La comisi¨®n de la Guerra Sucia reinterpreta medio siglo de violencia en M¨¦xico

Silenciada durante d¨¦cadas, entendida como una serie de embestidas contra la disidencia pol¨ªtica, una nueva imagen de la Guerra Sucia toma cuerpo en M¨¦xico. Este viernes, el Mecanismo de Esclarecimiento Hist¨®rico (MEH) de la comisi¨®n que investiga el aparato contrainsurgente del Estado priista, todopoderoso durante la segunda mitad del siglo pasado, presenta su primera colecci¨®n de hallazgos. Son casi 5.000 p¨¢ginas que aspiran a cambiar la idea que la sociedad tiene de las ¨²ltimas d¨¦cadas del siglo XX en el pa¨ªs, concretamente de 1965 a 1990, a?os centrales de la represi¨®n.

La colecci¨®n, colgada esta madrugada en la web del MEH, parte de una idea principal, que el aparato contrainsurgente fue un monstruo polifac¨¦tico, cuyos intereses trascend¨ªan la disidencia pol¨ªtica. Adem¨¢s de campesinos, obreros y estudiantes en la ¨®rbita de la guerrilla, el monstruo atac¨® todo lo que amenazara su idea de desarrollo y orden, desde vecinos que defend¨ªan sus casas contra nuevas construcciones, a refugiados guatemaltecos que hu¨ªan del genocidio en el pa¨ªs vecino, periodistas cr¨ªticos, homosexuales, transexuales, o devotos que se sal¨ªan de la ruta del catolicismo oficial.

El informe mapea geograf¨ªas apenas conocidas y da cuenta de 46 masacres, con no menos de 385 v¨ªctimas mortales. Tambi¨¦n da cuenta de vuelos de la muerte en regiones cuya existencia se desconoc¨ªa, caso de Chiapas. Es informaci¨®n que complementa esfuerzos anteriores, gubernamentales e independientes, caso paradigm¨¢tico de la Fiscal¨ªa que cre¨® el presidente Vicente Fox, del PAN, a principios de siglo, centrada en la represi¨®n contra disidentes pol¨ªticos. Aquella experiencia acab¨® de malos modos, con los investigadores enfrentados al Gobierno, que no reconoci¨® sus resultados. Ahora, el foco se aleja y ofrece una visi¨®n m¨¢s completa de la represi¨®n estatal.

¡°Los medios coercitivos del Estado no solo fueron puestos al servicio de sus fines pol¨ªticos, sino tambi¨¦n al servicio y defensa de un modelo de desarrollo econ¨®mico extractivista, de acumulaci¨®n de capital y en el que el Estado se hac¨ªa part¨ªcipe de la econom¨ªa criminal¡±, se?ala el informe, sobre su idea principal. ¡°Cada gobernador, cada corporaci¨®n policial, cada mando militar, termin¨® por interpretar qu¨¦ o qui¨¦n era un comunista, qui¨¦n representaba una amenaza, c¨®mo hab¨ªa que reprimir a las disidencias, disciplinar a la poblaci¨®n y garantizar una gobernabilidad autocr¨¢tica para la permanencia del r¨¦gimen pol¨ªtico de partido ¨²nico¡±, a?ade.

Otra idea subyace a las miles de p¨¢ginas del informe, una noci¨®n de permanencia, de que la hidra represora, lejos de desaparecer, se transform¨® y sobrevivi¨® a las reformas pol¨ªticas, desde la m¨¢s temprana, firmada durante el sexenio de Jos¨¦ L¨®pez Portillo (1976-1982), a la perdida de hegemon¨ªa del PRI y la llegada del PAN, a finales de siglo. ¡°Los nudos de impunidad fueron creados en el periodo de Guerra Sucia y siguen activos hoy¡±, defiende Carlos P¨¦rez Ricart, uno de los cuatro integrantes del MEH. ¡°Los patrones de violencia pueden ser distintos, pero hay elementos que unen una violencia con la otra, el hecho, por ejemplo, de que las instituciones perpetradoras del pasado, polic¨ªas, fiscal¨ªas, sistema judicial, no fueron renovadas¡±.

Firmado por tres de los cuatro comisionados del MEH, Abel Barrera, David Fern¨¢ndez y el propio Ricart, la colecci¨®n se?ala los nombres de 8.593 v¨ªctimas de violaciones graves a derechos humanos, entre ejecuci¨®n, tortura, desaparici¨®n forzada, etc¨¦tera. Se trata de una cifra incompleta. La cuarta comisionada, Eugenia Allier, que ha trabajado en solitario desde hace meses, presentar¨¢ su propia colecci¨®n en las pr¨®ximas semanas, centrada en los perseguidos pol¨ªticos cl¨¢sicos, guerrilleros, estudiantes y sindicalistas, lo que augura un aumento de esa cifra. Sus n¨²meros y el dibujo que presente de la persecuci¨®n a disidentes pol¨ªticos arrojar¨¢ la imagen m¨¢s completa que M¨¦xico ha tenido nunca sobre la Guerra Sucia.

