Ilse Salas: ¡°Los concursos de belleza son arcaicos y violentos, no le aportan nada a M¨¦xico¡±
La actriz mexicana estrena la serie ¡®Se?orita 89¡ä, un thriller sobre violencia y esc¨¢ndalos pol¨ªticos tras el certamen de Miss M¨¦xico
Ilse Salas (Ciudad de M¨¦xico, 40 a?os) no esquiva ninguna pregunta y se mete en m¨¢s de un jard¨ªn. La actriz mexicana estrena este domingo nueva serie, Se?orita 89, un thriller dram¨¢tico, que podr¨¢ verse en la plataforma Starzplay, en torno a los concursos de belleza en M¨¦xico y la baja politica que los mueve. Salas interpreta a la directora del certamen, Concepci¨®n, una mujer oscura dispuesta a llegar hasta las ¨²ltimas consecuencias por conseguir lo que desea. Violencia, drogas, prostituci¨®n y un esc¨¢ndalo pol¨ªtico enterrado bajo las lentejuelas, el maquillaje y los focos se combinan en...
Ilse Salas (Ciudad de M¨¦xico, 40 a?os) no esquiva ninguna pregunta y se mete en m¨¢s de un jard¨ªn. La actriz mexicana estrena este domingo nueva serie, Se?orita 89, un thriller dram¨¢tico, que podr¨¢ verse en la plataforma Starzplay, en torno a los concursos de belleza en M¨¦xico y la baja politica que los mueve. Salas interpreta a la directora del certamen, Concepci¨®n, una mujer oscura dispuesta a llegar hasta las ¨²ltimas consecuencias por conseguir lo que desea. Violencia, drogas, prostituci¨®n y un esc¨¢ndalo pol¨ªtico enterrado bajo las lentejuelas, el maquillaje y los focos se combinan en esta historia escrita y dirigida por Luc¨ªa Puenzo (La Jaur¨ªa). La serie est¨¢ coprotagonizada por las actrices Ximena Romo, Natasha Dupeyron, B¨¢rbara L¨®pez, Coty Camacho y Leidi Guti¨¦rrez.
Formada en el teatro, Ilse Salas se ha labrado una carrera en el cine y la televisi¨®n con papeles cada vez m¨¢s interesantes y complejos. Esa evoluci¨®n interpretativa la llev¨® a ganar el premio Ariel a la mejor actriz en 2018 por Las ni?as bien, dirigida por Alejandra M¨¢rquez Abella y a estar nominada en 2015 por su papel en G¨¹eros, de Alonso Ruizpalacios. Su ¨²ltima pel¨ªcula, Plaza Catedral, de Abner Benaim, fue el primer filme paname?o preseleccionado para Mejor Pel¨ªcula Extranjera en los Oscar.
La actriz tiene unos profundos ojos verdes. Su belleza es prolija, con un dejo de imperfecci¨®n que ha convertido en su sello personal. Cuando habla, mueve las manos, como si parte de las palabras que fuera a decir las tuviera en la punta de los dedos. Viste un traje masculino de lino blanco a rayas y unos zuecos de madera. Todo lo contrario a lo que llevar¨ªa esa particular Medea que representa su ¨²ltimo personaje.
Pregunta. Concepci¨®n es una mujer poderosa que utiliza a las mujeres de su concurso de belleza para sus propios fines, ?c¨®mo fue preparar este personaje?
Respuesta. Se trataba de indagar en las mujeres de la ¨¦poca. Me inspir¨¦ en mujeres que he conocido a lo largo de la vida que van con esta facha de ultrafemeninas: el pelo largo, las joyas¡ pero en realidad son en todas sus acciones hipermasculinizadas. Una mujer que ten¨ªa poder en los a?os ochenta, noventa, normalmente lo ejerc¨ªa de una manera patriarcal porque no conoc¨ªa otra. Hasta la fecha es muy com¨²n ver a mujeres ricas y poderosas siendo muy masculinas en ese sentido. Creo que es una mujer macho en tanto que ejerce su poder con violencia, con manipulaci¨®n y subestimando a quienes tiene a su mando.
