La masacre de Quer¨¦taro echa gasolina a la crisis de violencia en el arranque del Gobierno de Sheinbaum
La oposici¨®n capitaliza la tragedia que dej¨® al menos 10 muertos y 13 lesionados para exigir resultados y un viraje en la estrategia de seguridad de la presidenta, que no se pronunci¨® en las horas que siguieron al ataque
Una nueva tragedia ha cimbrado a M¨¦xico. Un comando armado irrumpi¨® en el bar Los Cantaritos de Quer¨¦taro y abri¨® fuego el s¨¢bado por la noche contra decenas de personas. El ataque dur¨® un par de minutos y dej¨® al menos 10 muertos y 13 heridos, entre ellos dos graves, de acuerdo con las autoridades. La masacre volvi¨® a encender los cuestionamientos por la ola de violencia que azota al pa¨ªs en el arranque del Gobierno de Claudia Sheinbaum y ha entrado de lleno al terreno pol¨ªtico; al ser enarbolada por la oposici¨®n para exigir un endurecimiento de la nueva estrategia de seguridad de la presidenta, presentada el pasado 8 de octubre, una semana despu¨¦s de la toma de posesi¨®n. En las horas que siguieron al ataque, la presidenta no se pronunci¨® y privilegi¨® un viaje de trabajo al Estado norte?o de Zacatecas, uno de los focos rojos de la inseguridad.
¡°Habr¨¢ castigo contra los responsables de este acto brutal¡±, prometi¨® el gobernador, Mauricio Kuri, del opositor Partido Acci¨®n Nacional (PAN). El ataque en Quer¨¦taro, un Estado que no suele estar entre los m¨¢s violentos, ha desbordado las preocupaciones por su brutalidad y la posibilidad de un efecto contagio desde la vecina Guanajuato, la localidad que m¨¢s asesinatos ha registrado en M¨¦xico en lo que va de a?o, con 1.863 investigaciones abiertas hasta finales de septiembre. ¡°No vamos a permitir contaminarnos de lo que pasa en otras partes¡±, dijo el panista.
A tan solo 200 kil¨®metros de la capital, Quer¨¦taro es una pieza clave en el mapa criminal de M¨¦xico, se?ala el analista David Saucedo. Colinda al oeste con Guanajuato, en disputa durante casi cinco a?os entre el Cartel de Santa Rosa de Lima, una poderosa organizaci¨®n regional, y el Cartel Jalisco Nueva Generaci¨®n, una de las fuerzas criminales m¨¢s peligrosas del mundo. Saucedo se?ala que Quer¨¦taro es la retaguardia de Santa Rosa de Lima, la zona donde se repliega despu¨¦s de los enfrentamientos, recarga suministros y concentra buena parte de su poder de fuerza. El Cartel Jalisco tiene amplia presencia en Guanajuato y el Estado de M¨¦xico, colindante con la capital, y Quer¨¦taro les permitir¨ªa unir esos territorios. Hay al menos otras dos c¨¦lulas importantes en la regi¨®n: La Familia Michoacana y mafias locales que se dedican al tr¨¢fico de combustible.
Las autoridades no han se?alado todav¨ªa a ning¨²n cartel ni han precisado el m¨®vil del ataque, aunque anunciaron una detenci¨®n. Saucedo plantea tres hip¨®tesis, todas enmarcadas en la guerra de carteles. La primera posibilidad es el llamado ¡°cobro de piso¡±, extorsiones que el crimen organizado impone a los negocios para dejarlos funcionar. La otra es el ataque a un punto de venta de droga de un grupo rival, aunque no se ha confirmado la presencia de narc¨®ticos en la escena del crimen. Una m¨¢s es que alguno de los carteles optara por ¡°calentar la plaza¡±: desestabilizar los territorios que controlan los adversarios. El ¨¢ngulo de tiro de los perpetradores y los videos de las r¨¢fagas contra los comensales hacen dudar al especialista de que se trate de un ataque directo y apuntan a un atentado contra la poblaci¨®n civil para infundir miedo.
La oposici¨®n no dud¨® en presionar al Gobierno de Sheinbaum tras el ataque. ¡°Urge poner en pr¨¢ctica la nueva estrategia de seguridad anunciada hace un mes¡±, afirm¨® la excandidata presidencial X¨®chitl G¨¢lvez. La pol¨ªtica asegur¨® que la aproximaci¨®n del expresidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador de poner atenci¨®n a las causas de la violencia ¨Dconocida como ¡°abrazos no balazos¡±¨D no es suficiente y exhort¨® a Sheinbaum a concretar la promesa de fortalecer las capacidades de inteligencia, investigaci¨®n y coordinaci¨®n del Estado mexicano. ¡°La inseguridad nos est¨¢ rebasando y el discurso de responsabilizar a un Gobierno que acab¨®, ya no queda¡±, dijo G¨¢lvez.
