del Servicio Nacional de Parques de Estados Unidos, los enormes mam¨ªferos volvieron a pastar en territorio de M¨¦xico.

El proyecto para reintroducir al bisonte americano comenz¨® en noviembre de 2009, cuando fue liberada una primera manada de 23 b¨²falos provenientes del Parque Nacional Wind Cave ¡ªlocalizado en Dakota del Sur (Estados Unidos)¡ª como parte de una colaboraci¨®n entre Mexico y Estados Unidos para recuperar la especie, que en 2016 el presidente Barack Obama declar¨® como el Primer Mam¨ªfero Nacional. Desde la Conanp explican que esta primera manada fue introducida en la Reserva de la Bi¨®sfera Janos, en el Estado de Chihuahua, con la esperanza de que repoblaran sus antiguos territorios.

Mar¨ªa Luisa Albores, titular de la Secretar¨ªa de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), inform¨® triunfante este jueves a trav¨¦s de su cuenta en Twitter y mostrando im¨¢genes de los animales pastando en los campos nevados, que una segunda manada de bisontes americanos, introducida el a?o pasado, ha logrado asentarse en Coahuila, demostrando el ¨¦xito del programa para recuperar la especie. Esta segunda manada es de 19 animales, que se unen a los 200 que ya pueblan el norte de M¨¦xico. ¡°El establecimiento de manadas en M¨¦xico contribuye de manera importante a la recuperaci¨®n de la especie a escala continental y es un ejemplo de ¨¦xito en la recuperaci¨®n de especies en riesgo mediante la estrecha colaboraci¨®n de diversos actores de la sociedad¡±, explican desde la Conanp.

El bisonte es un animal relativamente calmo, que pasa sus d¨ªas comiendo pastizales, aunque tambi¨¦n es un mam¨ªfero ¨¢gil, capaz de correr a unos 60 kil¨®metros por hora. A pesar de la placidez con la que recorren los campos, es un gigante que puede intimidar con sus m¨¢s de 1,60 metros de altura y un peso que puede llegar a superar los 1.000 kilogramos. En ¨¦poca de celos, los machos pueden liarse en duros enfrentamientos a cornadas por las hembras de la manada.

Fue una importante fuente de alimentos y pieles para los pueblos nativos de Norteam¨¦rica, cuya cultura y supervivencia estaba ligada a este animal. El historiador Andrew C. Isenberg, citado por la revista estadounidense The New Yorker, explica en su libro La destrucci¨®n del bisonte, que la masacre de estos mam¨ªferos comenz¨® en la d¨¦cada de los a?os setenta del siglo XIX, cuando los animales eran cazados por sus pieles para usarlas en las nuevas f¨¢bricas que se abr¨ªan a lo largo de Estados Unidos. Los huesos del animal, adem¨¢s, eran utilizados para la fabricaci¨®n de fertilizantes. Para las autoridades estadounidenses, afirma Isenberg, la eliminaci¨®n del b¨²falo era ¡°un triunfo de la civilizaci¨®n sobre el salvajismo¡±.

A pesar del ¨¦xito del programa para repoblar las planicies del norte con estos mam¨ªferos, las autoridades mexicanas admiten que el bisonte todav¨ªa es una especie en peligro. Las principales amenazas que los ponen en riesgo son la expansi¨®n de la frontera agr¨ªcola y la cacer¨ªa, as¨ª como la falta de incentivos para que los rancheros de los Estados del norte del pa¨ªs se animen a criarlos y cuidarlos. Con todo, la secretaria Albores se mostraba satisfecha este jueves con lo logrado, publicando en su cuenta de Twitter fotos de los animales pastando pl¨¢cidamente en manada en los hermosos campos plateados por la nieve en Coahuila.