P. ?Dir¨ªa que Se?orita 89 habla de las diferentes violencias que se ejercen contra las mujeres?
R. S¨ª, entre otros temas, como la gesti¨®n pol¨ªtica de un pa¨ªs, como la sororidad, la amistad y las contradicciones en las que caemos como mujeres y como personas. C¨®mo para conseguir un puesto o un lugar de poder, flanqueamos nuestros escr¨²pulos.
P. ?Cree que los concursos de belleza est¨¢n abocados a extinguirse?
R. Quiero pensar que s¨ª y me sorprende que no lo hayan hecho ya, porque no puedo entender, bajo ninguna justificaci¨®n, que sigan existiendo.
P. ?ltimamente se habla de ellos desde el empoderamiento y la diversidad de las mujeres, como en el ¨²ltimo Miss Universo¡
R. No hay manera en la que una cosa se pueda unir con la otra. Est¨¢n poniendo a mujeres a competir y est¨¢n juzgando su aspecto f¨ªsico. No hay nada de eso que conviva con el feminismo. Me preguntaban si no cre¨ªa que estos concursos aportan algo bueno al pa¨ªs. Yo creo que no. Estoy segura de que le aporta estabilidad econ¨®mica a la mujer que lo gane, pero no creo que le aporte nada al pa¨ªs. M¨¢s bien convertir a las mujeres en un producto, les ha servido a los hombres para poder para avalar sus planes pol¨ªticos o su gesti¨®n. Ahora, s¨ª es importante para m¨ª mencionar que por mucho que despotrique de los cert¨¢menes de belleza que me parecen obsoletos, arcaicos y violentos, s¨ª cambi¨® mi percepci¨®n despu¨¦s de hacer Se?orita 89 sobre las mujeres que participan en ellos
P. ?En qu¨¦ sentido?
R. Porque juzgaba a las participantes como fr¨ªvolas, huecas o como mujeres con una ambici¨®n econ¨®mica que las cosifica. Y entend¨ª que para muchas es una v¨ªa de escape a otra realidad que suele ser dura y hostil. As¨ª como las explotan en un concurso de belleza, han sido explotadas quiz¨¢ en su entorno. Por lo tanto, sigo juzgando a los concursos, m¨¢s no a las mujeres que participan en ellos.
P. ?Cu¨¢l fue una de las escenas que m¨¢s le impact¨®?
R. La del primer desfile de ellas en ropa interior, midi¨¦ndoles las piernas, las tetas... Me afecta mucho esa escena porque lo veo hoy en d¨ªa igualito, quiz¨¢ ahora son las redes sociales las que juzgan, pero seguimos siendo productos. O sea, se usa el cuerpo de una mujer para vender cosas. Se modifica o se inculca la necesidad de modificarlo y no se nos ense?a a amar nuestros defectos y amar nuestros cuerpos como son. Se nos ense?a a consumir cosas que los modifiquen.
P. ?A usted le ha pasado eso en el mundo del cine?
R. S¨ª. Pero han sido revelaciones que han llegado con la edad y con ir adquiriendo conciencia de muchas cosas. Yo nunca repar¨¦ en los privilegios de mi color de piel, por ejemplo. Nunca me sent¨ª particularmente privilegiada hasta que escuch¨¦ testimonios de otras mujeres que han sido rechazadas o subestimadas por su color de piel. Y la violencia y el abuso... claro que se ve en nuestra industria, pero estamos en un sistema donde se normalizan tantas cosas que tampoco es f¨¢cil. S¨ª me tir¨® la onda y me dio un mejor puesto, pero tampoco me viol¨®, ?no? Lo asumes como los gajes del oficio. Todas esas son heridas patriarcales, profund¨ªsimas, que normalizamos... Por eso se cre¨® ¡®Ya es hora¡¯, un movimiento mexicano de mujeres en la industria cinematogr¨¢fica. Ha sido muy fuerte escuchar testimonios de abuso de los que yo jam¨¢s me enter¨¦ y con los que he convivido.
P. ?Y c¨®mo le hace sentir eso?
R. Pues hay un sentimiento de culpa por no haber escuchado, no haber visto, no haber hecho nada. Te abre los ojos y los o¨ªdos para no permitir que eso vuelva a pasar.