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) tambi¨¦n cuestion¨® al oficialismo. ¡°Es una tragedia que expone la incapacidad de las autoridades para garantizar seguridad¡±, se?al¨® el dirigente Alejandro Alito Moreno. Su alfil en la C¨¢mara de Diputados, Rub¨¦n Moreira, se sum¨® a la condena de los hechos. ¡°La indolencia es un regalo para los criminales¡±, afirm¨® el legislador.
Los reclamos se centran en las escenas de brutalidad que se han visto en las ¨²ltimas semanas: la explosi¨®n de dos coches bomba en Guanajuato; la decapitaci¨®n del alcalde de Chilpancingo, en Guerrero; el hallazgo de 11 cad¨¢veres dentro de una camioneta en esa misma ciudad; y la guerra intestina del Cartel de Sinaloa, que ha dejado ya cerca de 320 asesinatos en Sinaloa. El gobernador Kuri, en su doble papel de gestor y opositor, hizo un llamado a la concordia. ¡°Aquellos que han usado estos casos para cuestiones pol¨ªticas, les pido que no es momento de da?ar a ning¨²n partido¡±, coment¨® y agreg¨® que est¨¢ en contacto permanente con Omar Garc¨ªa Harfuch, el secretario de Seguridad de Sheinbaum.
¡°Cuando hay episodios de violencia e inseguridad, se llenan los medios de comunicaci¨®n dando estas noticias, pero pocas veces se reconoce cuando hay trabajo serio, constante y disciplinado¡±, dijo Sheinbaum desde Zacatecas, al asegurar que era el Estado donde m¨¢s han bajado los homicidios. Durante la semana, la mandataria tambi¨¦n atac¨® al dirigente del PAN, Marko Cort¨¦s, que empuja por la tipificaci¨®n del delito de ¡°narcoterrorismo¡±. ¡°No s¨¦ si decir que est¨¢ haciendo el rid¨ªculo o de plano llamarle traidor a la patria porque no hay explicaci¨®n intermedia¡±, arremeti¨® la presidenta.
Adem¨¢s, la victoria de Donald Trump ha encendido las alarmas en M¨¦xico ante el pron¨®stico de nuevas presiones en Seguridad. Trump ha amagado durante a?os con designar a los carteles de la droga como grupos terroristas con la idea de justificar, bajo las leyes estadounidenses, intervenciones y operativos militares en territorio mexicano, lo que socavar¨ªa el Derecho Internacional. Por su parte, relegada a la marginalidad pol¨ªtica tras su fracaso en las elecciones; la oposici¨®n mexicana ha coqueteado con la idea de etiquetar la violencia del narco como ¡°terrorismo¡± en aras de recobrar protagonismo. ¡°Est¨¢ llamando a la intervenci¨®n extranjera¡±, zanj¨® Sheinbaum. El nuevo Gobierno sabe que no puede correr ning¨²n riesgo frente a Trump, que regresa a la Casa Blanca con m¨¢s poder y recursos para cumplir su agenda.
La masacre en Quer¨¦taro no es solo una muestra de la violencia que sufre M¨¦xico, sino que evidencia tambi¨¦n las divergentes posiciones pol¨ªticas ante la crisis de seguridad. En un extremo, el PAN y el PRI buscan capitalizar la violencia que ha marcado el nuevo ciclo pol¨ªtico en el pa¨ªs. En el otro, el Gobierno de Morena tiende a minimizar los incidentes y acusar a sus rivales de lanzar campa?as de desprestigio. Esta vez, los reclamos de la oposici¨®n se estrellaron contra un muro de silencio del oficialismo. Los mayores golpes sobre la mesa, sin embargo, vienen del crimen organizado. En un pa¨ªs que cree haberlo visto todo en m¨¢s de dos d¨¦cadas de guerra contra las drogas; el narco reaparece cada semana con ataques, asesinatos y atentados ¨Dcada uno m¨¢s brutal que el anterior¨D para mandar mensajes a sus enemigos, amedrentar a las autoridades y aterrorizar a la poblaci¨®n.
La narcoviolencia no es casual. Se ha sofisticado y, a solo 40 d¨ªas de la llegada de Sheinbaum al poder, se ha consolidado como el mayor reto para su Administraci¨®n. Adem¨¢s, carcome la confianza de la poblaci¨®n, ensucia el juego pol¨ªtico, siembra el caos en amplias zonas del territorio, tensa la relaci¨®n con Estados Unidos y anualmente le cuesta al pa¨ªs 245.000 millones de d¨®lares, casi el 20% del PIB, seg¨²n el Instituto para la Econom¨ªa y la Paz. Tambi¨¦n destruye vidas: las ¨²ltimas, al menos 10, tras la peor tragedia que se recuerde en Quer¨¦taro en tiempos recientes.