Beatriz Paredes se postula oficialmente ante el PRI como candidata presidencial para 2024
La senadora aboga por una alianza de partidos que recupere ¡°la grandeza de M¨¦xico¡±
La senadora priista Beatriz Paredes se ha postulado oficialmente ante su partido como candidata a las presidenciales de 2024. En ocasiones anteriores hab¨ªa expresado su deseo de competir por la presidencia de M¨¦xico, pero este lunes lo ha anunciado ante la plana mayor del PRI en un acto solemne donde ha proclamado su intenci¨®n de encabezar ¡°una gran alianza de partidos por la sociedad civil. Vamos a recuperar la historia democr¨¢tic...
La senadora priista Beatriz Paredes se ha postulado oficialmente ante su partido como candidata a las presidenciales de 2024. En ocasiones anteriores hab¨ªa expresado su deseo de competir por la presidencia de M¨¦xico, pero este lunes lo ha anunciado ante la plana mayor del PRI en un acto solemne donde ha proclamado su intenci¨®n de encabezar ¡°una gran alianza de partidos por la sociedad civil. Vamos a recuperar la historia democr¨¢tica de M¨¦xico, la justicia social, la historia de la legalidad. Vamos por la grandeza de M¨¦xico¡±, ha lanzado en un discurso de tono electoral.
Paredes se destapa en un momento en que el PRI est¨¢ pasando por terribles fracturas internas que han llevado a algunas corrientes priistas a pedir la dimisi¨®n del l¨ªder nacional, Alejandro Moreno. La ¡°militarizaci¨®n de M¨¦xico¡±, que la oposici¨®n ha concretado en la prolongaci¨®n hasta 2028 de las tareas de seguridad ciudadana del Ej¨¦rcito en las calles, as¨ª como el paso de la Guardia Nacional bajo el mando de la Defensa, han sido dos batallas que han agrietado al partido. Los priistas del Congreso plantearon, al gusto de Morena, la pr¨®rroga del Ej¨¦rcito en las calles, pero los del Senado se mostraron firmemente en contra, aunque finalmente, con algunas concesiones, doblaron el brazo de los senadores y aprobaron la propuesta.
El enorme disenso en el partido ten¨ªa un tel¨®n de fondo, los apuros jur¨ªdicos que est¨¢ atravesando el l¨ªder, Alejandro Moreno, a quien la Fiscal¨ªa de Campeche quiere enjuiciar por delitos de enriquecimiento il¨ªcito y otros. Para Alito, como es conocido en el partido, el apoyo de Morena en el Congreso es vital porque le garantiza su aforamiento y le protege de caer en manos de la justicia. De ah¨ª que todos interpretaran que su postura frente al Ej¨¦rcito era una concesi¨®n con favor a cambio.
En este escenario de quiebre partidista, Beatriz Paredes (Tlaxcala, 69 a?os) ha dado un paso al frente. La senadora se define como una mujer feminista y vanguardista y en su discurso se detiene en pol¨ªticas inequ¨ªvocamente de izquierdas, como el combate a la pobreza o la mejor manera de priorizar la educaci¨®n o la sanidad. En una reciente entrevista con este peri¨®dico aseguraba: ¡°Los mexicanos est¨¢n preparados para votar por una mujer¡±. No es aventurado decir que quiz¨¢ tengan que decidir entre una mujer u otra mujer, es decir, entre Claudia Sheinbaum o Beatriz Paredes, pero falta mucho todav¨ªa, en t¨¦rminos pol¨ªticos, para eso.
El enorme empuje de Morena, el partido del presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, tiene a la oposici¨®n un tanto deambulante. La alianza entre el PRI, PRD y PAN, orquestada para enfrentar el tir¨®n de Morena en las urnas, no ha dado los resultados que cabr¨ªa esperar. Pocos han sido los ¨¦xitos electorales que pueden esgrimir. Y ahora parece tocada de muerte, precisamente por las ¨²ltimas votaciones en el Congreso y el Senado sobre la militarizaci¨®n. Los dirigentes panista y perredista anunciaron que el bloque quedaba suspendido temporalmente cuando el PRI plante¨® aquella pol¨¦mica iniciativa en el Congreso.
A Paredes, sin embargo, le parece ¡°sabio¡± ir en alianza, siempre y cuando, explica, ¡°se comparta un programa¡±. ¡°No creo en la lucha por el poder mismo, me parece que no tiene sentido¡±, dijo en entrevista con este diario. ¡°Necesitamos plantearle a la poblaci¨®n mexicana un proyecto con soluciones a problemas concretos, entonces hay que ponerle fondo a la alianza y eso significa que haya la posibilidad de compartir un proyecto similar que respete el desarrollo democr¨¢tico¡±. Y a?adi¨®: ¡°Quienes aspiremos a tener la posibilidad de competir tenemos que trascender el nivel de los partidos pol¨ªticos y vincularnos con la ciudadan¨ªa¡±.
La senadora tiene un discurso templado, alejado al menos de las estridencias que se escuchan de tarde en tarde en la C¨¢mara alta. Considera que hay teor¨ªa pol¨ªtica de este sexenio rescatable, como la lucha por la corrupci¨®n, aunque discrepa de las medidas implementadas para ello. La corrupci¨®n es, precisamente, una de las grandes losas que est¨¢n sepultando al PRI. No hay d¨ªa que no salga un esc¨¢ndalo de gobiernos pasados y son varios los miembros destacados de la Administraci¨®n de Pe?a Nieto (2012-2018) que han pasado o est¨¢n en la c¨¢rcel o son perseguidos por la justicia. ¡°Yo no soy corrupta. Y asumo que en mi partido muchos militantes o figuras distinguidas cometieron errores. Que se les juzgue. Si no lo hacemos, el nivel de desencanto y de desapego de los mexicanos hacia la pol¨ªtica va a seguir siendo muy alto¡±, dec¨ªa Paredes recientemente.
La senadora critica que el M¨¦xico actual est¨¢ transitando por una suerte de caudillismo que la ciudadan¨ªa ya dio por erradicado. ¡°Esta disciplina acr¨ªtica le hace mucho da?o al Congreso, porque se minan las posibilidades de la construcci¨®n de acuerdos¡±. Aboga adem¨¢s por nuevas formas de relacionarse y comunicarse con la poblaci¨®n, muy descre¨ªda y alejada de la pol¨ªtica, en M¨¦xico, como en tantos otros pa¨ªses, si bien la desesperanza en M¨¦xico parece m¨¢s acusada y enquistada entre los j¨®venes, que d¨¦cada tras d¨¦cada se desencantan con sus pol¨ªticos. ¡°Los pol¨ªticos no logramos comunicar. A la gente no le gusta c¨®mo hablamos, prefieren frases cortas. No le gusta la especulaci¨®n. Hubo una revoluci¨®n en las maneras de comunicarse que nos tom¨® por sorpresa. Que no hemos logrado aprender¡±. Paredes se muestra interesada por ¡°entender lo que le est¨¢ pasando a M¨¦xico¡±. Cree que el discurso del Gobierno contra la corrupci¨®n est¨¢ manchando a toda la clase pol¨ªtica. ¡°Entonces, a la sociedad le parece que todos somos una bola de corruptos¡±.
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