Afrodescendientes en Am¨¦rica Latina: los retos de la covid-19
Las diferencias ¨¦tnicas y raciales ocupan un papel central y determinante en la desigualdad social de la regi¨®n
Seg¨²n los datos que compila la Universidad Johns Hopkins, en la tarde del 1 de mayo los pa¨ªses de Am¨¦rica Latina ten¨ªan cerca de 225.000 contagiados por la covid-19 y registraban casi 12.000 fallecidos por la enfermedad. Hay pa¨ªses en los que el n¨²mero de casos crece aceleradamente, poniendo a prueba la capacidad de respuesta de los Gobiernos y los sistemas de salud. El virus ha desbordado capacidades hospitalarias y de atenci¨®n en varios pa¨ªses de Europa y en Estados Unidos.
Am¨¦rica Latina enfrenta la pandemia desde una posici¨®n m¨¢s d¨¦bil. Sus sistemas de salud est¨¢n marcados por profu...
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Seg¨²n los datos que compila la Universidad Johns Hopkins, en la tarde del 1 de mayo los pa¨ªses de Am¨¦rica Latina ten¨ªan cerca de 225.000 contagiados por la covid-19 y registraban casi 12.000 fallecidos por la enfermedad. Hay pa¨ªses en los que el n¨²mero de casos crece aceleradamente, poniendo a prueba la capacidad de respuesta de los Gobiernos y los sistemas de salud. El virus ha desbordado capacidades hospitalarias y de atenci¨®n en varios pa¨ªses de Europa y en Estados Unidos.
Am¨¦rica Latina enfrenta la pandemia desde una posici¨®n m¨¢s d¨¦bil. Sus sistemas de salud est¨¢n marcados por profundas desigualdades en cuanto al acceso y la calidad de los servicios. Las v¨ªctimas del virus se concentran, precisamente, en sectores vulnerables, que son tambi¨¦n aquellos que tienen menor acceso a la atenci¨®n m¨¦dica y a las instituciones hospitalarias. De acuerdo con la CEPAL, m¨¢s del 30% de la poblaci¨®n la regi¨®n, unos 190 millones de personas, ya viv¨ªa en la pobreza hacia fines del 2019. Esto era antes de que llegara la covid-19.
En ese contexto, hay un grupo poblacional que, a pesar de acumular vulnerabilidades hist¨®ricas espec¨ªficas, apenas ha recibido atenci¨®n en los planes de respuesta y atenci¨®n de los Gobiernos: las personas afrodescendientes. Descendientes de los millones de hombres y mujeres esclavizados que arribaron a las Am¨¦ricas durante el periodo colonial, representan m¨¢s de 130 millones de personas, entre un 20 y un 25% de la poblaci¨®n total. El grupo registra sistem¨¢ticamente las peores cifras en indicadores fundamentales de bienestar econ¨®mico y social. Seg¨²n el Banco Mundial, mientras en el 2015 los afrodescendientes constitu¨ªan un 38% de la poblaci¨®n de seis pa¨ªses de la regi¨®n para los que existen datos confiables, incluyendo Brasil, su proporci¨®n entre los pobres (47%) y entre las personas viviendo en condiciones de pobreza extrema (49%) era muy superior. La poblaci¨®n afrodescendiente est¨¢ sobrerrepresentada entre los sectores con menores ingresos, experimenta tasas superiores de mortalidad infantil, vive en peores condiciones y tienen menores niveles de escolaridad. Para decirlo brevemente, en Am¨¦rica Latina las diferencias ¨¦tnicas y raciales ocupan un papel central y determinante en la desigualdad social.
