Compraventa de impunidad
No habr¨¢ futuro mientras las instituciones encargadas de controlar los conflictos generados por la criminalidad sean mayoritariamente percibidas como herramientas del poder Ejecutivo y cedan a las presiones de las ¨¦lites y el hampa
Uno de los personajes de la pel¨ªcula El huevo de la serpiente dice que cualquiera puede adivinar el futuro porque es como el huevo de reptil: su fina membrana permite distinguir al ofidio ya formado. En el cl¨¢sico de Ingmar Bergman el desencanto, la hiperinflaci¨®n y el antisemitismo de la Alemania de los a?os veinte anidaron el futuro nazi, que hubiera debido ser abortado antes de romper el cascar¨®n. El embri¨®n de la corrupci¨®n y la impunidad, que infecta la vida p¨²blica y privada de Am¨¦rica Latina, causa fundamental del subdesarrollo, encontr¨® acomodo en la endeblez de las fiscal¨ªas que maltratan los intereses de la sociedad cuando adulteran la investigaci¨®n de los delitos y los criterios de la persecuci¨®n penal.
No habr¨¢ futuro mientras las instituciones encargadas de controlar los conflictos generados por la criminalidad sean mayoritariamente percibidas como herramientas del poder Ejecutivo y cedan a las presiones de las ¨¦lites y el hampa. La desconfianza de los latinoamericanos en los tribunales no es balad¨ª: responde a la convicci¨®n de que act¨²an movidos por razones que nada tienen que ver con la probidad, la insuficiencia de personal o las sobrecargas procesales, y mucho con la corrupci¨®n, la politizaci¨®n y el clientelismo. Los juicios de relevancia medi¨¢tica y jueces paradigm¨¢ticos, con gobernantes, altos funcionarios y mafias econ¨®micas en el banquillo, apenas pueden disimular la obsolescencia de arquitecturas judiciales ineficaces y abusivas con quien menos tiene.
La independencia es elemento clave en las fiscal¨ªas. Brasil es un vergel comparado con M¨¦xico, donde ninguno de los ¨²ltimos cuatro presidentes implement¨® las reformas necesarias para que las v¨ªctimas de robos, secuestros y asesinatos sientan que se investiga y castiga. No hay un redise?o del sistema. Hist¨®ricamente, el ministerio p¨²blico ha sido herramienta de control pol¨ªtico, arsenal contra el enemigo. La abogada Ana Laura Magaloni, profesora del Centro de Investigaci¨®n y Docencia Econ¨®micas, identific¨® en este peri¨®dico un problema esencial de M¨¦xico: el 90-95% de los conflictos se inician en instancias locales de la Federaci¨®n y solo quienes tienen tiempo y dinero para recurrir llegan hasta los tribunales federales que sentencian.
?Qu¨¦ futuro cabe imaginar en un pa¨ªs con el 99.3% de los delitos impunes? ?Qui¨¦n investiga en las fiscal¨ªas? No hay m¨¦todo, ni diligencias, ni la coordinada participaci¨®n de los agentes del ministerio p¨²blico en las pesquisas, discusiones y recursos del proceso; trasgreden obligaciones y moral cuando ignoran la instrucci¨®n, invierten la carga de la prueba, no interrogan a peritos e inculpados y se prestan a la compraventa de impunidad.
M¨¦xico perdi¨® la percepci¨®n de que hay cosas inadmisibles, que se castigan (Magaloni). No hay jueces ni polic¨ªas para tanto delito, ni verg¨¹enza y sentido de Estado para cercenar las cabezas de la hidra con transformaciones estructurales que no admiten dilaci¨®n, pero se postergan por la peque?ez de quienes piensan en la pr¨®xima elecci¨®n en lugar de en las pr¨®ximas generaciones.
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