Contra la deshumanizaci車n de las personas migrantes
Las narrativas p迆blicas sobre migraci車n est芍n dominadas por lo que dicen algunos pol赤ticos. Se comparten estad赤sticas, situaciones, tendencias, pero poco se habla de las personas
La semana pasada me invitaron a la presentaci車n de Caravanas, un libro publicado por un grupo de investigadores del Seminario Universitario sobre Desplazamiento Interno, Migraci車n, Exilio y Repatriaci車n (Sudimer), un espacio de estudio del Instituto de Investigaciones Jur赤dicas de la Universidad Nacional Aut車noma de M谷xico (UNAM). Aprovech谷 la ocasi車n para reflexionar en voz alta sobre la necesidad de cambiar las narrativas sobre las migraciones: ?qui谷nes son estas personas migrantes y desplazadas que se encuentra...
Reg赤strate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PA?S, puedes utilizarla para identificarte
La semana pasada me invitaron a la presentaci車n de Caravanas, un libro publicado por un grupo de investigadores del Seminario Universitario sobre Desplazamiento Interno, Migraci車n, Exilio y Repatriaci車n (Sudimer), un espacio de estudio del Instituto de Investigaciones Jur赤dicas de la Universidad Nacional Aut車noma de M谷xico (UNAM). Aprovech谷 la ocasi車n para reflexionar en voz alta sobre la necesidad de cambiar las narrativas sobre las migraciones: ?qui谷nes son estas personas migrantes y desplazadas que se encuentran alrededor nuestro?
El libro alud赤a a esas personas que, en grandes grupos, necesitados de seguridad, con escasos o nulos recursos econ車micos y envueltos en cierta atenci車n medi芍tica puntual, han atravesado Centroam谷rica y M谷xico en busca de otro proyecto de vida fuera de sus comunidades. Al mirarlos, hay quien puede ver en ellos un problema, percibirlos como ※invasores§, como gente que no deber赤a estar cerca nuestro, que mejor deber赤a regresarse. Yo prefiero ver en ellos a personas con historias, envueltas en una situaci車n puntual de vulnerabilidad, que aspiran a que sus derechos sean plenamente reconocidos tanto en su tr芍nsito como en su destino final.
Desde diversos gobiernos se hacen llamados a detener e imponer restricciones a los flujos migratorios que ponen presi車n en las fronteras. Se dirigen a las personas migrantes, pero muchas hacen o赤dos sordos a esos llamados porque su vida y sus proyectos migratorios est芍n inmersos en otra l車gica: la de la esperanza de vivir una vida mejor, la de la huida, la de cambiar su destino para mejorar.
Pobreza, emergencias causadas por fen車menos clim芍ticos extremos, salarios de hambre, desempleo, violencia en sus diferentes manifestaciones, discriminaci車n o los deseos de reunificaci車n familiar son algunas de las ※causas ra赤z§ que hacen que una persona abandone su comunidad.
Desplazamientos forzados y migraciones est芍n al orden del d赤a y, frente a ellas, los gobiernos de nuestra regi車n est芍n intentando que las personas opten por migraciones ordenadas, seguras y humanas.
En diciembre de 2018, m芍s de 150 pa赤ses se adhirieron al Pacto Mundial para la Migraci車n Segura, Ordenada y Regular, el primer acuerdo global para ayudar a aprovechar los beneficios de la migraci車n y proteger los derechos de las personas migrantes, independientemente de su nacionalidad, situaci車n jur赤dica o din芍mica migratoria. Uno de sus objetivos es eliminar todas las formas de discriminaci車n y promover un discurso p迆blico con base emp赤rica para modificar las percepciones de la migraci車n.
Actualmente las narrativas p迆blicas sobre migraci車n est芍n dominadas por lo que dicen algunos pol赤ticos. Se comparten estad赤sticas, situaciones, tendencias, pero poco se habla de las personas. Hace falta desterrar los discursos xen車fobos y humanizar la ret車rica migratoria.
Las personas migrantes suelen ser representadas como una amenaza, un riesgo para nuestro bienestar o nuestra seguridad, y se conoce mucho menos cu芍les son sus necesidades, su diversidad, sus preocupaciones, y los diferentes riesgos que enfrentan en las rutas migratorias que recorren. Hace falta narrar las migraciones m芍s en primera persona, darle voz a quienes las protagonizan, explicar sus motivos y las situaciones que envuelven sus vidas. Hay que escuchar m芍s a las personas migrantes.
Desde la agencia de Naciones Unidas para las Migraciones, hago un llamado a recuperar el discurso de la dignidad de estas decenas de miles de personas que, en el contexto de Centro y Norteam谷rica, atraviesan la regi車n en busca de una nueva vida. Queremos alternativas, opciones de desarrollo colectivo en los pa赤ses, que se impulse con decisi車n una cultura de paz, que haya opciones para una migraci車n digna, regular y segura. Si una persona migrante decide retornar al lugar del que parti車, por voluntad propia o porque le deportaron, hay que procurarle apoyo para una reintegraci車n sostenible.
Esta semana, durante la visita a M谷xico de la Directora Regional de la OIM para Centroam谷rica, Norteam谷rica y el Caribe, Michelle Klein Solomon, haremos lo posible por impulsar estas nuevas narrativas con nuestras contrapartes y socios en M谷xico. Tambi谷n lo haremos desde la Red de Naciones Unidas para la Migraci車n, establecida en el pa赤s desde enero de 2021 y cuya coordinaci車n y secretar赤a t谷cnica corresponde a la OIM.
Desde la Misi車n de OIM en M谷xico creemos en el talento, la resiliencia y la capacidad de las personas migrantes para aportar soluciones a las sociedades de destino, y procuramos proporcionarles informaci車n precisa y oportuna en todas las etapas del proceso migratorio para que tomen las mejores decisiones en sus proyectos.
Aspiramos a empoderar a las y los migrantes y las sociedades para lograr una m芍s plena inclusi車n y cohesi車n social, y a fortalecer la cooperaci車n internacional y las alianzas con diferentes actores gubernamentales, para que la migraci車n segura, ordenada y regular deje de ser una aspiraci車n y se convierta m芍s en una realidad.
Para lograr estos cambios necesitamos, sin duda, del discurso p迆blico migratorio distinto del actual, del que hemos escuchado durante la pandemia por la covid-19, que les estigmatiza, que desinforma, que es xen車fobo, y que alienta el odio todos los d赤as.
Busquemos una nueva narrativa, otro tono, un discurso acompa?ado de acciones que recuperen a las y los individuos, que defiendan con firmeza sus derechos humanos, que se construyan a partir de escuchar a las personas migrantes, de conocer sus aportes, sus necesidades, su presente, y que trate de explicarnos la historia de cada uno y sus circunstancias. Es el cambio que deseamos y al que no renunciaremos jam芍s.
Dana Graber Ladek es representante de la Organizaci車n Internacional para las Migraciones (OIM) en M谷xico.