La normalidad que vendr¨¢
La a?oranza por el pasado inmediato, que ahora generalizadamente sentimos, ceder¨¢ paso a las preguntas sin respuesta sobre el mundo que se viene
Arrinconado el virus¡ para cuando exista la vacuna, ?c¨®mo ser¨¢ el mundo que se nos viene? El fin de nuestra pandemia covid-19 llegar¨¢; su fin y sus consecuencias tendr¨¢n, sin embargo, poco de la novela de Saramago, Ensayo sobre la Ceguera. En el camino habr¨¢ dejado una humanidad con miles de personas fallecidas (?ya se lleg¨® a las 300.000!) y econom¨ªas destrozadas (globales, nacionales, familiares y personales).
Pero, tambi¨¦n, un mundo que tiene que mirar al futuro y clama ¨Cdesde ya, y a gritos¨C para que muchas cosas se hagan diferente a lo que est¨¢bamos habituados. La a?oranza p...
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Arrinconado el virus¡ para cuando exista la vacuna, ?c¨®mo ser¨¢ el mundo que se nos viene? El fin de nuestra pandemia covid-19 llegar¨¢; su fin y sus consecuencias tendr¨¢n, sin embargo, poco de la novela de Saramago, Ensayo sobre la Ceguera. En el camino habr¨¢ dejado una humanidad con miles de personas fallecidas (?ya se lleg¨® a las 300.000!) y econom¨ªas destrozadas (globales, nacionales, familiares y personales).
Pero, tambi¨¦n, un mundo que tiene que mirar al futuro y clama ¨Cdesde ya, y a gritos¨C para que muchas cosas se hagan diferente a lo que est¨¢bamos habituados. La a?oranza por el pasado inmediato, que ahora generalizadamente sentimos, ceder¨¢ paso a interrogantes sobre lo que vendr¨¢. A ratos parecer¨ªa que no se ha aprendido nada como que ¡°Zara desata la locura en su reapertura en Francia con largas colas en sus puertas¡±. Como si ese furor indicara que no ha pasado nada.
Pero hay otras visiones ¨Cque espero prevalezcan¨C que parten de algunas preguntas; y por el momento no tienen respuesta. Planteados como retos, y aspiraciones de un ¡°deber ser¡±, hay cinco asuntos que creo destacan de manera particular. De c¨®mo se organicen las cosas en lo pol¨ªtico e institucional ¨Cinterna e internacionalmente¨C depender¨¢ que queden en el camino de las buenas intenciones frustradas o que sean conquistas de la humanidad.
Primero, tendremos el recuerdo de los limpios cielos urbanos y de la transparencia y claridad de mares y r¨ªos de los que hoy podemos gozar. Se estima que este a?o las emisiones de gases de efecto invernadero caer¨¢n, globalmente, un 8%. Se?al palpable de que lo del ¡°calentamiento global¡± no es cuento o exageraci¨®n. Que es obra humana y que acarrea mucha destrucci¨®n est¨¢ cient¨ªficamente demostrado.
Enfrentar decididamente el calentamiento global es, en este contexto, una prioridad insoslayable. Y deber¨ªa ser una pieza central de un multilateralismo y globalizaci¨®n ¡°relanzados¡± que focalicen su atenci¨®n en la gente, su vida y su bienestar.
Segundo, un planeta en el que el 70% de la poblaci¨®n vive en ciudades y mega-ciudades es una fuente variada de afectaci¨®n de derechos: al aire puro, a una vivienda decente, a espacios p¨²blicos generosos y a medios de transporte p¨²blico decorosos.
Se puede afinar y revisar muchas cosas en este proceso de urbanizaci¨®n incontenible, pero se deber¨ªa partir al menos de dos aspectos. Uno: el presente y futuro de las macro ciudades no debe seguir siendo considerado asunto meramente local o de sus alcaldes; es responsabilidad del Estado y de toda la sociedad sin perjuicio de que se refuerce la capacidad de gesti¨®n local. Dos: la movilidad urbana en estas mega ciudades debe ser abordada como emergencia y ser una prioridad. Cuesti¨®n de Estado por lo que supone en recursos desperdiciados y por la afectaci¨®n cotidiana de los derechos de decenas de millones de personas.
Tercero, tratar a la salud como derecho humano¡ que lo es. Que contar con una salud p¨²blica de calidad, en efecto, debe ser tratado como un derecho irrenunciable. Su concreci¨®n ¨Cpara que no quede en proclama ret¨®rica¨C requiere, sin embargo, pol¨ªticas sostenidas de mediano y largo plazo por la enorme asignaci¨®n de recursos que se requiere para satisfacer una aspiraci¨®n as¨ª.
Cuarto, construir equilibrios entre la apabullante utilidad de la inform¨¢tica ¨Cy los logaritmos que le sirven de herramienta¨C y los derechos a la privacidad e intimidad de las personas. Medios t¨¦cnicos ya disponibles que ir¨¢n desempe?ando un papel creciente en ¨¢reas como la educaci¨®n y la salud a distancia, por ejemplo. Pero que no sean instrumentalizados para desvanecer los derechos individuales.
Quinto, la gran recesi¨®n global en la que ya estamos entrando y los retos que plantea. ?Cu¨¢nto y c¨®mo se reconfigurar¨¢ el contexto geopol¨ªtico global a partir de esto? Esta es una cuesti¨®n fundamental. Que salgan ganadores los valores democr¨¢ticos e institucionales y no los del fanatismo, el chauvinismo y la exclusi¨®n es, creo, uno de los principales retos de la d¨¦cada que empieza.