P. Me llaman la atenci¨®n sus ¨²ltimos personajes porque tienen una profundidad y transformaci¨®n brutal. Concepci¨®n (Se?orita 89, 2021), Sof¨ªa (La ni?as bien, 2018), Alicia (Plaza Catedral, 2021), ?por qu¨¦ eligi¨® estos papeles?
R. No dir¨ªa que es suerte, porque me lo busco. Busco trabajos as¨ª a costa de rechazar muchos otros que no suponen un significado personal.
P. ?Qu¨¦ tienen de Ilse Salas estas mujeres?
R. Supongo que soy bien dram¨¢tica, no s¨¦ (bromea). Me gusta dotar de profundidad a los personajes que as¨ª lo piden. Alicia es una madre viviendo el duelo de su hijo, Sof¨ªa se cae del pedestal que era su reino y Concepci¨®n tiene mucho de Medea, una mujer que se da cuenta de la traici¨®n a su g¨¦nero cuando el da?o ya est¨¢ hecho, de que es parte del problema y de que es una traidora. Pero como no es una psic¨®pata, le duele, le afecta y la transforma.
P. ?C¨®mo se consigue ser una actriz tan vers¨¢til? Ha pasado por el teatro, le entra a la comedia, a la tragedia¡
R. Tomo muy en serio mi carrera, pero no a m¨ª misma. Hacer la serie 100 d¨ªas para enamorarnos es un claro ejemplo. Al principio dud¨¦ mucho en tomarla y al final dije pero, ?por qu¨¦ estoy dando tantas vueltas? Quiero vivir en la playa seis meses [fue grabada en Miami] y quiero morirme de risa con Erick El¨ªas y Mariana Trevi?o. Y al final, fue fant¨¢stico. Me conoci¨® gente que ni siquiera me conoc¨ªa.
P. H¨¢blenos de Plaza Catedral y de la muerte de su compa?ero en la pel¨ªcula, Fernando de Casta, un ni?o de la calle que se interpretaba a s¨ª mismo. ?C¨®mo fue trabajar con ¨¦l?
R. Fue una experiencia ¨²nica. Como decimos en M¨¦xico, un garbanzo de a libra, una joyita perdida. Con Fernando tuve un clic inmediato. No me hab¨ªa topado con nadie tan luminoso y complejo porque su realidad era muy dura. Siempre le voy a recordar como un ni?o brillante, inteligent¨ªsimo, muy chistoso, muy talentoso, muy impaciente, dif¨ªcil de detener. Como les pasa a todos los ni?os en situaciones as¨ª de vulnerables a los que obligan a vivir sin tiempo para nada y nadie se lo da porque no hay condiciones.
P. ?Con qu¨¦ director o directora le gustar¨ªa trabajar?
R. Que no haya trabajado todav¨ªa, con Lucrecia Martel. Es mi sue?o. Pero no se lo puedo decir porque entonces ya se va a decepcionar. Tengo que ser discreta y esperar que alg¨²n d¨ªa vea mi trabajo y quiz¨¢s me contemple. Y que ya haya trabajado, con Alonso Ruiz Palacios.
P. Eso lo tiene m¨¢s f¨¢cil, ?no? Es el padre de sus hijos.
R. ?Qu¨¦? (dice entre risas) ?T¨² has visto otra pel¨ªcula que haya hecho con ¨¦l? Ya le dije que Museo no cuenta. Yo digo de protagonista. Ya se lo he dicho de todas las formas posibles. Espero que alg¨²n d¨ªa suceda porque es, por mucho, mi director favorito.
P. ?Y c¨®mo es la casa de una actriz y un cineasta?
R. Aburrid¨ªsima, ja ja ja.
P. Cuesta creerlo.
R. Pues hay demasiado cine en la casa, demasiado teatro. Por m¨¢s que queremos que nuestros hijos hagan otras cosas, que se interesen por otras cosas, a veces es inevitable. Sus juegos siempre giran en torno a la ficci¨®n, a dirigir y hacer la m¨²sica para sus videos, sus pel¨ªculas y disfraces. O sea, no piden juguetes, piden disfraces. Me disculpo de antemano, como dice Luis Pescetti: ¡°Estoy depositando al fondo eterno del psicoan¨¢lisis de mis hijos¡±, ja ja.