Est¨¢ por ver c¨®mo encaja el Gobierno los dos informes. El MEH es solo uno de los cinco mecanismos del organismo, cuyo nombre oficial es Comisi¨®n para el Acceso a la Verdad, el Esclarecimiento Hist¨®rico y el Impulso a la Justicia de las violaciones graves a los derechos humanos cometidas de 1965 a 1990 en M¨¦xico, COVEHJ. Antes del cambio de Gobierno, el primero de octubre, la subsecretar¨ªa de Gobernaci¨®n, encabezada por Arturo Medina, deber¨¢ tomar lo entregado por Ricart, Barrera y Fern¨¢ndez, el informe de Allier, juntarlos como decida con los trabajos del resto de mecanismos y presentarlo todo en un solo documento. De momento no hay fecha para su divulgaci¨®n.

De las masacres a la Fiscal¨ªa

El fracaso de la fiscal¨ªa de Fox, la c¨¦lebre Femospp, iba m¨¢s all¨¢ del alboroto final. Despu¨¦s del trabajo realizado en sus a?os, los resultados judiciales fueron m¨ªnimos. Ahora, uno de los retos de la COVEHJ es convertir la informaci¨®n recopilada estos a?os en investigaciones que la Fiscal¨ªa General de la Rep¨²blica (FGR) pueda llevar eventualmente ante el juez. ¡°Existe un plan de trabajo para que la FGR atraiga algunos casos. Ellos empezaron trabajando con los archivos de la Femospp, que son 200 y tantas carpetas de investigaci¨®n¡±, se?ala P¨¦rez Ricart. ¡°Lo que esperamos es que ellos tomen nota de lo que nosotros hicimos para que ellos contin¨²en con la investigaci¨®n jur¨ªdica de nuestro trabajo de esclarecimiento hist¨®rico¡±.

El experto se?ala tres puntos que, a su juicio, son fundamentales, ¡°el tema de los vuelos de la muerte, las masacres y violaciones a derechos humanos, en que claramente hay perpetradores identificados¡±. Los vuelos de la muerte, pr¨¢ctica castrense que consist¨ªa en deshacerse de cuerpos de represaliados, tir¨¢ndolos al mar desde aviones, ha sido noticia estas semanas por la publicaci¨®n de un documento desconocido, una carta que un presunto militar mand¨® hace 20 a?os a la lideresa de un colectivo de familiares de personas desaparecidas, se?alando los nombres de 183 v¨ªctimas de los vuelos. El informante da nombres de los perpetradores. Otros documentos y testimonios sobre esta pr¨¢ctica podr¨ªan ayudar a la FGR a armar un caso sobre el tema y presentarlo ante el juez.

El informe documenta masacres de las que no se sab¨ªa demasiado y que podr¨ªan acabar igualmente en expedientes ministeriales, caso de la masacre de Monte Chila, en Puebla, en enero de 1970. Entonces, militares y polic¨ªas judiciales asesinaron a al menos 50 campesinos, parte del ¡°movimiento campesino de peticionarios de tierras¡±. Testimonios y documentos muestran c¨®mo las autoridades llegaron a la zona, en la sierra norte de Puebla, a realizar una ¡°batida de maleantes¡±. Los maleantes resultaron ser campesinos que peleaban por conseguir un pedazo de tierra. Cuando los militares les dieron el alto, los campesinos dispararon sus escopetas. Varios soldados murieron. La respuesta fue brutal.

Las masacres comparten espacio con hallazgos sobre vuelos de la muerte desconocidos, caso de Chiapas. En 1980, militares usaron esta t¨¢ctica para acabar con los liderazgos de la poblaci¨®n en la zona de Huitiupan, donde el Gobierno planeaba construir una planta hidroel¨¦ctrica. Para la ejecuci¨®n de este proyecto, el Ej¨¦rcito impuso un cerco militar sobre un estimado de 14.000 personas. Los l¨ªderes comunitarios de los ejidos afectados, ind¨ªgenas de origen batsi vinik o tsotsil, fueron desaparecidos y ejecutados en vuelos de la muerte, seg¨²n hemos documentado a trav¨¦s de fuentes testimoniales¡±, se?ala el informe.

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