Pero no se trata solamente de que las personas afrodescendientes enfrenten la pandemia desde una situaci¨®n desventajosa en general. Existen, adem¨¢s, vulnerabilidades espec¨ªficas, epidemiol¨®gicas y sociales, que aumentan los riesgos de este grupo poblacional. La informaci¨®n disponible sobre la covid-19 sugiere que la letalidad del virus aumenta entre pacientes con problemas m¨¦dicos preexistentes. Muchas de las enfermedades vinculadas a mayores tasas de mortalidad afectan a la poblaci¨®n afrodescendiente de forma desproporcional. Un estudio realizado por el Ministerio de Salud de Brasil, por ejemplo, descubri¨® que en el 2012 la tasa de mortalidad por diabetes mellitus era muy superior entre los llamados pretos que entre los blancos y que lo mismo ocurr¨ªa con la mortalidad asociada a la hipertensi¨®n arterial. Al mismo tiempo, las personas afrodescendientes enfrentan mayores dificultades para acceder a los servicios de salud, en parte debido a su hacinamiento en las zonas m¨¢s pobres, donde dichos servicios son deficitarios, pero tambi¨¦n debido a la discriminaci¨®n. Un estudio realizado por la Defensor¨ªa del Pueblo de Per¨² en el 2011 revel¨® que entre pacientes afroperuanos que hab¨ªan sufrido una enfermedad en los meses anteriores, un 70% decidi¨® no buscarasistencia m¨¦dica debido a la discriminaci¨®n racial que se percibe en los centros hospitalarios. Seg¨²n la CEPAL, en Brasil, Colombia, Panam¨¢, Costa Rica y Uruguay, el n¨²mero de mujeres embarazadas con acceso regular a servicios prenatales es inferior entre las mujeres afrodescendientes que entre las no afrodescendientes.
A pesar de estas vulnerabilidades y de sus consecuencias potenciales, la informaci¨®n disponible sobre el impacto de la covid-19 entre las personas afrodescendientes de Am¨¦rica Latina es pr¨¢cticamente nula. En una reuni¨®n reciente de la Red Interamericana de Altas Autoridades sobre Pol¨ªticas para Poblaci¨®n Afrodescendientes (RIAFRO), los representantes gubernamentales de una decena de pa¨ªses destacaron la importancia de mejorar la calidad de informaci¨®n diferenciada por raza y etnicidad para mejorar la capacidad de respuesta de los Gobiernos.
Como destacaron muchos de los representantes, los programas de apoyo alimentario y financiero frecuentemente no alcanzan a las poblaciones afrodescendientes en la proporci¨®n justa o necesaria. Muchas personas afrodescendientes trabajan en el sector informal, son independientes y tienen dificultad para acceder a programas institucionales de apoyo a los desempleados. El servicio dom¨¦stico, por ejemplo, constituye un sector precario en lo que concierne a protecciones laborales y beneficios fiscales, pero es al mismo tiempo un espacio en el que las mujeres afrodescendientes est¨¢n sobrerrepresentadas. CEPAL estimaba en el 2017 que m¨¢s de un 60% de todas las trabajadoras dom¨¦sticas en la regi¨®n son afrodescendientes. Estas trabajadoras realizan actividades de alt¨ªsimo riesgo y lo hacen desde una desprotecci¨®n casi total. Igualmente desprotegidas se hallan comunidades que carecen de infraestructura hospitalaria y que participan en las econom¨ªas locales desde la informalidad. En servicios vinculados al turismo y el transporte informal su desprotecci¨®n es tambi¨¦n casi total ¨Ccomo en el caso de las trabajadoras dom¨¦sticas.
La falta de estad¨ªsticas y de atenci¨®n a las poblaciones afrodescendientes invisibiliza el impacto diferenciado del COVID-19 entre los m¨¢s vulnerables, aquellos que necesitan m¨¢s ayuda y que enfrentan la epidemia desde posiciones singularmente desventajosas. En este sentido las cifras procedentes de Estados Unidos son inequ¨ªvocas y contundentes: las tasas de infecci¨®n y especialmente de mortalidad son mucho mayores entre los afroamericanos.
Algunos expertos dicen que el virus no discrimina; sin embargo, en las Am¨¦ricas, este virus impacta desproporcionalmente a poblaciones hist¨®ricamente discriminadas como la afrodescendiente. Es imperativo que los gobiernos atiendan de manera urgente este tema para garantizar que la pandemia no refuerce a¨²n m¨¢s las brechas ¨¦tnicas y raciales tradicionales.
Alejandro de la Fuente forma parte del Instituto de Investigaciones Afrolatinoamericanas, Universidad de Harvard.
Susana Matute es presidenta de la RIAFRO.
Judith Morrison forma parte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Roberto Rojas D¨¢vila forma parte de la Secretar¨ªa General de la Organizaci¨®n de Estados Americanos (SG/OEA).