P. Quiz¨¢ sea dif¨ªcil que les salga un hijo inform¨¢tico¡
R. Tengo la esperanza de que salgan cient¨ªficos porque sus abuelos son doctores, pero no est¨¢ pasando. No les puedo disuadir si es lo que quieren, cuando ven que nosotros nos divertimos tanto en nuestras vocaciones. Algo que tenemos Alonso y yo es una vocaci¨®n muy profunda, realmente nos gusta lo que hacemos.
P. ?En qu¨¦ situaci¨®n dir¨ªa que se encuentra la industria del cine mexicano actualmente?
R. La industria del cine mexicano es muy poderosa y me parece una pena que no se le haga crecer m¨¢s. Creo que tiene que ver con los gobiernos en turno, sin ¨¢nimo de despotricar del actual, porque es lo que es y estamos ah¨ª por muchas razones, pero tiene tantas posibilidades de crecer, tanto prestigio internacionalmente que siento que le faltan m¨¢s est¨ªmulos. El cine es identidad y es un trabajo que genera paz, que genera empat¨ªa, donde trabajan cientos de familias... Siento frustraci¨®n porque nuestros gobiernos no lo hagan crecer como podr¨ªa.
P. ?Cree que se puede luchar contra la violencia desde el cine?
R. Totalmente. S¨ª, s¨ª, s¨ª, s¨ª. O sea, y desde la cultura. Contamos historias que generan catarsis en la gente. Yo he sido transformada por cosas que vi en una pel¨ªcula. Cualquier cosa que te haga pensar y replantearte cosas puede ser muy poderosa.
P. ?Qu¨¦ opini¨®n le merece precisamente el peso que tiene la cultura en el actual gobierno de M¨¦xico?
R. Me duele que se le considere un lujo, un privilegio cuando es un derecho. Si se viera desde nuestros gobiernos como un derecho humano, creo que tendr¨ªamos a nuestro favor much¨ªsimo, pero se le ve como un lujo y creo que ese es el principal error.
P. ?Qu¨¦ le hace falta al cine en este momento despu¨¦s de la pandemia: m¨¢s ayudas, m¨¢s distribuci¨®n, m¨¢s proyecci¨®n?
R. En la actualidad nuestro futuro depende de los streamers. Si t¨² quieres hacer una pel¨ªcula y conseguir los millones necesarios, tienes que aliarte con estas plataformas que van a coartar tu libertad porque van a producir cosas que les funcionen para conseguir suscriptores. Se extra?an est¨ªmulos de tu gobierno, de otros inversionistas que te permitan tener m¨¢s libertad. Se extra?a el cine de autor.
P. ?Hacer cine para plataformas no es vender un poco tu alma al diablo?
R. No soy autora, pero a Alonso le ha costado 10 veces m¨¢s levantar su siguiente pel¨ªcula porque no ha querido venderle el alma al diablo. Estamos en un momento complicado. O haces tu pel¨ªcula con los millones de estas plataformas, pero les das el corte final o probablemente no la hagas, o la haces con una quinta parte [del presupuesto].
P. ?Le gustar¨ªa en alg¨²n momento pasar al otro lado de la c¨¢mara y dirigir?
R. Pues ya estoy un poco atr¨¢s en una en una serie que tenemos junto con Alejandra M¨¢rquez, Casandra Ciangherotti y Johanna Murillo, parte del reparto de Las ni?as bien. Tentativamente se llama La liberaci¨®n, aunque todav¨ªa no hay fecha para empezar a grabar.
P. Suena en la l¨ªnea de este movimiento de mujeres del que hablaba antes¡
R. S¨ª, pues es que es como nuestro monotema ahora, la verdad. No me canso de esta discusi¨®n. Como feminista tengo muchas dudas y muchas contradicciones. Y la serie va por ah¨ª, queremos hablar del tema con mucho sentido del humor.
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